Tortuoso engaño

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¿¡Eso!? ¿¡Eso qué!?

-¡Madison!

-¿Qué?

-¿Qué es esto? - su dedo frío apunta en mi nuca y siento una punzada de dolor.

-¿Cómo lo voy a ver si no tengo ojos en la espalda? - suspiro con pesadez y me bajo de él. Me pongo frente al espejo y giro mi cuerpo.

¡Oh... No! ¿Qué mierda hice anoche? ¿En qué carajos estaba pensando? Bueno, lógicamente en nada pero... ¡Mierda y más mierda!

Llevo las manos para taparme la boca porque tengo la mandíbula más que abierta de lo sorprendida que quedé.

-¿Y? - pregunta tapándose con la fina sábana hasta el cuello. Me contemplo nuevamente y ¿qué le digo? ¿Que anoche me emborraché y me drogué y no sé quién carajos es el tatuador?

-No sé... - froto con mucho cuidado el lugar y siento el relieve de la piel y apenas el color rojizo que se está yendo. Duele pero muy poco.

-¿Cómo no vas a saber?

-No sé, Samuel. Calmáte porque estoy histérica igual que vos con esto - no, no es un argumento taan creíble pero sí estoy alterada. ¿Qué fue lo que pasó anoche?

-Ya empezás a parecerte a mis primos - gruñe y coloca las manos detrás de la cabeza mientras mira el techo.

¡Que hombre tan... Desquiciante, por no decir otra cosa!

-¿Y eso qué tiene de malo?

-¿Vos viste cómo están de tatuados? Eso es un verdadero asco - puedo visualizar como frunce la boca - y vos seguro, vas por el mismo camino a convertirte en eso...

-¿Qué? ¿Estás juzgando por la apariencia física? - revoleo los ojos y arqueo una ceja - es increíble que seas un tipo tan moderno con un pensamiento tan retrógrado.

Sé que doy en el clavo de la situación cuando sus ojos me atraviesan. Pero es verdad, es horrible ver cómo personas como lo es Sam juzgue a alguien por su apariencia... Uno no sabe si mañana ese "verdadero asco" no es el que te salva la vida o se convierte en una persona muy especial.

-¿De qué me estás tratando Samuel? ¿Por el mismo camino? Tus primos son unas personas geniales, más allá de los tatuajes o no. Fabrizio hasta es un papá muy bueno.

-¿Tantos los conoces para saber eso?

No contesto porque le estaría dando a entender que los conozco personalmente a los dos cuando él ni ésta enterado de eso. Más a Kaden que Fabrizio pero, así y todo, no puedo decir que son personas despreciables ni nada parecido. Al contrario.

Admiro una vez más el tatuaje impreso en mi piel. Realmente es precioso y las líneas son muy perfectas... Ebria y todo, no hice una mala elección.

Escribo un whatsapp a Camila de que voy a estar en la casa a la medianoche y abro la canilla de la ducha para darme un baño.

-¿A dónde te vas? - indaga Sam cuando salgo con la toalla enrollada al cuerpo y recogiendo mi pelo hacia un costado.

-A ver a Camila.

-¿Vos me estás engañando?

-¿Qué? - mis labios se convierten en una fina línea y lo observo con desdén. Tiene el celular en la mano y está sentado sobre la cama mirándome frío.

Me gustaría saber de dónde saca tantas preguntas estúpidas y conclusiones idiotas. Hace un año, le hubiera contestado con un certero sí y se llevaría la peor parte en haber sabido que era con su primo. Pero la verdad es que ahora no me llama nadie la atención como volver a hacerlo, no es que quiera engañarlo. Simplemente es que creo que Kaden se resumía a todo lo que yo necesita y deseaba en el momento. Ni más ni menos ni otra persona... Sin embargo, esa época concluyó y me destrozó a tal punto de volverme este horror de persona.

Kaden era la anestesia a mi vida. Con un simple roce o una palabra ya sabía poner mi mundo al revés y hacerme olvidar por completo hasta mi nombre. Sí, ese era Kaden. El polo demasiado opuesto a lo que elegí por esposo... De solo haberlo conocido un poco antes que a Sam.

-No - me enfundo en mi ropa interior y un ligero vestido - dejá de decir idioteces.

***

De camino a casa de Camila, mi mente se mantiene tan ocupada en Kaden que ni siquiera me percato de estar tocando el timbre.

-¿Qué pasó? - pregunta apenas abre la puerta y hago una mueca.

-Quisiera saber lo mismo, Cami. ¿Qué pasó anoche?

Dejo mi bolso encima de una silla y me doy vuelta para que vea mi espalda. Puedo contemplar de soslayo su expresión de confusión.

-¿Por qué te hiciste eso?

-No estaría acá si supiera, Cami - lanzo un bufido y me llevo a la boca una porción de pizza que está sobre la mesa - ¿Bex tatúa?

-Mmm... Nop. Pero Max sí - frunce sus labios como pensando - pero es raro porque no tenía la máquina acá ni nada. ¿Cómo se lo pagaste?

-Te estoy diciendo que no tengo ni puta idea - resoplo ya harta del tema y desbloqueo el celular de mi amiga. Busco sus contactos y encuentro a Max.

No lo pienso dos veces y doy al botón de llamada.

-¿Camila?

-No. Habla la amiga de ella... ¿Por qué tengo tatuados los símbolos de Harley Quinn?

N.A.: hola n.n/
¿Pueden creer que Madison se tatuó? ¿Alguien cree saber por qué los triángulitos de una villana? :3
Otra cosa... ¿Alguno quiere grupo de whastapp o fb? Avisen y si realmente tienen ganas, vemos cómo nos organizamos C: