La técnica de Kim JongIn ❀ KaiSoo

Parte 1: Chico bonito.

[ ☆ ☆ ⚠️ ☆ ☆ ]

Advertencias:

[☆] Esta fue mi segunda historia larga, es en su mayor parte comedia, por lo que espero no se la tomen tan a pecho. Aunque ciertamente lo que me parecía gracioso hace cuatro o cinco años ya no me lo parezca. Es triste tener que poner este tipo de advertencias.

[☆] Comentarios mal intencionados serán borrados.  Esta historia es ficción, así que no nos interesa la vida privada de JongDae en específico, por favor ahórrate esa clase de comentarios y evítame la molestia de borrarlos/silenciar. Si no te sientes cómoda(o) con la historia, puedes dejar de leer en cualquier momento.

[☆] Esta historia contiene mexicanismos/regionalismos en las expresiones de los personajes.

[☆] Estaré haciendo correcciones de ortografía principalmente. El estilo y párrafos completos los dejaré como tal, ya que siempre me ha gustado mantener la evolución de mis escritos. Aunque mi percepción del manejo de los personajes haya cambiado, intentaré no meter demasiada mano en ello. Pero sí eliminaré referencias hacia los chicos que por estereotipos viejos solía hacer cuando comencé a escribir.

[☆] Estaré re subiendo los capítulos conforme tenga tiempo de corregirlos ya que son bastante largos, al menos para mí.

Una vez aclarados esos puntos, si continúas leyendo, espero que disfrutes la historia y la lectura.

[ ☆  ☆  ☆ ]

Kim JongIn era un mal estudiante.

Pese a que su madre siempre le había repetido un millón de veces que no tenía absolutamente nada más que hacer, a JongIn le iba mal en varias materias y no precisamente porque no les entendiera, si no que prefería hacer el tonto con sus amigos en lugar de entregar las tareas, mucho menos hacerlas.

Toda su vida había vivido en aquel lugar, y sus recuerdos siempre habían sido gratos. JongIn es un chico bastante sociable y carismático, que siempre encontraba el momento preciso para hablar con los demás.

Pero también entendía cómo es que se movía el mundo y que no todo lo que veía era lo que realmente era. Es por eso que tenía tan pocos amigos, verdaderos amigos de esos que podía contar con los dedos de su mano.

《Y te sobran》 Solía decir su padre, siempre que se ponía a filosofar con él en el comedor, después de una buena comida.

La familia de JongIn no era pobre, tampoco es que tuvieran dinero para desparramar, pero por suerte siempre les había alcanzado lo suficiente para que les sobrara para divertirse. Es por eso que no había tenido la oportunidad de trabajar ni a medio tiempo, como sus amigos, a quienes su señora madre siempre se refería cuando le daba sus sermones a la hora de la firma de calificaciones.