Suplicabas detrás del chico veloz quién estaba cruzado de brazos viéndote serio.
-No TN, no es no.
-¡¿Pero por qué?!
-Porque puedes salir lastimada.
-¡Dejame ir a la misión!
-No, y es mi última palabra.
Pietro se fue caminando tranquilamente mientras bufabas, aveces era demasiado sobreprotector.
Te cruzaste de brazos enojada, a veces querías patearle la hermosa cara que tenía de modelo a tu novio.
Ya era tarde y los chicos se habían ido a la misión. Tu estabas en tu cuarto pasando los canales en la televisión aburrida, cuando te empezó un dolor en el estómago, te acostaste para calmarte un poco pero luego te llegó el dolor al pecho, empezaste a sudar frío y a hiperventilarte.
Tu respiración era agitada, te estaba empezando a preocupar.
-To-tony...
En unos segundos Tony ya estaba en tu puerta preocupado, para él eras como su hija.
-¡¿TN?! ¡¿Qué tienes?!
Tocó tu frente y se puso en alerta. Te cargó y te llevo deprisa al laboratorio mientras hablaba con FRIDAY.
-FRIDAYllamaaBanner, dilequeesunaemergencia.
-Siseñor.
Te acostó en una camilla y empezó a revisarte, conecto varios cables a tu cuerpo para saber de donde provenía el dolor o qué lo causaba.
Mientras veías a Tony corriendo de un lado a otro, tus ojos se iban cerrando poco a poco y escuchabas todo como si fuera un eco. Y en un instante tu ya te encontrabas desmayada.