Hablan de adicciones, de alcohol, de heroína ¿qué es la heroína comparada a ti?.
Hablan de tormentas, huracanes devastadores que se lo llevan todo a su paso.
Tu eres mi tormenta, y yo, amante de la tormenta.
Mientras tanto, aquí estoy yo, reparándome.
Tú me enseñaste a querer, a perdonar, a confiar y a ser paciente.
La vida no nos mantiene a los dos sobre el mismo camino.
Es nuestra elección,
la de no olvidar,
la de seguir juntos,
al menos por ahora.
No me preguntes el por qué, supongo que si te lo pregunto a ti tampoco sabrás qué decir.
Hay mucha gente que me dice que necesitamos olvidarnos el uno del otro.
Me intentan abrir los ojos para que vea una realidad que ya veo.
Pero como tantas veces me has dicho: te quiero aquí, conmigo; y no te vayas, esta noche no.
No porque no pueda estar sin ti, sino porque no quiero, por ahora no.
Así que créeme, si quisiera olvidarte, lo haría. Pero no quiero.
Probablemente nunca la leas, y si la leyeras jamás te reconocería que la escribí para ti,
Pero yo me quedo más tranquila y así puedo poner un punto y aparte en este capítulo de mi vida que tanto daño me ha acabado haciendo,
Pasar página y empezar uno nuevo, con fuerzas.
Quería decirte que te he echado mucho de menos,
Que me hubiera encantado que nuestra historia no hubiera acabado nunca.
Me hubiera encantado poder estar escribiendo una carta para decirte cuanto te quiero y no cuanto te he querido.