¿Cómo Sería? (GAY)

Cap. 23

¿Y yo? Bueno, yo sólo seguía a Manu con pasos lentos hacia la planta de abajo.

Vi como Manu bajaba las escaleras como si fuera un caballo de guerra, en cambio yo las bajaba con tal delicadeza como si fuera una princesa.

-¡FRANÇOIS! -ya Manu había llegado a la cocina.

-Sí Manu, dim... -no concluyó ya que él le metió un puñetazo en la mandibula. Después uno en el estomago, otro en la mandibula, y seguía...

-Manu, como que le duele un poquito -dije con tranqulidad. A ver, no voy a decir que no me satisfacía que le estuvieran dando una paliza a ese francés del coño, pero algo le tenía que decir. Pero bueno, no todo es un camino lleno de rosas por lo que tuve que separarlos -¡A ver Manuel, ya basta! -lo cogí del brazo -¡no merece la pena! -lo soltó y lo dejó tendido en el piso.

-¡¿CÓMO SE TE OCURRE HACER TAL BARBARIE?! -gritó Manu.

-Ma... Manu pu...puedo explicarlo.

-¡¿Explicar qué?! ¡¿Que le cortaste toda la ropa a mi novio?! ¡¿Que casi arremetes contra él esta mañana?! ¡¿Que si él no supiera esas habilidades le hubieses hecho daño o hasta matarlo?! ¡¿Eres estúpido?!

-¡¿Qué cojones está pasando aquí?! -exclamaron al unísono Julián y Josemy saliendo del comedor hacia donde estábamos nosotros, en la sala de estar.

-Manu le dio una paliza a François -dije.

-¡¿Qué?! -exclamó Manoli.

-¡Vete de mi casa! -exclamó Manu.

-Manu cálmate, ¿está bien, sí?

-No Fer, no. ¿No ves todo lo que te ha hecho este tipo sólo por estar enamorado de su propio primo?

-Manu, lo sé. Pero es algo que no se puede resolver ¿sí? Sólo dale tiempo al tiempo, seguramente olvidará ese sentimiento que siente por ti. Vamos al cuarto para que te calmes ¿sí? ¿por mí?

-Vale, ¡pero vete de mi casa! -nos aproximábamos hasta las escaleras pero Manoli me detuvo del brazo susurrándome al oído.

-Lo duermes y bajas a explicar todo -asentí.

Subimos a la habitación y nos recostamos en la cama solamente viendo el techo. Oía la respiración acelerada de Manu, hasta que en unos minutos se hizo lenta y profunda por lo que voltee a verle la cara y efectivamente, se quedó dormido.

-Venga Fer, a enfrentarse a los suegros -mi subconsciente.

Bajé las escaleras y escuché unas voces en el comedor, por lo que supuse que eran ellos. Me acerqué en silencio hacia el mueble por lo que ellos se cercioraron de mi presencia.

-Ven Fer, sientate por favor -me dijo Julián y me senté -por favor cuéntanos que ha estado pasando entre vosotros.

-Pues resulta que el día que llegó François y me vio no me vio con buenos ojos, y por si se dieron cuenta me dijo "crío" cosa que no se lo deberías decir a nadie a quien apenas conoces. Después esa madrugada me levanté para ir al lavabo y después a coger agua, y él estaba en la cocina, y entre conversaciones sobre porqué yo estaba con Manu y que a él le gustaba me amenazó. Un día que salí con Manu él estaba aquí en la sala y me dijo algo en francés que entendí perfectamente, cosa que no era para nada bonito. Ayer cuando me levanté de la resaca que tenía de la noche anterior, Manu fue a ayudaros en vuestro trabajo y me dejó solo, mando a Josemy a traerme una sopa para la resaca, pero lamentablemente se tuvo que ir. Después François estaba golpeando la puerta de la habitación con razones obvias, pero menos mal llegó Manu y detuvo todo. Esta mañana Manu se fue a una sesión de fotos y me dejó una nota diciéndome donde estaba y que yo fuera para donde él estaba, me dejó una navaja por si las dudas. Me arreglé, yo me iba a salir por la ventana, ya que yo sé un poco parkour y para mí era pan comido, pero no quería dejar la puerta cerrada con llave por si Manu no se había llevado las llaves, pero resultó que François estaba ahí esperando que yo abriera la puerta, me dijo un par de palabras, me iba a hacer algo pero por fortuna caminé hasta la ventana di un mortal hacia atrás dandole una patada en la mandibula a él y caí en el pasto de la entrada y salí corriendo hacia la calle principal para coger un taxi hacia la Gran Vía. Y luego pasó que llegué y mis cosas estaban tiradas en el piso y rotas -tomé aire.

-Wow -se asombró Manoli -te queremos pedir una gran disculpa Fernando. No pensé que este muchacho pudiera llegar a los extremos por amor.

-No se preocupen, no fue culpa vuestra. Por cierto, ¿dónde está él?

-Se fue a un hotel, le pudimos curar las heridas de los golpes.

-Ah vale -bostecé -. Creo que me voy a dormir. Lamento mucho lo de esta noche.

-No te preocupes, no fue tu culpa. Bueno, buenas noches, que descanses -dijo Julián.

-Gracias, igualmente.

Me fui hacia las escaleras para irme a la habitación, realmente estaba cansado, y este día fue muy cansado, con lo de esta mañana, la sesión, la pelea y la explicación; uff, fueron muchas cosas, pero por suerte mi lado de la cama estaba totalmente tendido para mi, pero lamentablemente yo tenía que cambiarle la ropa a Manu, lo dejé tal cual como se duerme, con un short y topless. Después me cambié,  Me puse un short y una camiseta, la verdad se me hace muy incómodo dormir sin camiseta, lo hacía solamente cuando hace mucho calor, pero este no era el caso, ya que había aire acondicionado.

Me acosté y me quedé mirando a Manu, yo jugaba con su nariz y labios, más con lo último. Hasta que por fín, caí rendido.

...

...

...

Me desperté y eran las nueve de la mañana, Manu seguía dormido. Mejor así,  el día anterior fue muy agobiante tan para él como para mí.

Me levanté, me lavé la cara y m de dirigí a la cocina.

Ahí solamente estaba Josemy, el cual me recibió con una sonrisa fraternal y me indicó con su dedo que no comida ya estaba sobre el comedor, eran tortitas y jugo de melocotón. Me senté y me aproximé a tomar el primer bocado.

-¿Qué tal dormiste, Fer? -me pregunta.

-Rendido, ayer fue un día muy agobiado, con lo de la pelea, la sesión de fotos, uff...

-Entiendo, ¿y Manu?

-Dormido, él ha de estar más cansado que yo, jaja.

-Sí... Oye, ¿que tal si... para dejar a Manu pensar y que esté solo... pasas el día conmigo?, ya que hoy lo tengo libre.

-Me parece bien, déjame que me terminé esto, me baño, me lavo los dientes, me arreglo y nos vamos.

-Venga.

Comí y en seguida me dirigí a arreglarme. Me bañé, me cepillé, me arregle con unos spray on skinny, una camiseta roja oscura y mis Vans old school. Ya listo bajé y Josemy ya me esperaba en la entrada para irnos.

Me subí en el coche y Josemy me dijo que primero iríamos hacia el Palacio Real.

La verdad era un lugar muy bonito y lleno a cultura Ibérica, muchas cosas victorianas y todo eso.

Después fuimos a lugares como la Catedral de la Almudena, el Templo de Debod, el Círculo de Bellas Artes, etc., pude sacar y sacarme muchas fotos con mi cámara, las cuales quedaron muy bien, ya que la posición y el resplandor del sol ayudaban mucho.

A las 17:00 ya estábamos en casa. Le agradecí a Josemy por el gran día que me había dado.

Subí las escaleras hasta la habitación, tenía llave, pero por suerte Manu me había dado una copia, abrí la puerta y lo que vieron mis ojos no fue nada gratificante, mi corazón se estaba dividiendo en tiritas, mi autoestima estaba por los suelos.

Ahí, en la cama donde Manu y yo nos besamos una y mil veces, donde dormiamos como una pareja, donde nos contábamos las cosas más íntimas de los dos; pues en esa cama estaban François y Manuel, sin camisa, besandose de una forma muy romántica, suave y sigilosamente.

-¿Ma... Manuel? -dije entre lágrimas.