All you never say ||Resubiendo||

Capítulo 27

Capítulo 27

Alice

Pasó un buen rato cundo por fin pude digerir lo que sucedió y aunque no podía evitar sentirme destrozada si pude controlar las lágrimas y puedo presumir que ninguna abandonó mis ojos.

Aproveché el momento de distracción para huir de la iglesia, todos estaban entretenidos con el espectáculo de verdadero amor entre Félix y el otro chico. Me sentí tan celosa por la verdadera muestra de afecto que no quise quedarme un segundo más. Desde el principio sabía que Félix no me amaba tanto como yo a él pero no esperaba que esta fuese la razón.

Entré al baño que estaba en la parte trasera de la iglesia, rompí la larga cola del vestido y algunas capas que lo hacían más pesado. Salí por atrás para no llamar la atención de los camarógrafos que esperaban mi salida triunfal, o mi fracaso.

Llamé a Holly para que viniera a rescatarme, solo en ella podía confiar ya que Gianna no entendería mi dolor, es lógico que ella estuviese de lado de su hermano. Holly me llevó a la academia y una vez allí pude deshacerme del vergonzoso vestido que amenazaba con hacerme llorar.

Seguía tan confundida que no fui capaz de detenerme a pensar qué era lo tenía que hacer y simplemente dejé que mis instintos se hicieran cargo de la situación. Holly me dio mi celular y llamé a Félix luego de ignorar todas las llamadas perdidas.

Hablamos por menos de un minuto pero así fue como di con su localización, él estaba haciendo lo mismo que yo. Tirando a la basura el costoso traje que había comprado para el matrimonio que le iba a servir de cortina para ocultar su homosexualidad.

Dos años y siete meses tirados por la borda como si el tiempo no se desvaneciera en realidad. Una completa pérdida de tiempo de ilusiones falsas y sueños que ahora se convierten en pesadillas.

***

— ¿Segura que quieres hacer esto?

Le doy una mirada al edificio que se abre frente a nosotras, no he tardado mucho en decidirlo y sé que es lo mejor que puedo hacer por ahora.

—Sí. Espera aquí y si no bajo en quince minutos llama a la policía, y consigue pañuelos por si las dudas.

Holly se ríe ante mi inexplicable sentido del humor, cruzo mis brazos para darme valor y avanzar hacia el edificio. Subo el primer piso y me detengo ante la primera puerta, siempre he agradecido que Felix no haya escogido el último piso.

Golpeo la puerta un par de veces y al otro lado escucho los pasos que se acercan a atender mi llamado. La puerta se abre y Felix me invita a pasar con una sonrisa, nunca había visto que sus labios se curvaran tanto, incluso sus ojos brillan.

— ¡Vaya! ¡Mira esos hoyuelos! —Le halago—. Me siento un poco celosa.

Y es la verdad pero intento ocultarlo con una sonrisa ladeada. Es cierto eso de que cuando amas a alguien te importa tanto su felicidad que incluso tienes que renunciar a la tuya.

Felix suelta una risita y baja la mirada avergonzado, conmigo nunca hacía eso. Da un paso para acercarse y estrecharme entre sus brazos. Un dolor me recorre el pecho al darme cuenta de que esta es como la despedida oficial, el último abrazo. Y de haber sabido que nuestro último beso sería ayer por la mañana me habría encargado de hacerlo durar.

—Gracias, Ali —susurra en mi oído.

Oculto mi rostro en su cuello y aspiro su aroma profundamente, cierro los ojos con mucha fuerza para no llorar. Espero que Holly me haya hecho caso y este esperándome con una caja grande de pañuelos para cuando regrese.