Jungkook vs. Minjae (VKOOK)

Tormenta

-Aún llueve -dijo MinJae entrando en la habitación mientras se secaba el pelo con una toalla- Toma, ponte esto.

Me ofreció ropa seca y se sentó a mi lado.

Habíamos llegado empapados a su casa y ya eran las seis y media pero la lluvia no disminuía. Al final, acepté la realidad que quizás tendría que dormir en la casa de MinJae.

Los dos nos quedamos en silencio mirando por la ventana. Se escuchaba la lluvia caer con fuerza y de vez en cuando la noche se iluminaba por los rayos.

Hacía un viento abrumador que removía peligrosamente las ramas de los árboles.

-No me gustaría estar allí a fuera -comenté.

-Ni a mí -se rió él, levantándose- Vamos, sécate que cogerás frío.

Me incorporé y seguí secándome con la toalla. Él se fue a preparar la cena para su hermano y yo me quedé en su cuarto cambiándome.

Me fijé que me había dado unos pantalones de chándal y una camiseta básica de manga corta. Después de vestirme, me puse mi sudadera encima.

-Que bien huele -dije nada más entrando por la cocina.

Me encontré con un MinJae con el delantal puesto. Me reí. Quizás se llevaría bien con Seokjin.

-¿Quieres que te ayude? -dije poniéndome otro delantal.

-No hace falta. Quería hacer algo sencillo.

-Va, déjame a mí los postres. Prepararé algo calentito para todos.

Él me sonrió.

-Gracias hyung.

Después de cocinar nos pusimos los tres a cenar.

-¡Hola! ¡Ya estamos aqui! -los padres de MinJae entraron por la puerta mojados hasta arriba.

Sacaron la cabeza por el comedor.

-Ah, hola Taehyung. ¿Atascado por la lluvia? -me saludó su padre alegremente.

Yo asentí y fui a saludarlos.

-Eres bienvenido a nuestra casa siempre que quieras. Puedes quedarte a dormir. No es recomendable salir a la calle por hoy.

-Gracias señora Kim -susurré bajito.

-Bueno entonces os las arregláis vosotros.

-¿No váis a cenar? -preguntó MinJae.

-No creo -dijo su madre cansada.

-Es que... Taehyung os ha preparado algo.

-¿Ah si? -respondió ella, sorprendida- Entonces me encantaría probarlo. Voy a cambiarme, enseguida bajamos.

-¡Cariño! -le escuchamos gritar en la planta de arriba.

MinJae y yo nos miramos cómplices.

-Muy bien. ¿Qué sorpresa nos ha preparado Taehyung?

Los sentamos en el sofá y les di la taza con chocolate caliente que había preparado.

-Oh -abrieron los ojos los dos- muchísimas gracias. Es justo lo que necesitamos con el frío que hace.

Yo les agradecí encantado mientras ellos se acurrucaban en el sofá.

-Venid vosotros también.

Nos sentamos los cinco, incluído el hermano pequeño, y pusimos una película mientras todos la íbamos comentando divertidos.

Los ojos se me fueron cerrando inconscientemente entre las suaves risas de esa cálida familia.