Tengo un amante

Prologo

-No es posible que esto se salga de control de esta manera, quien convierte una noche de diversión en un caos – exclamó furiosa una chica rubia, que llevaba un peinado singular de dos coletas, similar a unos bombones, al  tiempo que  entraba por una enorme puerta blanca de madera y cerrándola tras de ella sin percatarse de que afuera había caído una persona al recibir el impacto con la puerta.

El lugar era una lujosa habitación de hotel apresuró el paso al bar que incluía su propia suite. Tomó una copa de cristal y de tomar escogió una botella de bourbon, cuando estaba por servirse entro gritando  a la habitación la persona que había caído por el portazo que recibió en la cara.

–Pero qué pasa contigo serena, la puerta y mi nariz no tenemos la culpa de lo que te pasa!- . Grito otra chica rubia con un enorme moño rojo en media coleta y agarrando su nariz que ya comenzaba a sangrar.

-Por dios mina discúlpame olvide por cómpleto que venias detrás, espera-. Tomo una bolsa de hielos y se los pasó a su herida amiga y regreso a servirse esa tan anhelada copa, realmente la necesitaba pues estaba por darle un ataque de nervios.

Primero dio un sorbo pequeño, una vez que el liquido raspo su garganta y ella se acostumbro al sabor, le dio un segundo sorbo más largo que el primero, y mucho más largo para su gusto y el de mina que la observaba con cara de dolor pues tenía la bolsa de hielo sobre su nariz.

– Serena si piensas embriagarte y después de golpearme con la puerta mínimo deberías ofrecerme un trago y poder embriagarnos juntas- dijo mina con su característica alegría y agregó – Además podrías contarme que fue lo que pasó, solo recibí una llamada de seiya donde me decía que me ibas a necesitar más que nunca, sabes se escuchaba muy preocupado, aún siguen los problemas entre ustedes? Porque para serte sincera no creo que este tan mal como me cuentas quiero decir si se preocupa por ti es porque aún le importas- y de pronto recibió un cojín en su cara lo que la hizo callar – Mina!  quieres callarte- le imploro serena con una sonrisa que no llegó a sus ojos – si le pararas a tu parloteo, podría contare que fue lo que pasó, espera, dices que seiya te marco? No puede ser estoy perdida-.

-Tranquila serena que puede ser tan malo, todo tiene arreglo- dijo mina para hacer sentir mejor a su amiga.

Serena volvió a servirse un trago,le pasó a mina el de ella, se sentó lentamente en el sillón más cercano a ella y antes de hablar volvió a darle un largo trago a su copa, suspiro y entonces muy seriamente; algo extraño en serena miro a mina, cerró lo ojos y de sus labios salieron las tres palabras más difíciles de pronunciar para ella, tres palabras que jamas pensó decir y que le desgarraban el alma como si miles de cristales se enterraran en su corazón.

-Engañe a Seiya –. Mina escupió el trago que había tomado, por la boca, por la nariz y comenzó a toser y a golpease en el pecho, se había ahogado ante la confesión de su mejor amiga, estaba tan impactada no sabía si llorar o reír o golpearla... – perdón serena creo que escuche mal, esto debe de ser una broma verdad-.

De pronto un silencio invadió la habitación.

-Serena responde es una broma cierto? Tú no eres capaz por más mal que estén las cosas entre ustedes se aman, no renunciamos a todo, Tokio de cristal, por ti, por tu felicidad porque tú dijiste que era real -. El silencio seguía reinando en la habitación, mina se levanto hasta llegar frente a serena y la tomo de los hombros más fuerte de lo que le hubiera gustado.

–SERENA!!! responde -.

-NO- gritó a lo que mina soltó la respiración no supo en que momento estuvo conteniéndola pero sintió alivio y serena continuo – Mina no es broma, cómo podría jugar con algo así, en verdad pasó y me siento terrible, no sabes como me siento-.

Mina se sentó lentamente en el lugar mas cercano sin decir nada, no era quien para juzgar a su mejor amiga, sin embargo, le dolía lo que estaba pasando, ella mejor que nadie fue testigo de lo que serena lloraba en sus brazos primero por causa del futuro, por Rini, por sentir amor por una estrella, sin olvidar a las Outers y últimamente por su matrimonio, serena a sufrido tanto y no quería pensar en el dolor Seiya en estos momentos, definitivamente era demasiado para soportar.

El llanto de serena la saco de su estado de sus pensamientos solo podía escuchar a serena sollozar y decir cosas como que no quería hacerlo. No pudo hacer más que abrazarla como tantas veces lo hizo en el pasado y esperar a que se calmara. Pasaron alrededor de dos horas para que serena se calmara un poco y entonces tuvo el valor de hablar.

-Yo no quería que esto pasara pero al final no lo pude evitar y, supongo que este es mi castigo por renunciar a mi destino, ser infeliz por siempre... Ahora lo recuerdo, recuerdo cómo empezó mi sufrimiento, tú recuerdas cómo empezó todo Mina?-.

Ambas chicas se quedaron pensado y comenzaron a recordar cómo empezó todo... El día en que sus vidas cambiaron para siempre.