He considerado que mi vida debe dar un giro total.
Así que me he mirado al espejo y he dicho: Ahora es el momento.
Si aún sigo aquí, es porque el destino me deparará algo,
solo depende de mí que sea un futuro incierto y peligroso, o seguro y esperanzador.
He hecho mis maletas y me embarqué rumbo al horizonte.
No tengo ni mapa ni brújula, es cierto, pero no me hace falta. Solo con mis ganas de vivir el camino se construye por sí solo.
Creo que mi decisión es digna de admirar porque no todas conseguimos escapar de las garras del pasado y de esa persona que nos tiene retenida de por vida.
Hoy he decidido dar un portazo y encerrar en un cuarto oscuro todo lo sufrido,
hoy he vuelto a ver la luz del sol, sintiendo en mi piel el aire y saboreando la libertad que yo misma he buscado.
Hoy he vuelto a nacer después de la agonía que he pasado.
Hoy he conseguido cumplir mi objetivo, mi propósito.
Hoy nada me aflige y a nada le temo.
Porque hoy le he dicho adiós a la persona que me ha hecho daño,
porque hoy vuelvo de nuevo a ser yo.
En realidad, hay cosas que no voy a olvidar como tus ojos de soledad la tarde que los hice llorar.
Escucho voces dentro de mi casa, a veces pienso que es tu fantasma.
Tus amenazas,
mis escapadas,
retrato de mi clandestinidad.
Te fuiste no hago más que despedirte inventándome un presente para sentir que estoy haciendo algo por mi construyo sobre arenas movedizas.