Después de todo un rato, por fin era la hora de almuerzo. Se escuchó la campana, guarde todo y salí del aula. Jack venía a mi lado, y juntos nos fuimos a la biblioteca. En el camino, nos encontramos con Alex.
-Hola ¿Quién es el?-pregunta.
-Un amigo, quiere que lo asesore.-conteste sonriendo. El sonrió de vuelta y los tres nos encaminamos a la biblioteca.
...
Jack.
-...Entonces ¿Qué pasaría si los animales se extinguen?-me pregunta Claire.
-Am... ¿morimos?-conteste nervioso. Alex comenzó a reír, pero Claire lo callo.
-Sigo sin poder creer que te esté enseñando cosas de primaria.-dice llevándose las manos al rostro-. No Jack, no llegamos hasta el punto de morir los humanos. Quizás si los animales sigan y sigan extinguiéndose hasta que ya no haya ninguno llegaríamos a morir, pero es casi imposible y muy poco probable. Así que sigamos ahora con literatura clásica.
-Ah ¿Qué? No, por favor no. Todo menos eso, te lo ruego.-suplique.
-Vamos, un poco de Shakespeare no hace daño.-dice Alex riendo.
-Entonces, comencemos. Iré a buscar 2 libros que quiero que leas.-me dice y se levanta del cubículo en el que estábamos.
Seguí ojeando el libro de ciencias. Alex jugaba en su celular. Como odiaba Ciencias, y el profesor no ayudaba mucho que digamos.
Justo cuando pensaba llego Claire con 2 enormes libros.
-¡No esperas que lea eso!-le grite.
Pero llega la bibliotecaria y me indica que me calle, me disculpe.
-Jack, si quieres ser inteligente, tienes que leer mucho. Pregunte a la bibliotecaria los dos libros más explicables para la literatura clásica. Posiblemente te aburras y te duermas, pero, por los menos has el intento de leerlos, al menos por mi.-me dice mientras se sentaba a mi lado sonriéndome.
-Agh, tratare.-dije rendido.
-Muere de hambre. ¿Les falta mucho? -pregunta Alex dejándose caer en un silla.
-Creo que ya acabamos. Solo que, Jack, estudia Algebra, porque mañana trabajaremos con eso. Con permiso.-dice Claire y sale del cubículo, con Alex detrás sonriendo.
Mierd*. Odio Algebra.
Claire.
Estábamos en la cafetería Alex y yo. Yo comía una ensalada con aderezo. Alex comía una hamburguesa. De pronto, una chica castaña se nos acerca.
-Hola Alejandro ¿me podría ubicar aquí con ustedes? Mis amigas hoy faltaron, lo cual es raro, pero no importa.-dice la chica, pero con un tono soñador, como si estuviera distraída. Tenía una voz muy, muy aguda, era rara.
-Claire ¿te importa?-me pregunta Alex.
-No, para nada. Siéntate.- conteste.
-Soy Esther. ¿Tú eres Claire verdad? Todos te conocen. El lunes mire como un chico se había sentado en tu asiento. Fue increíble-me dice con el mismo tono soñador.
Esther y Alex hablaban. A esta chica no se para la boca, no para de hablar. Aun así, no era como las otras chicas; plásticas. Ella era norma...bueno, trata de ser normal, porque su voz no lo es. Me agrada un poco, por ser natural.
En fin, siguieron hablando, yo acabe mi ensalada y fui a depositar el plato en la basura. Regrese y Esther ya se había ido.
-¿Estas celosa?-me pregunto Alex.
-¿Qué?-le pregunte-. No. Es una chica simpática.-dije y me volví a sentar.
-Bueno, ¿Qué te toca?-me pregunta.
-Creo que literatura.-conteste-. Me iré yendo, estoy aburrida-
-Yo puedo hacer que no te aburras.-me dice pícaro. Lo mire y rodé los ojos.
Me levante de la banca y me fui a literatura. Al menos, podría leer cómoda.
---------------------------------------
Con mucho amor y cariñoKey Alejandra.
May the odds be ever in your favor.

ESTÁS LEYENDO
Miradas que matan
Novela JuvenilUn triángulo, se podria decir, era lo que pasaba. Tres personas. Dos chicos. Una chica. Claire era muy feliz al lado de su novio Jace, ambos eran los mas rudos del colegio, el primer día del colegio entran varios novatos, entre ellos Alex. Un chico...