Todo se derrumba

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Estaba en el medio de la nada. Lo único que  podía ver era mi casa. Fui corriendo hasta allí para ver si mi familia estaba dentro, si podían salvarme de aquel frío lugar. Entré, pero no había nadie. Comencé a buscar pistas para saber a dónde se habían ido. No había nada que me indicase el paradero de mi familia.

Quería salir de allí, pero al tratar de ir al jardín, pude ver que la puerta se encontraba cerrada. Asustada, fui a ver si la puerta por la que entré lo estaba también. Traté de tirarla abajo, agarré llaves que estaban en la mesa, pero nada funcionaba. Traté de calmarme y pensar que todo iba a estar bien, aunque no duró mucho. 

Había un olor extraño en la casa que venía de la habitación de mi hermana mayor, Melissa. Cuando llegue allí, grité al ver su cuarto en llamas, donde yacía su cuerpo cubierto por el fuego viviente. Corrí a la cocina para llenar un balde con agua, pero ya no había. No sabía qué hacer ya que el fuego había cubierto la mayor parte de la casa.

Mis manos sangraban de tanto golpear la ventana para poder salir de allí, pero lo extraño era que no me dolían, tampoco me dolía la quemadura que me hice al bajar las escaleras. Ya no se escuchaba la madera quemándose ya que la voz de mi madre opacaba el sonido. Su voz decía mi nombre:

-Alex, Alex, Alex...

Fue ahí cuando me di cuenta de que era un sueño.


¿Dónde está Melissa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora