Rompiendo Códigos

Capítulo XXIV.

Detesto los lunes.

Son los días mas largos del calendario, son los días mas agotadores y frustrantes para todo estudiante.
Comencé mi día de muy mala manera, no lo sé.
Era un día gris, como los demás. Caminar hacia el Instituto era un sacrificio.

El viento suave de la mañana desordenaba mis cabellos, probablemente enredándolos. Simplemente, detestable.

Mi buzo negro, mis jeans claros y mis converse no ayudaban. Realmente hacia frío.

Llegué al instituto minutos más tarde, de lejos notaba la cara de insomnio de muchos de mis compañeros. Libros en sus manos. Hoy había examen de Biología y a mi suerte me lo sabia perfectamente.

Logré ver a Sally como salía del auto de su padre, su cabellera estaba recogida, una bufanda atravesaba su cuello dejándose caer sobre su chaqueta rosa hasta llegar a sus jeans claros metidos en sus botas marrones.

Sus favoritas.

Grité su nombre para llamar su atención. Volteó y noto como su nariz y mejillas estaban rojas. Ha de ser por el clima.

- Hola Sally -digo aún con la voz ronca.
- Meli, hola -me da un fuerte abrazo.

Luego de platicar un rato fuera, entramos. Deje mis cosas en mi clase y nos dirigimos a buscar a Ted.

Allí estaba el castaño, sentado en su respectiva silla leyendo, seguramente, algunos de sus apuntes.

Semana de exámenes, la revolución del colegio. Próximamente solo en cines.

Nos acercamos a él, pero no teníamos su atención, estaba demasiado concentrado. Mucho para ser Ted.

- Sally llamando a Ted -chasquea los dedos frente a sus apuntes.
- Ho-hola Rubia como te encuentras? -se pone de pie y nos da un beso a ambas en la mejilla.

Es extraño los besos en la mejilla de Ted, no me acostumbro a que no me los de en los labios.

- Bien, bien, que estudias?
- Física cuántica, la peor de las materias -suspira.
- Que horror! -digo.
- Como esta tu...? -señala con la cabeza a Sally, sin sacar sus manos de los bolsillos.
- Mi? Mi que? -toca su vientre.
- Eso Sally -dice sonrojado.
- Mi hijo Ted, mi hijo. Se encuentra bastante bien, se nota cada vez mas, me veo gorda? -Sall se pone de perfil para que podamos ver su vientre aun plano.
- no se nota Sally -volteo mis ojos.
- que no? Mira esto...
- que esperabas? Ser delgada aun estando embarazada? -pronuncia Ted luego de tocar su nuca.

Golpeó a Ted muy despacio. Sonreímos y el maldito timbre sonó indicando que la primera clase comenzaba.

Nos despedimos y nos fuimos a nuestras clases.

Las horas pasaban y pasaban. Los profesores se las arreglaban para hacer de este día aun más oscuro.

Mi teléfono celular vibró, un mensaje de whatsapp. De Matt.

Matt: Meli, necesito contarte algo importante, nos vemos en la cafetería en el receso. No me falles :)