A Traves De Tus Ojos

capitulo 21

-¿Y qué hacemos ahora?- pregunto Harry sin soltar la mano de Severus.
-No lo sé, pero tenemos que volver.
-Si- dijo el chico desanimado.
-Harry, es lo correcto- le dijo acariciándole la mejilla.
-Tal vez para ti lo sea, regresar para que seas llevado a Azkaban- dijo el chico- ¿o es que estas cansado de mi y piensas que esa es la única manera para deshacerte de mi?
Severus lo atrajo hacia si.
-Potter, puedes ser muy molesto, pero no lo suficiente como para que quiera pasar el resto de mis días rodeado de dementores.-Severus sonreia levemente. Se inclinó y beso a a potter en los labios antes de que este pudiera quejarse porque lo habia llamado Potter.
-entonces ¿por qué insistes en ir a Azkaban?-le pregunto Potter, una vez que el beso hubo terminado.
-No podemos huir por siempre- le dijo- y es mejor enfrentar la situación ahora que más tarde.
Harry bajo la mirada, quería llorar y rogarle a Sev que no regresaran, no quería verlo en Azkaban, peor no lo hizo en lugar de eso relajo su agarre y le miro de nueva cuenta, regalándole una sonrisa algo forzada.
-Harry...
-No te quiero perder- dijo sin quitar la sonrisa de sus labios- pero tienes razón no podemos huir por siempre- dijo ensanchando su falsa sonrisa.
-No lo hagas, no sonrías de esa manera- pidió- puedo ver lo que realmente sientes, sufres y quieres llorar.
-Sev...
-Puedo verlo, lo veo a través de tus ojos.
Harry suspiro, y dejo ir la forzada sonrisa. ¿de que servía sonreír si Severus sabía que era falsa?
-vale ¿es que acaso quieres que este feliz por que piensas entregarte para pasar años en una horrible prisión?-replico Harry, bajo la atenta mirada de Severus.-si quieres que te diga la verdad, no quiero que lo hagas, es tonto e injusto.-Potter se cruzo de brazos, consiente de que estaba haciendo un berrinche de niño pequeño.
-Por una vez, compórtate como adulto- dijo Snape.
-¿Cómo adulto?- pregunto Harry incrédulo- crecí más rápido que los demás, a los seis años ya cocinaba y hacía los quehaceres en la casa de mis tíos, tuve que aprender a sobrevivir en el colegio, porque siempre tenía a un loco tras de mí, tuve que matar para poder seguir viendo, dijo crecí más rápido que cualquier otra persona, mis padres me abandonaron y me hicieron creer que estaban muertos, no por un años o dos... ¡Fueron dieciséis años!
Harry se mordio fuertemente el labio inferior, obligándose a callarse. No queria gritarle a Severus. Pero por la expresión del hombre, supo que no habia disimulado una mirada de intensa furia.
-entonces, comportate como alguien maduro, Potter.-le dijo el hombre, en tono frío.
-¿quieres que sea maduro?-cuestiono Potte, aun más incredulo.-bien, entonces vete, entregate a los aurores, y jodete.-le soltó Harry, furioso por su condecendiencia.
Severus suspiro, Harry estaba molesto, demasiado como para pensar bien, tenía que hacer que le chico enfriara su cabeza para poder hablar con más tranquilidad pero no sabía como hacerlo; tenía que hacerle entender que escapar no traería nada bueno, que era mejor enfrentar la situación ahora que después.
No quería huir.
No quería esconderse.
Y tampoco quería estar lejos de Harry.
Entonces...¿Qué hacer?
Severus suspiro, y se frotó las sienes bajo la (furiosa) mirada de reojo de Harry.
-Harry... por una vez en la vida ¿podrias dejar de ser tan cabeza dura y escuchar lo que te dijo?-la voz de Severus sonó cansada, y su rostro demostraba ese cansancio.
Potter abrio la boca par a contestarle, pero la volvió a cerrar al ver su exprecion. Se sintio culpable por disgustar a Severus; Harry se estaba poniente histérico, pero a fin de cuentas, el que iría a Azkaban sería Severus...
Fue el turno de Potter de suspirar.
-lo siento.-susurro.
-Se que estas asustado- comenzó a decir el mayor- y por eso dices cosas hirientes, pero escapar no nos asegurara una buena vida juntos.
-¿Y entregarte para que te lleven a Azkaban si?- pregunto Harry sarcástico.
-Es la mejor opción, no quiero ocultarme ni huir- admitió- ya no quiero escapar como lo he hecho antes.
"Ya no quiero ser un cobarde" pensó para si mismo el hombre, con amargura.
Harry no supo que contestarle, así que se sento sobre el regazo del hombre, le rodeo el cuello con los brazos, y lo beso con dulzura.
-no eres un Cobarde, Sev.-le susurro, como si hubiera leido sus pensamientos.-nunca has sido un cobarde.
-eso tu no lo sabes.-le contradijo Severus.
Harry ya no dijo nada, el pequeño fénix ladeo un poco la cabeza, las cosas parecían haberse enfriado un poco entre ellos dos. Severus volvió a intentar nuevamente el aparecer en el castillo, esta vez lo logro, miro al fénix que tenía colgaba de su brazo y le mostro una media sonrisa. Sintió que Harry le apretaba la mano con fuerza, mostrándole su miedo.
-¿Listo?- pregunto Snape.
-No lo estoy- dijo- pero ya no hay opción.
-Harry...
-¿Qué?
Snape se tomó la libertad de besarle y abrázale con fuerza.
-Todo estará bien.
-Por favor, no digas esas mentiras tan crueles- pidió el muchacho.
-.-.-.-.-.-.-.-
Draco caminaba de un lado a otro de la torre de astronomía.
Estúpido Potter. Lo odia. Lo odia con toda su alma.
¿por qué rayos se habia enamorado de el? Nunca había cometido una estupidez semejante.
Enamorarse de un Potter. Ja. Su padre se reiría.
Sintió las tibias lagrimas bajarle por las mejillas.
Le quería. Le quería muchísimo.
¿por qué el no podia corresponderle?
Y aún así, allí estaba, preocupado a más no poder por Harry, quien se habia escapado con su padrino (actual fugitivo de la ley).
¿por qué se habia enamorado de Potter? Se pregunto, con amargura, entre lágrimas.
-.-.-.-.-.-.-
James caminaba de un lado a otro de su habitacion. Su hijo estaba desaparecido. Con quejicus. Su...(¿novio? ¿abusador? ¿amante?) Su algo.
Y para mejorar la situación, Lily insistía en que de debía dejar que Harry tomará sus propias desiciones. Ja. Es tan solo un niño, claro que no puede tomar sus propias desiciones.
Sentia las tibias lagrimas bajarle por las mejillas, aunque no estaba seguro se si eran de tristeza o irá.
Odiaba a Snape. Lo odiaba muchísimo. El no podia ser bueno para su hijo. Bajo ningún término.
¿verdad?
Queria a Harry. Le quería más de lo que alguna vez habia sido capaz de demostrar. Queria que el fuera feliz... pero no con Severus. Porque con Severus no podia ser feliz, ¿verdad?
-.-.-.-.-.-.-
En la torre de astronomía y en la habitacion de los Potter se produjeron acciones gemelas.
En el mismo momento, Ron entró en la torre y Lily en la habitacion, agitado por haber corrido por medio castillo.
-¿Lily?-dijo James al verla, mientras se limpiaba apresuradamente las lagrimas.
-¿Ron?-dijo Draco al verlo, mientras se limpiaba apresuradamente las lagrimas.
Los dos pelirrojos dijeron al unisono:
-han vuelto.
Todos se reunieron en el Gran comedor, donde se encontraba la pareja fugitiva, los aurores solo esperaban a James Potter para que les diera la orden de aprehensión contra el hombre de ropas oscuras.
Las puertas del lugar se abrieron con fiereza, James entro corriendo seguido de su esposa, segundos después Malfoy hizo lo mismo seguido de Ronald y Hermione. Harry se aferró más a Severus cuando vio que James se acercaba, tenía los ojos rojos e hinchados y Draco parecía estar en las mismas condiciones.
¿Realmente habían llorado?
No se habían marchado tanto tiempo, solo un par de horas y nada más, nada que fuese realmente preocupante. Bueno tal vez lo había sido desde el principio cuando reacciono de esa manera.
-Harry- dijo James con una media sonrisa.
-Potter- dijo el chico borrando la curva que el auror tenía en los labios.
James miro a su hijo. Tenia el cabello negro enmarañado, con hojas enganchadas en el; sus lentes estaban tan sucios que se notaba desde lejos; tenía una mirada de desolación que James no llegaba a entender ¿podría estar así por Snape?
Potter dirigio su mirada al hombre, que tenía la exprecion firme e indiferente, aunque se notaba la tensión en sus hombros y se notaba a un aferraba la mano de Harry con cierta desesperación.
-Snape - dijo Potter con lentitud.- supongo que ya sabes un sigue.
Severus hizo un solo a sentimientos seco.
Harry se aferro más a él.
-entonces ¿vendras por las buenas, o tendremos que llevarte a rastras?-cuestino con seriedad, mirando de reojo a los aurores a un tenía detrás.
-no me resistire.-dijo Severus con voz pausada y serena.
Por la mirada que Harry le dirigio, parecía que el chico quería taparle la boca para que se callará.
-bien. Entonces, es hora de irnos, Snape.
Severus dio un paso al frente, soltando la mano de Potter. Lo que no habia tenido en cuenta era que Harry seguía aferrado a él, y era poco probable que lo soltará.
-Harry...-susurro Severus, tan bajo que solo Harry lo podía oír.-debo irme.-el chico fue debilitando su agarre hasta dejar caer los brazos a los costados.
Severus de inclinó y le dio un corto y dulce beso en la frente antes de alejarse y caminar hacia los aurores.
Lily trato de tomar la mano del chico, abrazarle para consolarle, pero Harry simplemente se alejó. James trato de acercarse también, pero el chico lo miro de mala manera.
-Espero y ahora estés feliz- musito antes de irse del Gran comedor ante la atenta mirada de todos.
Lily fue tras él al igual que James, tenían que hablar, lo encontraron marchándose a la madriguera, por lo que decidieron seguirlo. Una vez ahí lo vieron bajar con una pequeña maleta.
-¿Qué haces?- pregunto James.
-¿Acaso no es obvio?- cuestiono sarcástico.
-¿Te marchas?- pregunto Lily.
-No tengo porque estar aquí- dijo- no te preocupes, vendré de visita.
-Tu no vas a ningún lado- musito James.
Harry levanto la ceja, de una manera muy similar a la de Snape que hizo que Lily casi sonriera.
-te guste o no -dijo Potter, con desprecio en al voz.-no puedes detenerme. Puedo hacer magia y pronto seré mayor de edad.
-pero aun no lo eres, y seguimos siendo tus padres.-objeto Potter.-aún somos legalmente responsables por ti, Harry. Así que no vas a ningún lado.
-¡no son responsables por mi! ¡si no lo fueron cuando si lo necesitaba, no lo serán ahora!-exclamó Harry con furia, mientra metía sin cuidado sus cosas que iba encontrando por la habitación.
-¡Joder, Harry, ya te hemos explicado eso!-exclamó James a su vez.
-¿sabes que puedes hacer con tu explicación?-replico Potter de inmediato, de mala manera.
-vale, basta. Los dos.-ordenó Lily, harta de la pelea. Ambos Potter la mirado.-te guste o no, Harry, somos una familia. Y vamos a hablar.-el tono de Lily desafiaba al chico a contradecirle.
-no somos una familia. Ustedes son simplemente mis progenitores.-mascullo Potter.
-bueno, da igual.-dijo la pelirroja.-el caso es que vamos a hablar y a llegar a un acuerdo, por que nos corresponde tomar una decisión que deje felices a todos ¿OK?
-¿que deje felices a todos? ¿y donde estaba esa regla cuando no me preguntaron sobre mandar a Severus a Azkaban?-cuestiono Potter con furia.
-Harry, eso fue por tu bien. queremos...-empezó a decir James.
-a mi no me metas.-interrumpio Lily.
James miro a su esposa a modo de reproche antes de seguir.
-quiero lo mejor para ti.-concluyó.
-¿y crees que eso es alejarme de el?-cuestiono Potter.-¡el fue quien me cuido y me enseñó mientra ustedes estaban ocupados criando a otro hijo!-reclamo Potter, antes de volver a subir las escaleras echo una furia.
-Lily, ¿Qué fue lo que hicimos mal?- pregunto James.
-Todo, todo lo hicimos mal James- dijo Lily, desde el principio.
Harry no lo soporto más, tomo su maleta cerro los ojos y trato de no pensar en Severus, trato de ir a un lugar para poder estar solo y comenzar de cero por si mismo, buscaría un trabajo, compraría una casa en donde esperaría por Snape hasta que este fuese libre.
Sintió ese revoltijo tan conocido de la aparición, no tenía permitido hacerlo pero al habérselo enseñado en la escuela no implicaba ningún problema, o bueno sí. Cuando llego a su destino, trastabillo un poco y cayó al suelo de bruces algo mareado, al mirar a su alrededor se dio cuenta de que estaba en el lugar menos esperado, la casa de campo donde habían terminado con Snape cuando este les ayudo a salir de la mansión Malfoy.
Miro la entrada del lugar, y sintio ganas de echarse a llorar.
Se sento y abrazo las piernas contra su pecho, mientras se mordía los labios fuertemente. No tardo en sentir el sabor metálico de la sangre.
Se permitió llorar por la situación, echó un mar de sollozos, lagrimas y tristeza en el suelo del jardín.
No supo cuanto tiempo estuvo allí, pero para cuando por fin se incorporo había dejado de llorar, y las lagrimas se habían secado en su rostro.
Se frotó los ojos, tan rojos que parecia que no habia dormido en semana, tomo su maleta y entro a la casa.
Dejo la maleta sin mucho cuidado sobre el sofa que habia poco despues de entrar, y se dirigio automáticamente al baño; necesitaba ducharse con desesperación, y encargarse de otras desespersciones le ayudaba a olvidar un poco lo que más le desesperaba.
Harry se ducho y 15 minutos después salió.
Se puso una pijama, que en realidad ni siquiera era de el, era de Draco.
El pensar en el rubio empeoró su estado de ánimo. Pensar que habia perdido a uno de sus mejores amigos por no hablarle...
Apreto la tela del pijama, como si aferrando la pudiera aferrarse al rubio, mientras se dirigía a la cocina a comer algo (más porque sabía a je debía hacerlo que porque quería.).
Al entrar en la habitacion sólo pudo recordar la noche que paso con Severus allí. Le habia prometido cuidarlo. Le dolia saber que habia fallado.
Tomo un tazón de un estante, y lo lleno como cereales y leche (¿porque habia cereales y leche en una casa que llevaba meses deshabitada?) Y se sento en un sillón.
Comió mecánicamente, sin sabotear su comida, mientras tenía la mirada perdida en la ventana.
Cuando por fin volvió a la realidad, parpadeando confundido, se llevó una sorpresa.
Delante de él, se encontraba Draco Malfoy