Prólogo

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Prólogo

La respiración se me acorta en cuanto veo el líquido rojo deslizarse entre mis dedos, es caliente y espeso, como si la vida se escapara de esa manera. No puedo ver nada a mí alrededor, la luz está apagada y hay un silencio absoluto que me hiela la sangre. Y de pronto, el atronador llanto de un bebé queriéndose hacer escuchar. Mi corazón late rápido y tengo mucho miedo, sé lo que sucede después, cierro los ojos cuando siento un gran peso entre mis brazos... El llanto sigue, llamándome para observar lo que cargo... Abro mis parpados con lentitud y...

Despierto.

Con la respiración acelerada, el corazón latiendo a mí, y una capa gruesa de sudor viscoso impregnándose en cada recóndito lugar de mi piel. Otra vez la misma pesadilla y a la misma hora. Y, como siempre, me pongo de pie con mucho cuidado de no hacer ruido y despertar a Jacob. Mi marido. La palabra sigue sonando extraña aún luego de cinco años. Al principio estaba dudosa sobre su propuesta, mi primera reacción fue responder que no quería casarme con él pero obviamente no se lo dije, finalmente acepté. No quería que mi bebé tuviera solo una madre, yo quería una familia completa. Y no es que no quiera a Jacob, la verdad es que con el tiempo lo he llegado amar.

Enciendo la luz del pasillo antes de abrir la puerta de la habitación contigua, contengo la respiración. No importa cuántas veces deba despertarme en la madrugada, siempre tendré la misma sensación que me eriza la piel. El miedo de no verla de nuevo. Pero allí esta, durmiendo plácidamente en su cama.

Jacob ha sido un gran padre para Lillian, es como si de verdad compartieran el ADN aunque sabemos que no es así. Solo pocas personas conocemos la verdad: Jacob, Rosalie, Emmett y yo. Mis padres se tragaron la mentira de mi relación con Jake y ninguno puso en duda su paternidad, bueno, Renée no lo creyó al principio pero creo que lo dejó pasar.

Mi hija nació seis meses después del terrible suceso en el que estuve a punto de perderla, fue un nacimiento prematuro pero afortunadamente estaba sana y fuerte. La nombramos Lillian, en honor a Rosalie quien se bañó en lágrimas de alegría cuando le dimos la noticia. Por supuesto, me sentía culpable con mi amiga por la estupidez que había estado por cometer y esa era mi manera más sincera de pedir disculpas.

Aún no encontraba la manera de perdonarme a mí, porque no tenía perdón. Es algo imposible de olvidar y cada noche, luego de un perfecto día, la verdad me atormenta. No fue algo de unos días, no, fui diagnosticada con problemas de alcoholismo, fui inscrita en un grupo de apoyo y solo así sería capaz de mantener a mi hija conmigo. Jacob estuvo de mi lado todo ese tiempo, un factor importante para aceptar su propuesta. Si por alguna razón caía de nuevo en el abismo del alcohol por lo menos Lillian se quedaría a salvo con Jacob.

Me acerco a mi hija a pasos silenciosos, con mucho cuidado me siento al borde la cama y paso una mano por su cabello. Su pecho sube y baja paulatinamente, justo como debería. Una sensación de paz me invade y dejo un suave beso en su frente antes de abandonar la habitación.

No creo que pueda conciliar el sueño el resto de la noche por lo que me dirijo a la sala, es un poco difícil atravesar debido a todas las cajas amontonadas. Una vez que tuve a Lillian en mis brazos supe que debía abandonar Los Ángeles de una vez por todas, había permanecido allí hasta que mi salud mejorara pero escapé en cuanto me sentí mejor.

Mis padres permitieron que Jacob y yo viviéramos en su casa en lo que nuestra economía tomara forma; un año más tarde nos mudamos a Seattle. Y hace apenas unas semanas cambiamos nuestra ubicación a California, Jake no estaba del todo seguro de hacer un cambio tan radical pero pude convencerlo de algún modo.

Enciendo mi laptop y enseguida entro a la bandeja de entrada de mi correo electrónico. El correo sigue allí como una nueva esperanza, es real y espero que esto suponga un gran cambio. Había recibido una oferta de trabajo hace dos días, en una revista; era una gran oportunidad y me sentía tan afortunada de haber sido considerada para el puesto. Desde luego, mis estudios habían quedado truncos ante la llegada de mi hija. Los primeros tres años de Lillian me había dedicado a criarla, los siguientes años conseguí un empleo de mesera en un restaurante de comida china, no era una buena paga pero luego de haber estado inactiva por años, bueno, eso era lo mejor que podía conseguir.

-Bella -me sobresalto al escuchar a Jacob.

-Yo... No podía dormir -mi voz suena nerviosa aunque no es la primera vez que me descubre vagando por la casa a las 3 de la madrugada.

-Es tarde, cariño. Vamos a la cama -sus brazos rodean mi cintura. Acomodo mi cabeza en su hombro, aspiro su aroma pero el olor que busco no se encuentra allí y con el paso de los años ya hasta lo he olvidado.

-Te alcanzo en un momento -le digo cuando intenta llevarme a la habitación.

Espero hasta que Jake desaparece por la puerta y escucho el rechinido de la cama que cede ante su peso. Ahora es seguro. Busco mi bolso en el sofá y enseguida saco el sobre ya rasgado. Con cuidado de no hacer mucho ruido lo rompo en diminutos pedazos para luego tirar los restos en el bote de basura, en el fondo, donde no puedan ser encontrados.

Si voy a empezar a una nueva vida me aseguraré de que sea feliz, no importa lo que dure.

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¡Primera Parte!! *grito fangirl*

Sé que he dicho que lo publicaría ayer pero tuve un pequeño problemilla que cambió mis planes, lo siento u.u Pero aquí esta! Mejor tarde que nunca ;)

Este prólogo lo he usado para dar un resumen general de lo que fue de Bella en los cinco años, luego del epílogo de Bajo el Mismo Techo. Muchas me pidieron que tuviera gemelos (por tu culpa, Kassy 7n7) y no lo hice de esa manera ya que, como pudieron ver aquí, Bella tuvo muchos problemas con el embarazo y el alcohol, además de problemas sociales, etc. Y sí, también se casó con Jacob.

Mi idea principal era llamar a la niña Renesmee pero dado que ese nombre es una combinación y Esme es una vil perra en este fic pues lo he cambiado :3 Y bueno, qué más les digo... Este segunda parte será mucho más intensa que la primera 7w7

¡¡Gracias por leer!! 💖

-Vii 💖💖💖

All you never say ||Resubiendo||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora