Untouchable | Harry Styles

027 ←

Brook.

— ¡¿Por qué no me escuchas?! ¿no te interesa mi felicidad? — chillé molesta, las lágrimas caían de mis mejillas.

— Me interesa más tu futuro. Ya te lo dije, él no te conviene, Brooklyn — me grita de vuelta.

— ¡Claro que me conviene! Por eso me largo también — me di la vuelta, estaba furiosa, sentía mis venas arder.

— Si te vas... entonces olvídate de que eres mi hija. — me amenaza con su fría voz, me detengo pero no volteo.

— Eso ya lo olvidé hace tiempo — dije entre dientes para luego irme.

Salí, desde afuera escuché a mi madre maldecir.

— ¡Llamaré a la policía Brooklyn Richard! ¡de esta no te salvas! — oí sus gritos.

El viento frío secó mis lágrimas. No sabía a dónde ir, entonces cogí mi celular y decidí llamarle a Harry. Escucho unos pasos detrás de mí y al momento de voltear veo a mi padre.

— Lo lamento, Brooklyn — comienza, abro mis labios para decirle algo pero él me interrumpe — No, escúchame. Hemos sido tan egoístas, pensando nada más en nuestro bien que en el tuyo. Siempre quise lo mejor para ti pero jamás me di cuenta que tu felicidad contaba primero. Fui tan ciego, al menos yo abrí los ojos. Ese chico te hace feliz, que es lo que importa. No quiero que vivas una vida presionada donde la felicidad es lo último que sea que pienses. No, yo quiero que seas feliz sea con quien sea. Si, puede que no esté de acuerdo, pero te apoyo porque te quiero hija. Perdón por no estar contigo cada vez que lo necesitabas. Perdón por moldearte como la chica "perfecta" cuando tú querías ser solo tú misma. Perdón por haberte obligado escoger una carrera que no era lo tuyo. Y perdón por hacerte sufrir al momento de haber mandando a Harry a la cárcel y a ti en esa escuela de monjas. Lamento eso y más  — besó mi frente — Así que huye, corre, lo que sea, que yo detendré a tu madre de cometer el mismo error. Se feliz, anda. Te deseo lo mejor, busca tu camino.

Sonreí, las lágrimas adornaban mis mejillas. Estaba llorando ríos, esto era increíble. Abracé con fuerzas a mi padre, sintiendo todo el agradecimiento. Esas palabras las necesitaba tanto, y me hubiera gustado oírlas de mi madre también, pero no podía pedir más ahora.

— Gracias — le miré a los ojos, él me sonrió sin mostrar sus dientes.

— Anda, ve.

Asentí y salí corriendo. Estaba anocheciendo y hacía frío. Desde lejos oí a mi madre decirle a mi padre que cogiera las llaves del auto para detenernos.

— Harry — dije cuando él me atendió la llamada — ¿En dónde estás?

— Con Niall, ¿estás bien?

— Sí, sólo salí corriendo. Tenemos que irnos — me apresuré en decir.

— Pero, ¿a dónde? No hay tiempo.

— Déjame estar contigo — lloriqueo.

— Estoy con Niall en el auto ahora mismo, amor. ¿En dónde estás? — preguntó preocupado.

— Estoy como a quince cuadras de mi casa. Estoy en la calle Tiptoe — dije viendo el letrero con el nombre.

— Estoy allá en seguida. No te muevas, te amo. — colgó.

Metí mi móvil en mi bolsillo. Y empecé a llorar. Tal vez sería la última vez que vea Harry. Seguramente los policías están en camino buscándonos. De pronto todos los recuerdos de Harry y yo se me vinieron a la mente. Desde cuando nos conocimos hasta ahora. Limpié mis lágrimas pero cada vez salían más. Nunca estaré preparada pero era hora de decirle adiós.

Sentí la luz del auto, me giré y ahí los vi. Harry salió de prisa al igual que Niall. Mi chico me abrazó con fuerzas al igual que yo a él. Empezamos a llorar. El cielo ya estaba oscuro, las luces mercuriales y el auto nos reflejaba.

— No quiero decir adiós, pero... gracias por todo y nada — miré sus ojos verdes, besé sus labios, él no me correspondió.

Se separó mas no me soltó.

— No vuelvas a decir eso. Vamos a estar juntos, no será el fin — dijo con su voz quebrada. Yo lo abracé más. — Cuando salga de las rejas, créeme que te esperaré, ¿me esperarás?

— Siempre — mi voz se escuchó tan débil.

— Chicos, tengan fe — oímos a Niall — ¿Saben cuantas veces han intentado separarlos? Ustedes no se rendirán.

— Gracias, Niall — le vi con una pequeña sonrisa en mis labios.

Mi celular sonó. Contesté con miedo y oí una desconocida voz.

— ¿Brooklyn Richard?

— Sí s-soy yo — dije extrañada.

— Hablamos de la ambulancia del hospital de Dunster. Lamento decirles que sus padres han fallecido en un accidente de auto — informó, yo solté mi celular cuando oí las ambulancias cercas. No le di ni el tiempo de que me dijera más. 

Corrí, ignoré los gritos de Harry y de Niall y corrí hacia al sonido. Se escuchaba tan cerca la ambulancia. No sé cuanto corrí pero llegué. Tosí debido al esfuerzo y volví a correr para acercarme hacia ellos. Vi como el cuerpo de mi madre estaba siendo cubierto mientras la metían dentro de la ambulancia. Mi padre era el único que estaba aún afuera, sus ojos estaban cerrados y tenía una enorme herida escurriendo de sangre en su frente. Me acerqué a él y lo abracé mientras lloraba. Eran mis padres, pudieron cometer muchos errores, pero eran mis padres. Solté un grito de dolor, los médicos se acercaron a mí. Decidieron alejarme y llevárselo.

Sentí una mano encima de mi hombro, era Harry, por lo que vi. Sin pensarlo lo abracé.