3 años,6 meses y 5 días.

Capítulo 87

Lucas Hemmings

Sobrellevar con la pérdida de un ser amado es uno uno de los mayores retos que se uno puede enfrentar en la vida. La muerte causa un dolor profundo. Algunos ven la pérdida como una parte natural de la vida. Una pérdida llena de tristeza, dolor, sufrimiento y melancolía.

He aprendido que todos reaccionamos de forma distintas a la muerte. Dicen que el tiempo es la cura ante el dolor,dicen.

Superar la pérdida toma tiempo. Las personas deben entenderlo. No es de la noche a la mañana. En lo personal, jamás se olvida,solo lo llevamos a lo más profundo de nosotros, pero siempre está presente.

El señor Champion en mis sesiones me decía que ante esto debía hablar del ser querido con amigos o personas. Jamás debemos negar nuestros sentimientos. No debemos aislarnos. Me dijo que es normal sentir tristeza, rabia, frustración, etc.
El señor Champion me ayudó bastante. Tanto que ahora entiendo la muerte de mis padres. He tratado de hacer todo lo que el me pidió hacer,todo ha salido bien. Bueno,solo han pasado unas horas.

Tras dar mis palabras en el estrado, todo se nubló. Me sentí bastante mal. Sentí mareo. No sabía que hacer. Mi única opción fue huir.
Corrí y corrí. Sin mirar atrás. Mis piernas temblaban. Metros más adelante caí. Comencé a llorar. Unos brazos me rodearon y sin importar quien era,seguí llorando con más fuerza.
Todos mis recuerdos invadieron mi mente. Absolutamente todos. Recordé mi primer día de escuela. Recordé el día que de me cayó mi primer diente de leche. Mi cumpleaños número 10. La muerte de mi abuela. La muerte de mis mejores amigos. La muerte de mi hijo. Mi primer beso con Hera. Mi primera pelea. Mi primer diez. Recordé todo.

-El dolor me consume. Ayúdeme.-le dije a la persona que me abrazaba.

No me contesto. Limpie mis lágrimas. Quité sus brazos y miré a aquella persona.

-Lo siento.-Me dijo.
-¿Por qué lo sientes?
-Por arruinar tu vida.
-¿Qué quieres decir?
-Jamás debí enamorarme de ti. Todo esto es mi culpa.
-No digas eso. No es culpa tuya.
-Lo es. Lo sabes.
-No lo es.-Llevé mis manos a su mentón.-No es culpa de nadie.

Hera se abalanzó a mi. Me abrazó. Sentir sus brazos me hizo olvidar el dolor.

-Jamás volveré a dejarte. Te lo juró.
-¿Es verdad lo que dijiste allá?
-¿Qué dije?
-Que ibas a pedirme matrimonio.

La solté. Me alejé un poco.

-Sí.-dije con la mirada baja.-Debí hacerlo hace mucho tiempo. Mis padres siempre me lo decían.Hera,quería decírtelo de la manera más romántica. Te enteraste de una manera diferente a la quería,éste no era el lugar ni el momento. Quería proponértelo...
-¿Querías?
-Hera,tú no quieres estar con una persona enferma como yo. Seamos realistas. Tú necesitas un Eithan Wilde a tu lado, no un Lucas Hemmings. Cualquier persona en su sano juicio lo querría.
-Lástima que mi juicio es desquiciado y no lo quiere así.

Después de sus palabras. La besé. Fue como nuestro primer besó, único y especial.
Abrí mis ojos mientras nos besabamos. Volví a cerrarlos, disfruté el momento.

-¿Siempre me amarás?-le pregunté.
-Por la eternidad.