---Sucrette.---La nombro una voz masculina, la pelinegra limpio con rapidez sus mejillas y levanto su rostro.
---Kentin.---Él la miro y su ceño se fruncio ligeramente, seguido la abrazo.---¿Por qué lloras?---Cuestionó acariciandole el cabello. Por varios minutos ella no dijo nada, él no lo volvió a preguntar, no porque no quisiera hacerlo, sólo que había notado que ella no deseaba hablar sobre lo que le había ocurrido. . Poco después él se separo de ella, le coloco las mano en las mejillas y le seco las lágrimas.---Quisiera quedarme contigo por más tiempo, pero debo irme.--- . Ella le sonrio sin rastros de humor o felicidad.---Estare bien.---Él le acaricio la mejilla derecha, se inclino y le beso la frente.---Te quiero.---
---.....---Ella no dijo nada, ya que sabía a la perfección lo que sentía por el castaño. Cariño.. de amigos, y deseaba que aquello perdure. Él se separo de ella.---Adiós Sucrette.---Dijo con pesar.
---Adiós.---Susurro, él se fue, la pelinegra entro a su casa, y luego de cerrar la puerta corrio hacía su habitación, donde se tumbo sobre su cama, y dejo que sus lágrimas empaparan sus mejillas hasta caer en su almohada.
---Maldito Castiel. Malditos sentimientos.---Mascullo contra la almohada.---(Tan rapido me gustaste...Tan rapido comence a perder la apuesta..Y ahora todo a terminado..)--- . . . Con Castiel.
El pelirrojo se encontraba tumbado sobre uno de los sillones de la sala de su casa.
---Malditos sentimientos.---Farbullo mirando el techo, se levanto y pateo el sillón.---¿¡Por qué diablos se me ocurrió esa apuesta!?---Pateo nuevamente el sillón, y se volvio acostar, cubrio sus ojos con uno de sus brazos a la vez que recordaba lo sucedido esa misma tarde.
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Castiel. Acaso... Sentí celos.. Acaso me estoy enamorando de ella.. Sé que me gusta. Eso lo admito.. ¿Pero enamorado?...¡No! ¡Malditos sentimientos! Aunque... les deje el camino libre, o por lo menos ella lo sabe... Debo hacer algo para dejar de pensar en ella... . El pelirrojo permanecio con su brazo sobre sus ojos mientras pensaba... que hacer para olvidar lo que estaba comenzando a sentir. En ese momento se sentía en lo más profundo de un abismo, perdido en la negrura del mismo, atrapado en medio de confusiones y sentimientos que no había sentido desde..
---Debrah.---Escapo ese único nombre de sus labios, aquel nombre perteneciente a la primera que había entrado a su corazón y quizás su única forma de olvidar a Sucrette. . ---(Una solución descabellada...Pero acertada... Sucrette estará con Lysandro y yo con Debrah..)---Pensó decidido a que no apartaría a Debrah, decidido a que ella entraría nuevamente en su vida.---(Olvidar lo que siento es lo que deseo, y con ella lo conseguire.)---Se dijo a la vez que subía con tranquilidad hacia su habitación. Necesitaba descansar, ya que al día siguiente comenzaría a vivir en el pasado, el pasado con Debrah. * * * Con Sucrette. A la mañana siguiente.
La pelinegra acababa de vestirse luego de haber tomado una ducha. En ese momento se encontraba frente al espejo del baño, mirando sus hinchados ojos, producto de las millares de lágrimas derramadas por Castiel. Lo que más deseaba en ese momento era olvidar sus sentimientos para ya no llorar. * * * Varios minutos después se encontraba caminando hacía el Instituto. Sentía un horrible nudo en la garganta, era como un presentimiento, algo que le decia que algo sucederia, algo malo.. . Y así fue, medio entro al Instituto logró ver a Castiel y a Debrah en un lugar apartado, y eso no era lo peor, lo peor de esa escena era que se estaban besando. . . Sintio una horrible punzada en el corazón e inevitablemente las lágrimas comenzaron a correr por su rostro con premura, la pelinegra las seco como si le quemaran, algo inútil ya que nuevamente recorrieron sus mejillas, dio media vuelta y decidio que no asistiría ese día.
---(Lo amo)---Se dijo y comenzo a correr sin fijarse en nada ni nadie, lo único que sintió fue como si su cuerpo volara por los aires, y como su cabeza daba contra el piso, lo único que oyo fueron gritos y sonidos lejanos.
---¡Sucrette resiste!---La voz de Rosalya perdiéndose en un eco difuso.. * * * Varios minutos antes. Castiel. Justo cuando llegué al instituto, Debrah se me acerco, me tomo de la mano y me llevo a un lugar apartado con claras intensiones de besarme. La deje, es más le correspondi, un beso que lo sentí completamente vacio y seco, no senti nada, al separar nuestros labios ella me miro feliz.
---Me aceptas. ¿Somos novios denuevo?---
----Si..---Dije y ella me volvió a besar, justo en ese momento vi como Sucrette entraba, así que rodee la cintura de Debrah con mis brazos y comence a corresponderle aún sin cerrar mis ojos, así que logre ver como corria fuera del instituto, poco después oí el chillido de unas llantas. Y una horrible sensación de angustia, aparte a Debrah de mi.
---Vamos a ver.---Dije seco, la tomé de la muñeca y comenzamos a correr, hacia el lugar.
----¡Sucrette resiste!---Oí la voz de una chica, nos acercamos y vimos a Sucrette tendida en el piso, bañada en sangre. No tuve ni tiempo a decir nada ya que llego la ambulancia, esa chica y Lysandro fueron en la ambulancia con Sucrette, mientras yo me quede junto a Debrah aún sin poder creer lo sucedido. . . Debrah. Esto no podia ser mejor. Tengo a Castiel, y ella fuera del camino, Ojalá se muera. O por lo menos olvide todo.
Mantuve mi rostro asustado y preocupado junto a Castiel. Él realmente se ve mal. Esta enamorado.. Pero le haré olvidar todos esos asquerosos sentimientos, mi gatito será mi títere, actuara como yo quiera.. Ja.. Y esa estúpida de Sucrette jamás lo tendrá de vuelta. * * * * Horas después. En el Hospital. Sucrette tenía un brazo y la cabeza rota, también había caido en coma, tras el fuerte golpe, sin embargo, los doctores aseguraban que la pelinegra despertaria pronto. . Castiel luego de salir del Shock, había llamado a los padres de la pelinegra, y los mismos se encontraban junto a ella. Ambos desconsolados y estupefactos por lo acurrido. . Lysandro no tenía ni la más mínima idea de porque había ocurrido todo eso. Hasta que vio a Castiel con Debrah pegada como chicle. La castaña afirmo ser la novia del pelirrojo, y él al ser interrogado por el peliblanco. No lo nego y se límito a asentir con la cabeza. Lysandro realizo una cosa impropia de él, perdió su calma y le dio un golpe que lo tumbó al piso. Castiel no se lo regreso, no porque no quisiera, ni porque no pudiera, fue porque sintió que lo merecía. . Desde ese día no se volvieron a hablar. * * Paso cerca de dos semanas, Sucrette desperto totalmente confusa. . . ---Sucrette---La nombro el pelirrojo que había ido a visitarla ese mañana.
---¿Quién eres?---Interrogó ella temerosa.
---No bromes conmigo.---Dijo seco.
---No bromeó. No sé quien eres.---Dijo, él fruncio el ceño, y salió de ahí en busca de los médicos. . Sucrette agacho levemente la cabeza.. y no recordo nada más que a un peliblanco.. besandola.
---(¿Acaso es mi novio?)--Se preguntó empuñando sus manos alrededor de las finas sabanas, poco después la puerta se abrio, pero no era un doctor.
---Sucrette..---La nombro preocupado.
---(Es.. él)---¿Ly..Lysandro?---Él asintió y se acerco a ella. La pelinegra sintió como su corazón se aceleraba ligeramente, y aquello se hizo notorio gracias a la maquina que se encontraba a su lado.
---A..Acercate más.---Pidió ella al verlo al pie de la cama. Él así lo hizo, y Sucrette le dio un corto beso en los labios dejándolo sorprendido.
---¿Por qué?---Preguntó en un susurro.
---Eres mi novio---Dijo dulcemente.
---('Es posible que el golpe le afecte. Deben seguirle la corriente')---Recordó las palabras del doctor así que asintió y sintió nuevamente los labios de la pelinegra sobre los suyos en un casto beso.
---Lys..¿Cómo termine aquí?---Preguntó. Lysandro no pudo responder esa pregunta ya que entraron varios médicos a revisar a la pelinegra. * * * Días después. Sucrette salia del hospital, acompañada de Lysandro, sus padres y Rosalya, No se encontraba Castiel ahí ya que Sucrette seguía sin recordarlo y hasta le temía. . .
