Nuestros sujetadores cuelgan del tejado, como si fueran adornos de navidad. Los rellenos de los sujetadores están tirados por el suelo. Muchas chicas se acercan a reirse de nuestras mini-tetas. Nos acercamos lentamente, mirando con horror a las chicas que se rien de nosotras.
Cogemos los rellenos del suelo y nos ponemos de puntillas para alcanzar los sujetadores, y una nota en la que pone.
¿Ladys rebeldes? Mejor Mini-tetas ¿no? Jajaja. Herd.
Han sido ellos, la ira se apodera de mi ser, hago una bola la nota y la tiro a su cabaña. Ellos salen en respuesta.
--¿Ya vieron la sorpresa?.-dice Peter.
--Pudrete Donson.-contesto.
--Claro, ahora lo haré agusto.-dice muy sonriente.-creo que ya lo vi todo.-ríe.
--Chicas, jamás pensé que eran relleno.-dice Dylan alzando sus manos.-nos sorprendieron.
--Oh, cállate Dylan.-le dice Mandy tirandole uno de los rellenos.
--¿Me lo das? Oh gracias. Es un recuerdo precioso.-dice dramatizando.-voy a llorar.-coloca una mano en su boca y se gira.
--Será mejor que os calleis.-advierte Summer.
--¿Y quién me lo va a impedir? ¿Tu? ¿Una lesbiana?.-dice Jacob.
--Mi p*** ****e.-suelta Summer con su típico vocabulario y empieza a tirar piedras.
--Se enfado.-dice Robert encogiendose de hombros.
-0-
Estamos en la cabaña, ésta noche hemos decidido no ir a la fogata. Camino de izquierda a derecha con mis brazos en la espalda, entrelazando mis dedos índices. Muerdo mi labio inferior y trato hacer llegar la inspiración a mi mente. Entonces recuerdo, aquella navidad. Tenía solo cinco años, mi familia para pasar el rato y divertirse un poco optaron por hacerme probar un limón, y me encanto. Soy una amante en secreto el limón. Como vieron que aguantaba el limón optaron por hacerme probar la guindilla, y ahí si que sufrí.
Recuerdo aquello como si fuera ayer, y no es un bonito recuerdo precisamente. Cuándo empieza a arder la lengua, las lágrimas se te saltan y ni siquiera eres consciente de ello, pero lo peor es cuándo llevas un rato con esto, que empieza a quemar toda tu cara e incluso estás caliente, y en mi excepción, me puse roja.
Creo que será una buena idea para vengarme de Peter Donson.
Una sonrisa burlona se dibuja en mi rostro. Mis amigas saben que se me ha ocurrido algo.
--¿Qué se te ha ocurrido loca?.-me mira Mandy divertida.
--Chicas, ¿dónde consigo guindillas picantes?.-alzo las cejas varias veces.
--Pues estás de suerte, las ponen en el comedor.-me informa Emily.
--¿Quién come guindillas?.-pregunto horrorizada.
No es que tenga nada en contra de las guindillas, pero creo que es un alimento que te hace sufrir demasiado.--Marta González, una chica que lleva aquí desde que estoy yo, y siempre come guindillas.-me responde Nicole.
--Dios, no tendrá garganta, ni lengua, ni nada.
--Hay gente que aguanta esas cosas.-se encoge de hombros Summer.
--Pues mañana cogeré algunas guindillas.-froto mis manos y levanto la parte izquierda de mi labio.
--Yo querida Pey, me vas a perdonar, pero voy a hacer mi propia venganza.-se enconge de hombros y dice Summer.
--Oh, de acuerdo. Suerte.-extiendo mi brazo y estrechamos las manos.
--¿Qué vas a hacer?.-pregunta dudosa Nicole.
--Solo colarme en los baños, cambiar la ropa suya por una de chicas y sacar algunas fotos.
--¿Y la ropa?.-pregunta Emily.
--Pues podemos quemarla ¿no?.
--Buena idea.-digo yo.
--Yo también voy a darle su merecido a Robert Jones.-dice Emily abriendo y cerrando unas tijeras que tiene en su mano derecha.
--¿Lo vas a matar?.-se altera un poco Mandy.
--¡No!.-todas soltamos un suspiro.-pero le va a doler más.
--¿Qué piensas hacer?.-ya si tengo demasiada intriga.
--Voy a cortarle las cuerdas a su guitarra.
--Vas cortar las cuerdas a ¿una guitarra?.-repito por si me he equivocado.
--Eso he dicho.-vale bien no estoy sorda eso queda claro.
--Emily, es una guitarra.-le dice Nicole.
--Pero esa guitarra para él es su amor propio. Está incluso firmada por David Bowie.
--¿¡David Bowie!?.-digo asombrada.-vas a destruir una obra de arte.
--Lo sé. Por eso lo voy a hacer.
--Te va a matar.-dice riendo Summer.
Mandy empieza a reír mientras mira la pantalla de su ordenador. Todas captamos su escandalosa risa y giramos nuestras cabezas hacia ella.
--¿Qué paso?.-digo.
--Oh, chicas, mirad la foto.
Una foto de Dylan Hayes aparece en mi campo de visión en cero coma dos segundos. Lo gracioso de la foto es que es el de pequeño y está vestido de princesa. Todas empezamos a reir por ello.
--¿Cómo...?.-pregunta Emily.
--Bueno, Mara es su hermana y a través de ella he conseguido a su madre, que por cierto es mi tocaya.
--¿La madre subió eso?.
--No, la tía. Y claro la etiqueto y amiga Facebook a partir de hoy es el mejor colega.
--¿Dónde la colgaste?.
--En la web de su campamento. Con claro nuestra marca y mis iniciales.
--¿Y tu Nicole? ¿Piensas hacer algo?.-se gira Summer para tenerla justo en frente.
--La verdad, no.
--Oh.-decimos decepcionadas.
--Prefiero reírme de todo lo que vais hacer.
--Bueno, no sé ustedes pero la cama me reclama.-dice Summer tirandose en su cama.
Mi móvil empieza a vibrar y seguido a esto empieza a sonar la canción Impossible. Saco el móvil de mi bolsillo y miro la pequeña y luminosa pantalla. El nombre Lucy Edwards, aparece en grande y debajo las opciones de colgar o descolgar.
Salgo fuera de la cabaña para poder hablar tranquila de no despertar a nadie. Me siento, apoyo mi espalda a las vallas y descuelgo el teléfono.
--¿Si?.-digo.
--Bonjour señorita Dallas.-la escucho hablar desde la otra línea.
--Buenas noches señorita Edwards.-ella suelta una risita y yo sonrío al escucharla.
--¿Y bien? ¿Qué era tan importante?.
--Verás.-me daba corte preguntar sobre que le paso.-dicen por aquí...
--Qué me paso algo ¿no?.-termina por mi.
--Si.
--Y quieres saber qué fue ¿no?.
--Por favor.-llevo días de intriga por saber que ocurrió.
--Okay, te contaré pero con una condición.
--¿Cuál?.
--No contarás esto a nadie.
--De acuerdo.
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Bakers VS. Owens ®|Terminada✔
Fiksi Remaja[HISTORIA COMPLETA] Una chica de 17 años llamada Peyton Dallas, está emocionada, porfin después de un año esperando va a ir al campamento, Camp Baker. Lo que no sabe, es lo que le espera allí. O más bien, los vecinos que les espera allí. Risas, tris...