Estabas en una misión con Wanda y Clint en Barcelona, había que desmantelar una base pequeña pero poderosa de HYDRA y Fury había decidido mandarlos a ustedes.
Tú eras solo una simple agente bien entrenada por Natasha, Clint tenía su arco y flechas, y Wanda sus poderes de telequínesis.
Su situación estaba así: te encontrabas peleando y quebrando cuellos a varios agentes de HYDRA junto con Wanda mientras Clint entraba a dejar una bomba en su interior de la base.
Puñetazo, patada, puñetazo, cuello quebrado, puñetazo, disparo. Los agentes de HYDRA comenzaban a ser más y Wanda y tú no podían con ellos.
-¡Son muchos!
Gritaste y tiraste una patada a un agente.
-¡Tú sigue, no podrán con esto!
Wanda empezó a hacer algo con sus poderes y dejo desmayados o muertos a varios agentes.
Saltaste encima de uno y lo dejaste inconsciente tirado en el suelo sobre otro agente.
Sentiste que el aire te faltaba ya que un agente te ahorcó por detrás y tratabas de quitártelo de encima, pero él era más grande que tú y te sentías muy débil a la par de él. Dejaste de luchar cuando sentías que ya no llegaba el aire a tus pulmones, de repente un golpe en su espalda hizo que te soltara y cayeras intentando respirar normalmente. Viste como Wanda se puso enfrente de él con su rostro enojado.
-¡Con ella no te metes!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Viste como Wanda mató a ese agente y sentiste tu cuerpo algo débil que caíste de rodillas al piso.
-¡TN! ¿Estas bien?
Se agachó a tu altura y te sostuvo.
-Wa-wanda... No respiro...
Susurraste. Wanda asustada te abrazó más hacia ella sintiendo las lágrimas salir.
-Tra-tranquila... Estarásbien...
-Creoquehoymeretirodeagente...
-¡No! ¿Por quélodices?
Levantaste un poco tu camisa dejando ver una herida con cuchilla muy profunda que un agente te había hecho pero no le diste importancia hasta ahora. Wanda te miró y sus ojos se cristalizaron dejando que sus lágrimas salieran.
-Fueunplacertrabajarcontigo...
Sonreíste mientras Wanda negaba.
-Vasaseguirconmigo ¿ok?
Susurra llorosa y acariciaste su mejilla suavemente.
-Wa-wanda... Tea-amo...
Dejaste caer tu mano de su mejilla ya sin fuerzas y empezaste a ver blanco.
-¡TN! TN... Yotambiénteamohermosa... Por favorquedáteconmigo...
Susurró y al verte sin vida te abrazó fuertemente llorando.
Al menos tus últimas palabras fueron algo que tenías guardado y no podías irte sin antes sacarte ese peso de encima.