¿Cómo Sería? (GAY)

Cap. 6

Necesito a alguien que me diga que las cosas estarán bien, que todo puede mejorar, que la vida está para grandes cosas. Sólo necesito a alguien que me anime cuando la tristeza me quiera ganar la partida.

-Juan Pablo Silva

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Al llegar a clases, llegué junto a Sara y TODAS las miradas se centraron en mí, como si tuviera algo, no se...

Al sentarme se acerca Victoria, la estúpida que tanto odio.

—Hola, señor de Ríos.

—¿Qué quieres querida? —respondí con una sonrisa hipócrita.

—Nada, sólo hablar, relacionarnos.

—¿Si? ¿y de qué quieres hablar?

—De tu relación, de tu vida, ¿por qué no nos dijiste que eras gay?

—Primero, no tengo que hablar de mi vida personal con personas falsas, segundo, si soy gay no lo tengo que compartir con medio mundo, y para que te vayas contenta, soy bisexual.

—Ay, pero que odioso, sólo quería saber, conocer a mis compañeros.

—¿Conocer?, por favor —dije con ironía —sólo lo quieres saber para hablar mal de mí, aunque no tiene mucho sentido, ya que tu mejor amigo, el cara de mono —tosí a propósito —perdón, Andrés, es gay, se le ve a leguas.

—Él no es gay, por Dios.

—¿Ah no? Pues no he conocido a un heterosexual que se la pase jalándose el pelo con sus amigas, hablando mal de otras personas, incluso de ustedes mismos, y actuando de una manera no muy masculina.

—Eso no te importa.

-Ni a ti mi vida tampoco. Adiós —dije haciendo una despedida con mis dedos.

—Idiota —se fue molesta, y yo con satisfacción.

La mañana transcurrió con total anormalidad, las personas me veían, las personas a quienes le caía mal me miraban con mala cara. Pero con lo tanto que me importa la opinión de los más...

Conversación:

—Hola, do you miss me? (Me extrañas)  —dijo.

—Mucho. Hoy todo el mundo mirándome y otros preguntándome. Pero no me importa, solo me agobian.

—En serio lo siento.

—No importa, a mi también me gustó la escena.

—Te quiero ver, no te puedo pasar buscando?

—Qué más quisiera yo? I need your lips (necesito tus labios).

—I need your lips too (Yo también)

—Bueno, adiós, cuídate.

—Adiós.

Transcurrió el día con normalidad, son nada interesante que contar.

—Hola —dijo.

—Hola —nos dimos un largo beso.

—¿Ves? Ya no esperé frente a tu Instituto.

—Yei, lo estamos logrando. ¿A dónde vamos?

—A mi hotel.

—¿Perdón? —quité la sonrisa —no lo pienso hacer.

—Jaja, no, es broma, solo que quiero ver una película, contigo, solo eso pasará.

—¿Me lo prometes?

—Te lo prometo —me dió un beso —ven, sube —me subí.

Llegamos al hotel, y sí, era el más lujoso de la ciudad, tal como lo sospeché.

Subímos por el ascensor, y como este era de vidrio, se podía ver el mar, era demasiado hermoso.

—Esto es mas grande que mi casa —pronuncié al ver tal suite —¿es que no te confirmas con una habitación normal?

—Jaja, yo no la pido, la compañía para la que estoy trabajando.

—Ah vale... pues está muy bonita.

—Ven, acuestate y elige la película.

Me acosté. Elegía la película mientras que el cerraba las persianas. Elegí Divergente, ya que es mi película favorita, pero lo que en realidad hicimos fue darnos besos mientras que la película seguía.

—Manu, ¿qué somos?

—Fer, ¿quieres ser mi novio?