CAPÍTULO CUATRO
Después de terminar de hablar con su amiga, en lo único que podía pensar la rubia era a cuál de los tres hermanos podía invitar, o quizás lo mejor sería que fuese sola. Desde que habían comenzado a ir, siempre eran los cinco, Harper había sumado a Zoe desde que comenzaron a salir, y a ninguno de ellos le parecía mala idea, pero ahora Clarke tenía una entrada más, podía venderla o regalarla pero no quería estar sola con las parejas. Salió de su oficina en dirección a la pequeña cocina que había allí, una taza de café podría ayudarla a decidir mejor.
-Hola –Saludó cuando abrió la puerta y se encontró con que no era la única con la idea de un café.
-Hola –Respondieron al unísono las dos jóvenes. Lexa estaba preparando café, mientras que Octavia estaba sentada en la punta de la mesa.- ¿Quieres uno? –Preguntó la mayor a la rubia.
-Gracias –Respondió Clarke mientras tomaba una de las tazas y se la alcanzaba. Quizás ese podría ser el mejor momento para preguntarle si alguna quería ir, pero qué pasaría si ninguna quería o si las dos le decían que sí. Tomó aire y suspiró mientras miraba fijamente la mesa.
-¿Todo bien? –Octavia miraba atenta a la rubia, se la podía nota nerviosa y había comenzado a jugar con los dedos sobre la silla en la que estaba recargada. Clarke levantó la vista y la miró con una leve sonrisa.
-Me preguntaba...-Comenzó diciendo y luego se detuvo. Se sentía una estúpida estando nerviosa, sólo iba a invitarlas a un partido, ni que fuera una cita.- Tengo una entrada de más para un partido de basquet –Comenzó a hablar nuevamente.- Era de Raven pero no puede ir, así que me preguntaba si alguna de ustedes quisiera ir conmigo. –La rubia intercambiaba su mirada entre las dos hermanas, quienes al parecer ninguna de las dos se esperaba que las invitara a algún lado.
-¿Cuándo es?- Preguntó interesada la menor de las hermanas.
-El sábado en la tarde. –Respondió un poco más animada, pues al menos ambas habían mostrado un poco de interés, si bien la que había preguntado había sido Octavia, Lexa parecía que estaba prestando atención a la conversación.
-Lo siento –Volvió a hablar Octavia.- Tengo que buscar un mecánico para llevar mi auto, no sé qué problema tiene.
-Tengo la mejor mecánica del mundo. –Clarke no quería presionar con el partido, por lo que continuar con el tema del mecánico no la pondría tan nerviosa. En esos momentos Lexa le alcanzaba las tazas.- Gracias. –Volvió a decir la rubia cuando tomaba su taza.- Si quieres puedo darte su número y la llamas.
-Sería genial, todavía no conocemos mucho por acá. –Clarke tomó la lapicera y el block de notas que siempre estaba en aquella cocina, a alguien se le había ocurrido que era conveniente tener uno ahí, y les fue de utilidad muchas veces, a la gran mayoría. Anotó el número de Raven y se lo dio a Octavia.
- Es mi amiga, la que me abandonó, dile que te mande yo. –Bromeó Clarke, haciendo que las dos hermanas sonrieran. Volvió por su taza y bebió un poco.
-Yo puedo ir, si quieres –Lexa la miraba atenta esperando su reacción.
-¿De verdad? –Clarke la miró con una sonrisa.- Sería genial. –Dijo realmente emocionada.- Puedo pasarte a buscar a eso de las tres si te parece bien. –Lexa asintió con la cabeza también sonriéndole.- Bien, nos vemos –La rubia salió de allí dejando a las dos hermanas solas.
-¿Un partido de básquet? ¿Desde cuándo te gusta el básquet? –Preguntó la menor, una vez estuvieron solas en la cocina, Lexa se encogió de hombros y luego tomó un sorbo de café.
ESTÁS LEYENDO
Cábala (AU Clexa)
Fiksi PenggemarLa cábala era realizada por un grupo de amigos de la infancia, ninguno de ellos imaginó que pronto crecería y con ella, nacería el amor.