Secrets and Lies {Completa}

Capítulo 27: Relatos Inesperados

*Emma POV*

No volví a la Sala Común. Draco seguramente me estaba esperando ahí y no quería verlo ahora. Tenía que pensar en lo que Severus me había dicho.

-¿Ahora a dónde vamos?

-¿Acaso importa?

-¿Buscamos algo de comida? Muero por un poco de carne.

Asentí y nos dirigimos a las cocinas. Al vernos, los elfos armaron un gran revuelo y me hicieron sentar en una silla junto al fuego, mientras dos de ellos se llevaba a Chowder para dejarlo cazar su comida.

-¡Ama Potter!- dijeron Kreacher y Dobby al acercarse a mí. Los abracé a ambos antes de recibir sus platos llenos de comida.

-¿Cómo han estado? ¿Dónde esta Fergus?

-Todo bien, señorita. Esta con su dragón, señorita.

-Dobby, ¿podrías decirle que deseo verlo cuando Chowder termine de comer?

El elfo asintió y se retiró corriendo.

-Ama Potter, ¿pasa algo?

-Kreacher, necesito que me digas dónde está enterrado Sirius Black.  

*Draco POV*

No vi a Emma hasta que al día siguiente apareció a la hora del desayuno en el Gran Salón. Observé desde mi lugar al lado de Pansy como Potter y sus amigos la saludaban, invitándola a sentarse con ellos. Pero Emma sólo les sonrió y siguió su camino, aunque no se dirigió a nuestra mesa. Albus Dumbledore se había puesto de pie, igual que Severus y McGonagall, esperando por ella. Al lado de mi ex novia, atrayendo las miradas curiosas de todo el colegio, se encontraba un enorme lobo negro con un collar verde y plateado. Como solía pasar en esas ocasiones, pronto todo el Comedor quedó en silencio.

-Emma, ¿qué significa esto?

-Profesor Dumbledore, no entiendo a que se refiere.

-Señorita Potter, ayer el jefe de su casa nos informó que llegó tarde a la cena y ahora, además de llegar muchas horas tarde una vez mas, aparece con un lobo a su lado. No es una criatura mágica que pueda ser aceptada como mascota.

-¿Le incomoda mi lobo, profesora?

-Emma...

Ella miró a Severus y chasqueó sus dedos. Ante la vista de todos, el lobo se convirtió en un enorme colacuerno húngaro negro que ocupaba más de la mitad de Gran Salón. Miré a mi compañera de casa boquiabierto. ¿Cómo es que había pasado todo un verano en la misma casa que ella y no me había dado cuenta de que podía cambiar a Chowder a voluntad? ¿De qué otras cosas me perdí?

-EMMA POTTER, EXPLÍCANOS YA MISMO QUE ESTÁ PASANDO AQUÍ.

Todos los profesores habían sacado sus varitas, algunos alumnos se habían escondido abajo de las mesas y otros corrían hacía las puertas. Un nuevo chasquido se escuchó y al lado de la Slytherin volvió a aparecer un lobo negro. 

-Profesora, he logrado transformar a mi dragón en otros animales. Tanto él como yo estamos muy orgullosos de esto, porque significa no pasar más tiempo separados del que deberíamos. Vine esta mañana a proponerles el siguiente trato: ustedes me dejan conservar a mi amigo dentro del Castillo y a cambio prometo ser puntual y cumplir con algunas reglas. 

McGonagall miró a Dumbledore, quien miraba a su hija adoptiva con la sorpresa dibujada en los ojos. Tras unos minutos, hizo un movimiento afirmativo con la cabeza y Emma le sonrió. Chasqueó los dedos una tercera vez y Chowder se convirtió en un gato negro, se subió a su hombro y juntos se dirigieron a nuestra mesa. Emma no habló con nadie y ni siquiera me miró, se sentaron en la parte más alejada y desayunaron en silencio. Severus se levantó y segundos después todos los de sexto nos dirigimos a su despacho, para que pudiéramos organizar nuestros horarios. Emma entró primera y salió corriendo unos minutos después, con un pequeño dragón volando tras de ella. Snape me hizo pasar 10 minutos después y miró la lista de materias que había solicitado.

-Todo perfecto Draco. Aquí tienes el horario. Y debo informarte que están listas las inscripciones para jugar al Quidditch este año, por si te quieres anotar.

-Gracias Profesor, me anotaré ahora.

Severus me pasó un pergamino y, tras escribir mi nombre en el, lo miré. 

-¿Qué materias solicitó seguir Emma, señor?

-No creo que sea conveniente que lo sepas Draco. 

-¿Coincidimos en alguna clase?

-Creo en en una o dos, no estoy muy seguro. Y ahora ve a la Sala Común y repasa un poco, te será útil para nuestra clase de hoy.

Le agradecí y me dirigí a la Sala. No había casi nadie, por lo que decidí sentarme junto a la ventana que daba al Bosque y leer un poco mis libros. Estaba enfrascado en el segundo capítulo cuando algo llamó mi atención. Hagrid saludaba a una chica de pelo rubio y juntos caminaban hacia el límite del Bosque. Detrás de ella, un Fwooper anaranjado volaba tranquilo. ¿Esa era Emma? Y si era ella... ¿Qué hacía en el Bosque con el semi gigante?

*Emma POV*

-Lo que hiciste en el desayuno fue arriesgado nena. Asombroso y genial, pero muy arriesgado. 

-¿De que otra forma iban a prestarnos atención a Chowder y a mí? 

-Fue fantástico cuando lo convertiste en dragón. No debí decir eso, haz de cuenta que no lo oíste.

Reí y miré a Chowder. Se acercó a mí y, tras un chasquido, se posó en mi hombro convertido en gato. 

-¿Soy tu única alumna?

-Parece que sí... No hay muchos interesados en estudiar a las criaturas mágicas, pero esperaba que tu hermano y sus amigos se hubieran hecho un tiempo para mí...

Nos quedamos en silencio un momento. Sabía lo importante que era para Hagrid que alguien tomará su clase.

-¿En que otras materias te anotaste?

-Pociones, Defensa contra las Artes Oscuras, Encantamientos y Transformaciones.

-Espera un segundo... Son materias para ser Auror, ¿Porqué te anotaste en esta?

-Primero que nada, no voy a ser Auror. Quiero ser Embajadora de los Dragones y resulta que sólo requiere Pociones y Cuidado de Criaturas Mágicas. El resto de mi horario lo eligió el profesor Snape.

-¿Snape?

-Bueno, él y Dumbledore. Y McGonagall. Severus puede vigilarme en Defensa y Minerva en Transformaciones. 

-Ya veo... ¿Porqué Embajadora de los Dragones? No es que no me guste la carrera, pero siento que desperdicias tu potencial mágico.

-Bueno, supongo que el hecho de que Chowder me haya elegido significó mucho en mi vida. Me gustaría viajar por el mundo y ayudar a todos aquellos dragones que no pueden comunicarse con sus cuidadores. De hecho, Charlie Weasley me dio la idea

-Siempre supe que tenías un gran corazón. Bueno Emma, ¿empezamos con la clase?

Asentí y entramos al Bosque. No pude evitar pensar que diría Hagrid sobre el tamaño de mi corazón después de que matara a Dumbledore.

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Fwooper: Pájaro africano que exhibe plumajes de colores intensos; los hay anaranjados, rosados, verde lima y amarillos. Su canto, agradable al principio, acaba por volver loco al que lo escucha. Para ser dueños de uno hay que tener una licencia, ya que requieren un cuidado responsable.

Espero que les haya gustado el cap, perdón por tardar tanto y gracias por leer :)