El ruido de su estómago lo obligó a abrir los ojos, los cuales cerró enceguecido en el momento en que la luz caía directamente en ellos. Kuroko sintió que algo lo agarraba con firmeza al moverse por lo que se forzó a abrir los ojos para observar qué era lo que lo rodeaba, entonces se dio cuenta de que él estaba ahí, Kagami, su novio.
En un principio estaba totalmente desubicado pues no entendía qué hacía Kagami durmiendo junto a él, sin embargo, al recordar lo que había pasado la noche anterior, la vergüenza invadió completamente su ser pues lo que creyó había sido un sueño, en realidad sucedió. Una vez asimilando lo sucedido, el chico se giró de nuevo para ver al pelirrojo dormir. Observó el atractivo rostro de su chico y pudo notar lo largo de sus pestañas e incluso apreció de cerca la forma tan peculiar de sus cejas así como también la forma de sus labios, los cuales estaban un poco separados pues parecía estar respirando por la boca. Luego de unos minutos Kuroko recargó la cabeza en su pecho para volver a dormir, o al menos tratar de dormir, no obstante una ligera molestia en la cadera se lo impedía, así que se sentó y el dolor vino cuando se puso de pie e intentó caminar.
Un chasquido seguido de un intenso dolor le robaron las palabras al peliceleste, por lo que simplemente cayó al suelo mientras intentaba controlar el dolor.
-¿Kuroko? ¡Kuroko! Oye, ¿qué te pasa? ¿Estás bien?... Geeh...
Kagami retrocedió un poco después de levantar a Kuroko y sentarlo en la cama pues el chico lo observaba con un odio sumamente palpable.
-KA-GA-MI-KUN~ ¿Qué mierda fue lo que me hiciste ayer?
-¿P-por qué estás tan...?
-¡¿Todavía preguntas?! ¡Deberé usar silla de ruedas el resto de mi vida!
-No exageres, eso no es posible... Creo que fui un poco rudo anoche...
-¿Eso crees?... Kagami-kun, fue un placer haberte conocido.
-Espera, creo que sé de alguien que puede ayudarnos...
Kagami tomó su celular pero como estaba sin batería después de dejarlo toda la noche con la lámpara encendida, decidió tomar el teléfono.
-¿Qué demonios quieres tan temprano?
-Sí, buenos días, dormí bien ¿Y tú?
-Si vas a ser una molestia igual que el enano absoluto desde tan temprano, mejor vete a la mierda y déjame dormir.
-No te desquites conmigo. ¿Qué hizo ahora?
-Vino a las cinco de la mañana arrastrando lo que parecía ser un cadáver dentro de una maldita maleta y entró a la habitación de Kouki haciendo todo el ruido posible. ¿Ya puedo ignorarte e irme a dormir?
-Espera, no te hablaba por eso, quería preguntarte algo. ¿Sabes...? Bueno... ¿Qué es lo más adecuado para eliminar el dolor de cadera?
-¿Eh?
-Verás, tengo un amigo que es muy cercano a mí y al parecer tiene mucho dolor de cadera y no sabe cómo... ¡Deja de reírte! ¿Qué es tan gracioso?
-Esa es la peor mentira del mundo, nunca has sabido mentir. ¿Crees que no noté que Kuroko no vino a dormir a la casa? Lo único que tienes que hacer es meterlo a una tina con agua tibia, luego debes darle un analgésico y sobarle las caderas. Procura hacer presión desde un extremo hacia el otro a la vez, como si trataras de aplastarlo. Debes hacerlo con fuerza para que truene. Estará mejor en unas horas así que debe descansar y en caso de que necesite caminar, deberás sujetarlo. En serio, tantas cosas que te he dicho y jamás aprendes...
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Yes, I Am.
Fiksi PenggemarLos humanos siempre han culpado al Diablo de las cosas que no pueden explicar, excusándose en que las aberraciones creadas por seres paganos deben eliminarse de la faz de la Tierra. Pero el Diablo no tiene nada que ver en la existencia de los doncel...