Miradas que matan

Tan perfecta.

Alex.

Claire iría a vivir al departamento junto conmigo. ¿Esto no podría ser mas emocionante? Esto será increíblemente genial. Le dije que por mientras nos instalamos en el departamento podría ella vivir en casa. Ella acepto. Siendo sincero, creo que me volví a enamorar de Claire. Ella es perfecta. Su cabello es hermoso. Sus ojos son bellísimos y sus labios, son sumamente deseables. La amo. Así es, la amo. No se como demonios lograre que yo le guste, pero lo haré. Haré lo imposible para que Claire me ame.

Estábamos en su habitación conversando de cosas sin sentido, y comiendo chocolate.

-Y ¿como te sientes de tu mandíbula?-le pregunte.

-Bien, supongo.-me responde.-Oye, una pregunta ¿que paso después de que me desmaye?-pregunta.

-Veras, Jace rápidamente te cargo y salimos de ahí. Nos fuimos directamente a un hospital en mi auto. Te atendieron y te pusieron anestesia. Por eso te dormiste mas. Te miraron la mandíbula y te operaron. Fue demasiado rápido, según yo. Pero después estuviste bien. Jace y yo te trajimos a tu casa, y te recostamos en habitación de Jace. De verdad que no se nos ocurrió recostarte en tu habitación.-le dije, ella puso una cara de confundida.

-Bueno, gracias.-me dijo con una sonrisa.

-¿Te puedo pedir algo?-le pregunte. Ella asintió.-¿Me regalas un abrazo?-pregunte tímido.

Ella me miro y se acerco a mi. Me abrazo y yo la abrase. Hundió su cara en mi cuello. Y yo mi cara en su cabello. Huele exquisito. Sin duda, ella es mas que perfecta. No quería separarme de ella ni un segundo. Pero lastimosamente nos separamos. Ambos sonreímos.

-¿Te quieres ir ya?-pregunte.

-Si. Por favor.-responde levantándose de la cama.

En todo un rato ella tomo sus cosas. Ropa, zapatos, su maquillaje, algunas pertenencias de ella como fotografías, adornos de su mesa de noche, entre otras cosas. Al final traía tres maletas no muy grandes. Salimos de su casa y subimos a mi auto. En el camino hacia mi casa veníamos conversando. Sinceramente no prestaba mucha atención a lo que decía. Miraba su boca hablar y solo me disponía a ver sus labios. Me perdía en ellos. Me puse a pensar que ya habían estado juntos los de ella y los míos. Solo de pensar eso me estremecía. ¿Cuan perfecta debe ser esta chica? Después de un no muy largo camino llagamos a casa. Bajamos y yo como todo un caballero la ayude a cargar sus maletas. Entramos a casa y todo estaba en silencio. Que raro. De pronto baja las escaleras mi hermano mayor Edward. Venia solo en una toalla y destilando agua. Mire a Claire y ella se mordió el labio. Mierda.

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Con mucho amor y cariño

Key Alejandra.

May the odds be ever in your favor.