Noche de peliculas.

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Me sonroje demasiado. El solo me sonreia.

-Deja de hacerme sentir asi.-le dije.

-¿Te estas enamorando?-me pregunta emocionado.

-No. Yo sabría si me estuviera enamorando.-le conteste.-Ademas, tengo novio. Aunque estoy molesta con el, sigue siendo mi novio. Lo siento.-

El bajo la mirada.

-Esta bien, no importa.-dice y de pronto me toma por la cintura.- Algún día estarás tan enamorada de mi que no se sabrá quien se ama mas entre tu y yo.- dice con una sonrisa. Yo reí tímida y le sonrei.

-Eso lo veremos luego.-le dije.-Vamos a cenar.-

Me metí al restaurante  y el tambien. Nos fuimos a la mesa y todos ahí estaban riendo. Nos sentamos y nos unimos a la conversacion. Terminamos de cenar y nos fuimos a casa. Ya ahí cada quien se fue a su habitación. Alex me siguió hasta la mía para "ver que estuviera bien", mentiroso. Entre y rápidamente me quite los tacones.

-¿Te puedo hacer una pregunta?-me pregunta.

-Ya la hiciste.-le dije divertida el me miro serio.-Esta bien ya, dimela.-

-¿No te cansas de traer todo el santo día tacones?-me pregunta.-Es decir, ¡mira nada mas todo el tacón! Yo sufriría, mucho. -me dice. Yo reí.

-Es que ustedes los hombres no resisten nada.-le conteste.

-¿Sabes? El lugar donde las mujeres deben de estar es en la cocina.-

-¿Sabes porque las mujeres viven mas que los hombres?-

-¿Porque?

-Porque ahí están los cuchillos...

-Mierda.-dice y yo reí.

-¿Quieres ver una película?-me pregunta sonriendo.-Seria en mi habitación. Yo hago las palomitas.-

-Esta bien. Pero primero me debo duchar.-le dije

-¿Quieres que te ayude?-me pregunta con una sonrisa picara. Yo le di un golpe en la cabeza.

-Eres un pervertido, y no gracias. No quiero que me ayudes.-conteste.- Anda, ve a tu habitación que yo me tengo que duchar.- el río y salió de mi habitación.

Entre al baño y me desnude. Entre a la ducha y me bañe relajadamente. Miles de gotas caían por mi cuerpo. Cuando termine, seque mi cuerpo con una toalla y me vestí con mi pijama. Desenrede mi cabello con mis manos y lo deje suelto. Salí de mi habitación y cruce para ir a la de Alex.

Toque la puerta y se escucho un "pase". Abrí la puerta y me encontré con Alex sin camisa y con un pantalón. Rápidamente me voltee de espaldas. 

-Alex ¿puedes ponerte algo por favor?-le pregunte, el río.

-Es mi habitación, hago lo que quiera.-me dice. Yo bufe.-Es broma, ya me pongo la camisa.-alarga riendo.

Cuando por fin se la pone me giro. Estaba poniendo una película. Cuando la puso, coloco un edredón en el piso y se sentó. Me indico que yo me sentara también y lo hice. Inicio la película y el apago las luces.

-¿Que película es?-le pregunte.

-No se. Puse la que sea.-me contesto con una sonrisa.

La película siguió y yo no le entendí nada. En un momento siento que Alex me abraza.

-Alex. Alejate.-le dije, el río.

-Solo esta vez ¿si? Ademas solo te estoy abrazando.-me contesta.

-Agh, esta bien. Pero no me vayas a besar.-

-Como si quisiera hacerlo.-dice.

De pronto me besa. Y se separa rápido.

-En realidad si lo quería hacer pero ya me calmo. Lo juro.-me dice y sigue viendo la película.

-Mas te vale.-dije.

Seguimos mirando la película. Siendo sincera, me aburría. Poco a poco mis ojos se cerraban hasta que caí profundamente dormida.

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Con mucho amor y cariño

Key Alejandra.

May the odds be ever in your favor.

Miradas que matanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora