Spirit. [Terminada]

Décimo sexta parte: Ups.

- A las diez de la mañana quiero que estéis listos para iros hacia casa, después me tengo que ir a trabajar y Cinthya tiene una entrevista -anuncia Ruth cocinando mientras todos nosotras estamos en el sofá abatidos.

- ¿Cual es el trabajo C? -pregunta Shane.

- El supermercado.

Me río un poco en mi interior, y recuerdo cuando entré a aquel "supermercado."

La cena es divertida y entretenida, Cinthya no para de decir tonterías y su madre le regaña riéndose. Esa madre me gustaría a mí. Shane se ve un poco distanciado e introvertido y a pesar de que su prima le involucra en alguna de sus bromas, él siempre vuelve a su universo.

Al cabo de un rato se nota la pesadez en mi ojos, y entonces es cuando Ruth ordena que todos nos vayamos a dormir. Esta  vez Lizzie no nos sigue a Cinthya y a mí, aunque no le doy mucha importancia. Sólo quiero acostarme en la cama y cerrar los ojos, pero Cinthya no piensa lo mismo.

- ¡Me prometiste que hoy volveríamos a jugar! -replica.

En algún lugar entre mi mente y la conversación pienso si es posible que mi cabeza pueda estallar de un momento a otro.

- Cinthya, tengo sueño, me duele la cabeza, estoy cansada, no siento los músculos... ¿No podrías ser un poco comprensiva?

- No -contesta haciendo caso omiso a mis pucheros.

Le miro con cara de cordero degollado, realmente estoy cansada.

- Vale, solo haremos una ronda.

Discuto en mi cabeza la idea de seguir luchando por mi sueño, pero creo que si no quiero pelearme con Cinthya será mejor que acepte.

- Vale, pero empiezo yo. 

Ella sonríe, aprobando mi idea.

- ¿Sabes hacer el pino? -pregunto.

- ¿Es apoyarse en una pared mientras tus manos están abajo y tus pies arriba?

-Exacto.

- Sí, sé hacerlo.

- Te reto a estar un minuto en la posición del pino.

Ella me mira con superioridad y con un simple movimiento está encima de sus brazos.

-Vamos, empieza a contar -ordena.

Cuento hasta sesenta con una melodía que me enseñaron de pequeña y ella baja suavemente. Se sacude las manos en el borde de la camiseta/pijama y forma una sonrisa maliciosa.

- Ahora me toca a mí, pero no creas que por tu horrible reto voy a rebajar el mío.

Yo asiento, y a la vez me preparo para lo que viene.

- Shane hace algún tiempo que me robó un collar. Es de oro y en el medio tiene una piedra azul. Me encanta ese collar...

"Que no diga lo que yo pienso" suplico en mi cabeza.

- Ayer me asomé a su habitación y lo vi en la mesita de noche. Mi reto para ti es que vayas a la habitación de Shane y recojas lo que me pertenece.

Es lo que intuía, mierda.

Ella se levanta de la cama, dando a entender que no admite preguntas ni réplicas. Va hacía la puerta y la abre.

- Vamos.

Me desplazo hacia allí.

- ¿No podemos hacer un trato?

- Por supuesto que no.