07

2.6K 429 64
                                    

Me acomodé en el pequeño sillón del piano y relaje mi cuello antes de revisar mis pentagramas y recordar mi composición por completo. Nam estaba en la silla reclinable de mi escritorio y la hacia rechinar mientras movía su cuerpo en ella, jugando, para revisar mis borradores de letra. De un momento al otro, los ojos de Nam se encontraron con los míos y se quedaron ahí. Realicé a los segundos de que Nam tenía cara de estar esperando algo y me sonrojé.

- ¿Q-qué pasa? - Hablé apenas sintiendo ese molesto calor en el rostro.

- Necesito que toques para poder inspirarme - Asentí rápida y repetidas veces, me sentía idiota por avergonzarme.

Suspiré y deslicé mis dedos por las finas teclas. Evité mirarlo en todo momento mientras tocaba, así que cerré mis ojos para lograr una mejor concentración. Al terminar abrí uno y luego el otro ojo, despacio y esperé una respuesta.

- Me gusta la melodía, pero la letra está algo perdida...no tiene un rumbo - Dijo mientras se acercaba más el papel a su cara, haciendo como si buscara algo y fingiendo caras graciosas. No pude evitar sonreir, aunque tampoco pude no sentir algo de ofensa.

- Tu no tienes un puto rumbo - chisteé, con voz molesta. Nam rió y me molesté aún más.

- Ya estaba pensando yo hasta cuándo llegaría esta actuación de chico amable. - Se apoyó en el respaldo a su máximo y miró al techo.

- Soy un chico amable, pero acabas de insultar a uno de mis amores y creaciones, cosa que yo solo puedo hacer, así que te vas a la mierda. - Hablé completamente serio.

Volvió a reír y me levanté del piano manteniendo y seriedad y le arrebaté mis papeles de un solo tirón. Le sonreí ladino, pero esta sonrisa se borró al instante al momento que Nam se levantó y se encurvó frente a mi para quedar a la altura de mi rostro.

- ¿De verdad quieres que me vaya? - Volvió ese calor a mis mejillas, pero logré controlarlo.

- Haz lo que se te de la puta gana - y volví a mi piano para seguir con la melodía.

- Bueno, me quedaré. Ahora responde - volvió a sentarse - ¿en qué piensas en cuanto tocas?

Miré las teclas, absortó y respondí sin pensarlo mucho.

- En otoño.

- Un amor otoñal.

- Podría ser.

- ¿Te has enamorado alguna vez?

- Sí.

- ¿Sigues con esa persona? - Apoyó sus hombros es el escritorio y su cara sobre sus manos, como si estuviera interesado en mi respuesta.

- No. Fue una linda relación, pero algo difiicil. - Me sinceré.

- ¿Sigues hablando con ella? - "ella", solté una pequeña risa antes eso.

- Sí, terminé en buenos terminos con aquella persona. Somos amigos ahora. - SeokJin me trata como si fuera su bebé, aunque aveces el se comporta como un niño.

- Bueno. Tengo esta lluvia de ideas - Tomó aire antes de comenzar - Amor otoñal, buenos terminos, sólo amigos, linda relación, dificultad. ¿Cómo suena?

- Horrible - Dije serio sin mirarlo y luego reí.

- Me voy - Posó una de sus manos en los descansa brazos para levantarse.

- No, Nam. Estoy bromeando - Solté para detenerlo. - Con esas pocas frases avancé más que lo que he hecho en una semana, no sé porque me ha costado tanto está canción, pero quiero terminarla pronto. - Fruncí mis labios, tenía un vacío en el estómago, de verdad no quería que se fuera, me estaba ayudando. Sonrió, triunfante y volvió a sentar para tomar nuevamente el lápiz y comenzar a escribir.




dos veces × namgiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora