Seres (Yaoi)

Autorización

Desperté de repente bastante alterado, observe a mi alrededor y todo estaba completamente vacío. Observe el reloj que estaba pegado en la pared perplejo. Eran las 10, ya todos deberían ir en camino a la segunda prueba o tal vez ya la deberían estar haciendo. Me levante de la camilla, el lugar estaba completamente solo, el resto de mis compañeros que habían perdido en la pelea se fueron. Era increíble como ninguno fue capaz de despertarme. Me había quedado completamente dormido.

Me puse hostil cuando uno de ellos comento que sería fuera de esta prisión subterránea. Un juego en equipos, simulando una batalla. Como lo hacían antes los soldados. Así que Eriel tenía razón, estaba completamente soló.

Salí de la habitación mientras terminaba de ponerme mi uniforme y camine por todo el lugar con la esperanza de encontrar a alguien. Pero era completamente en vano, me sentía mal y abandonado, pero supongo que no importa, podía quedarme aquí soló sin ningún problema. Quitando un poco mi depresión camine hasta el comedor pero al llegar ni siquiera estaban las cocineras, las luces estaban encendidas y en la cocina había una gran cantidad de platillos aun calientes, olía esquicito. Llegue a sentirme en una película de terror, o ciencia ficción donde los extraterrestres se llevaron a cada humano y era el único en la tierra, pero no lo creía. Me serví un poco de sopa y comencé a comer, mis pensamientos volvieron a atacarme, la sola idea de que Evan sea capaz de cambiarme como si fuera un objeto me alteraba y me hacía sentir aun peor. No creía que fuera tan malo como para hacer eso solo porque perdí una pelea. Pero sentía que ya no podía hacer nada para evitarlo.

Seguí rondando hasta que llegue a la sala de controles, tampoco había nadie pero todas las cámaras de vigilancia del lugar seguían funcionando, me senté en esa gran silla y revise el resto de las habitaciones, solo se encontraba el personal de limpieza, suspire de alivio al no sentirme tan soló. Estuve dando vueltas en la silla tan concentrado en mí cuando una de las pantallas comenzó a pitar. Me acerque a ella sin saber que era lo que significaba, pero la pantalla no mentía, un grupo de soldados estaba entrando a la base, encapuchados, con armas y parecían no querer conversar. Los seguí por las cámaras, ellos entraron a la habitación donde el personal trabajaba y sin detenerse les dispararon. Se estaban acercando a mi punto y tenía que escapar antes de que me encontraran. Había una sala con una puerta subiendo unas escaleras, una salida que te llevaban a un hangar, había un plano del lugar enmarcado y colgado arriba de las pantallas y trate de memorizarme lo mejor que pude el camino.

Revise los pasillos antes de salir por completo del cuarto y comencé a buscar la salida. Escuchaba los pasos de todos esos soldados, no había mucha luz y todas las paredes estaban forradas de metal y concreto. El trayecto me tomo mucho, había llegado al punto donde sabía que estaban en cada habitación, podía escucharlos. No hablaban más que para dar órdenes y en cada cuarto escuchaba un "No están aquí".

Para llegar tenía que pasar por un pasillo con ventanas que conectaban uno con el otro, me agache en esa parte para evitar que me vieran y trataba de avanzar lo más sigilosamente posible. Podía escuchar los pasos de uno que salía del cuarto y me levante acelerar el paso uno de ellos apareció de la nada en el pasillo y comenzó a dispararme. Logre detener sus balas con mi poca energía, note que no eran balas, parecían dardos. El sonido de esos frascos caer alerto a los demás.

Inicie una carrera hacia la salida escuchando el leve sonido de todas esas armas disparar hacia mí. Subí las escaleras y forcé la puerta para poder salir pero apenas se abrió más guardias entraron por ese lado. Tome el arma del primero y le di una patada que hizo que callera por las escaleras junto el resto de los soldados que intentaban subir. Usaba al mismo tiempo mi energía para evitar que sus dardos me dieran pero eran más de los que podía digerir.

Trate de pelear con todos al mismo tiempo pero era complicado, miles de pensamientos atacaban mi mente, no quería que me atraparan, no iba a dejar que me capturaran, incluso podía sentir como mis fuerzas aumentaban conforme mi desea de salir por esa puerta aumentaba y solo peleaba sin pensar, no medí mis movimientos y uno de ellos de me tomo del cuello de la chaqueta, antes de que pudiera reaccionar golpeo con su arma mi estómago. Sentí un dolor punzante en mi brazo y me caí un momento hasta que uno de ellos se me puso encima, sujetaba con mi mano su rostro dispuesto a disparar como ya lo había hecho antes, cuando en menos de lo que me espere alguien lo jalo y lo separo de mí. Era Evan, comenzó a dispararles a todos haciendo que prestaran su atención en él, cree un escudo para él para que no lo dañaran, su manera experta de pelear era dominante y apenas tuvo la oportunidad me tendió la mano y ayudo a levantarme para que le siguiera el paso hasta que salimos de la cueva.