Tardes

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TARDES

Caí en cuenta de que mis tardes te las dedico solo a ti, física y mentalmente, busco y rebusco las excusas, los momentos y los lugares para estar a tu lado.

Me siento tan llena de dicha, solamente cuando disfruto tu aroma y de tu tacto, perdí la cuenta de cuántas de mis tardes fueron solamente para ti y creo que apenas si las recuerdo, pues el clímax de tu amor me borra la memoria y me convierte día a día, o mejor dicho, tarde a tarde en una página en blanco donde tú puedes escribir lo que quieras.

Todas aquellas tardes limitadas en las que nos vemos... Todas esas tardes que anhelo que sean noches... donde ansío que en lugar de madera, mármol y cemento, sean colchas, almohadas y lechos... Cuando ruego que sean la intimidad de una recamara tibia la que nos mire y no un gélido cuarto iluminado por curiosos sol que nos marca el tiempo que no quiero que acabe.

Te he escrito demasiado... Te he soñado muchísimo y te he amado infinitamente y con todas mis fuerzas... Parece una rutina pero no lo es... llega una tarde libidinosa, me ordenas abrir la puerta... Te obedezco, entramos y dentro solo el sol y los muros conocen lo que ocurre dentro del lujurioso placer de tenernos.

Creo que lo que ocurre y acontece es inesperado y nuevo cada día... la rutina de la puerta es la misma, y la de salida también... pero dentro de ese cuarto... dentro de ese frío lugar... Solo tú y yo sabemos lo mucho que podemos llegar a gozar mi amor...

Es una rutina... Pero no lo es...

Mis tardes son para ti... porque así las he decretado... Así quiero que sean... Como esa hace muy poco ¿Te acuerdas? Esa en la que los minutos pasaron tan rápido pero tan lento que ni lo notamos... Esa mima en la que apenas podían callar mis gritos y mis gemidos... Esa tarde tan mágica en la que transformamos los helados planos de mármol en ardientes planos de placer... que pecaron por mirar con ojos curiosos y atentos NUESTROS pecaminosos deseos... Esa lengua viperina, esas manos traviesas... esa respiración temblorosa y esos puntos de placer evidente... Solo refuerzan mi deseo desenfrenado e impulsan las ganas de tenerte...

Un segundo... espera... tengo otra escena de memoria en la cabeza ahora... lo tengo muy claro... casi nítido... casi parece que lo vivo de nuevo, tu boca... recorriendo mi cuello. Mi pecho con mal disimulado descontrol choca contra el tuyo, siento tu peso sobre mi delicado cuerpo... tu boca llena de delicias me embriaga de sudor y de deleite.

La violencia y la rapidez de los movimientos contra la humedad de mi ser fueron cada vez más deliciosos e intensos... Estaba tan enamorada me encantabas... Aun lo haces y quiero entregarte mis tardes, mis días... quiero entregarte la vida entera... Solo deseo ser para ti y que tú seas únicamente para ti... Te amo demasiado mi cielo... Te espero pronto esta tarde...

JakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora