Es mío

Capítulo 29

James se preparó para formular las dos preguntas que llevaba durante todo el día modificando, era la hora, el minuto y el segundo perfecto, había allanado el terreno, le había dicho a Mia lo que sentía, lo que quería y parte de sus motivos por los que estaba con ellos, estaban resurgiendo y quedando al descubierto, quería estar con ellos y nada ni nadie le iba a detener.

-Bueno, la primera pregunta es para ti, ¿quieres estar conmigo? – James miró a los ojos a Mia al formular la pregunta estrella de la velada, si respondía que sí, la otra la tenía prácticamente ganada. Todo era cuestión de saber elegir las palabras como buen abogado que era.

- ¿Estar contigo? ¿Me estas pidiendo salir? No entiendo nada, es que no ha quedado claro lo que te he expuesto durante la comida... Realmente no creo que estés capacitado para poder tener una relación, James lo siento, pero no voy a estar contigo. - Mia miró asombrada a James mientras este juntaba sus cejas, por un lado, parecía que se esperaba esa respuesta, pero verdaderamente también parecía que tenía esperanzas sobre una respuesta afirmativa, cosa que a Mia le asombró.

- ¿Por qué no? Por qué no me das una oportunidad, por qué no te quieres arriesgar conmigo, estamos conviviendo y no lo hacemos tan mal, hemos tenido sexo y permíteme que diga que fue impresionante, nunca pensé que se sentiría como algo tan increíble, realmente quiero que me digas que sí y no nos vamos a mover hasta que lo consiga. – James elevaba sus manos, no podía dejar de pensar constantemente que tenía que mantener la calma, calma que no tenía. Por dios era el mejor abogado, se tenía que tranquilizar para ganar la batalla, pero no le estaba siendo nada fácil. Volvió a mirar a Mia, esta vez con más intensidad ante las inminentes preguntas que se le avecinaban.

- ¿Por qué me haces esto James? ¿Por qué ahora? ¿Por qué tú? No estás preparado para una relación, sí es verdad que nos llevamos bien, que la convivencia no es mala pero realmente quieres salir conmigo o tan solo es una excusa para llevarme a la cama, no lo sé, todavía no entiendo este juego tuyo. Apareces y desapareces cuando quieres, no das señales de vida, no quieres formalizar una relación James, tan solo quieres echar un polvo, y lo siento si te di esa impresión, pero no soy de esas personas. No quiero ser de esas personas, simplemente no, no sería capaz. – Mira bajó la mirada hacia su taza de café vacía, intentando eludir la mirada de James, era intensa y demasiado electrizante. Tenía que mantenerse firme en sus pensamientos, tenía que lograrlo, por ella y por él bebe, no podía permitirse depender de un hombre como lo había hecho por Adenilton.

-Me quieres cerca, lo sabes tú y lo sé yo, te sientes cómoda conmigo, sabes que puedes hablar de cualquier cosa, incluso del trabajo, jamás he hablado con alguien de trabajo, jamás me he involucrado con alguien y su trabajo, pero contigo lo he hecho porque estoy feliz cuando te veo trabajar, veo que disfrutas, que sientes de verdad tu papel en esa empresa de construcción, para ti no es solo un trabajo, es tú trabajo y eso me alegra. Me hace ver que eres una persona que lucha por lo que quiere y que quiere un buen futuro, tanto para ti como para el pequeño. Quiero que estés conmigo. – James expuso muy bien su razonamiento, pero veía que Mia no estaba receptiva, de todas maneras, no se iba a echar atrás, él seguiría con ellos.

-James, te agradezco que me digas eso sobre mi trabajo, realmente pienso que eres muy buen abogado y se nota que tu firma es la una de las mejores de la ciudad, pero no se trata de decir quién admira a quién y quién lo hace más, trata de sentimiento, y como tú has dicho antes, fue sexo. Solo fue sexo, para ti todo se reduce a eso, yo no quiero una relación así, no quiero que tú te vayas de fiesta y yo quedarme con mi pequeño para luego enterarme por la presa que te has ido con una modelo, no quiero eso. No siento lo mismo que tú, tal vez me haya acostado contigo, sí, no lo puedo negar, me gustó, pero ahí se acaba todo, James. No puedo estar contigo, no confío en ese aspecto, no de ti. - ¿realmente no quiero volver a acostarme con él? ¿Realmente pienso esto o es lo que se debe pensar? Estar hecha un lio era poco, para lo que sentía Mia en ese momento.