Capítulo 16

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Antoine

Mía se había quedado dormida y la llevé a la habitación que me indicó Noa pues, en el salón, hacían mucho ruido.

Entré en la habitación y, al momento, me di cuenta de que era de Noa.
Había un póster mío en la pared.

Me hizo reír el pensar que me vería todas las noches antes de dormir pero

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Me hizo reír el pensar que me vería todas las noches antes de dormir pero... ¿para qué conformarse con un póster si podía tener al Antoine Griezmann real?

Tumbé a Mía en la cama y le puse unos cojines alrededor por si se movía. Bajé la persiana y, tras darle un beso en la frente y coger un walkie para llevar al salón, salí de allí.

Cerré la puerta con delicadeza y dejé el walkie en la mesa del salón. Me senté junto a Noa.

-He visto mi póster...

-Le dije a Gusi que no colocara mis cosas pero se empeñó en hacerlo.

Sonrió y sonreí. Acerqué mi brazo a la mesa y cogí mi vaso.

-¿Dónde dejaste a la pequeña?-preguntó Carrasco

-Durmiendo. Sois como una panda de monos ruidosos.

-Uy, Antoine el responsable Griezmann-dijo Vietto entre risas, lo que provocó que lo mirara mal

-Pobrecillo, se vuelve responsable por su hija y os metéis con él...-Noa me abrazó y yo les eché la lengua a los demás.

Pasamos la tarde entre risas, besos y locuras. Cuando nos dimos cuenta, eran las diez.

-Nosotros nos vamos-dijo Moyá mientras entrelazaba sus dedos con los de Puri-, la voy a invitar a cenar.

Se despidieron y se fueron. Los demás se fueron todos menos Saúl, Lucas, Koke, Carrasco, Luna, Amil, Isa y Cris.

-¿Os quedais a cenar? Podemos pedir unas pizzas, no me dio tiempo a hacer la compra.

-Vale.

Llamé a telepizza y pedí un par de pizzas (obviamente Antoine, no ibas a pedir galletas). Esperamos mientras veíamos la tele y hablábamos entre nosotros.

-¿No está haciendo un ruido extraño esto?-Koke sacó el walkie de debajo de su culo

-¿Cómo ha llegado ahí?-preguntó Noa mirando extrañada a Koke que se encogió de hombros

-Si hace ruido es, probablemente, que Mía se ha despertado.

Me levanté del sofá y caminé hacia la habitación de Noa. Allí, Mía se movía sobre la cama mientras comenzaba a llorar.

-Ven con papá pequeña...

La cogí en brazos y se calmó al momento. Le puse los zapatos y la llevé conmigo al salón.

-Diles hola Mía...

Mía movió su manita como si saludara.

-Ven con el tío Koke mi niña.

Koke me arrebató a Mía que le tiraba del pelo mientras él la hacía reír.

Me senté junto a Noa y sonó el timbre. Ella se levantó a abrir, era el repartidor.

Noa cogió las pizzas y le pagó. Se acercó a nosotros.

-Hora de cenar.

Pusimos la mesa y nos sentamos a comer.

-¿Tu hija no cena?-preguntó Carrasco que le hacía cosquillas a Mía

-Tengo el biberón por aquí...

Saqué el biberón de la bolsa de Mía y Noa lo calentó en el microondas un poco, antes de dárselo.

-¿Puedo dárselo yo?-preguntó Luna emocionada

Le tendi el biberón y ella cogió a Mía de los brazos de Carrasco para acomodarla en los suyos.

Era una imagen bonita, Saúl tenía su brazo tras Luna que, con su cabeza en el pecho de él, le daba el biberón a Mía.

-Mira Saúl-dijo Koke sonriendo-,os queda bien la niña

-Algún día tendremos muuchos bebés-dijo Saúl con los ojos iluminados

-Tres como mucho-replicó Luna sin apartar la vista de Mía

Nos echamos a reír.

Cuando acabó de darle el biberón, Amil la cogió y jugó con ella mientras comía un trozo de pizza.

-Es increíble que teniendo un padre tan feo haya salido una niña tan guapa-dijo Lucas mirándome

-Perdona pero yo soy un pivón.

-Claro que sí Grizi, claro que sí...

Noa se echó a reír y yo me crucé de brazos haciéndome el enfadado.

-Anda, ven aquí gruñón...

Me abrazó y besó cortamente mis labios.

Sonreí triunfante y el portátil de Noa, que estaba encendido encima de la mesa, comenzó a vibrar.

-Es Caro chicas.

Se acercaron a la mesa y Noa cogió la llamada.

-¡Hola Caro!-exclamaron todas

-Hola chicas, me he enterado de que Noa tiene piso nuevo y yo no puedo faltar en una fiesta... ¿Esa es Mía? ¡es adorable! Todo lo contrario que su padre.

-¡Eh! ¡Qué su padre está aquí!-dije sonriendo y saludando

-Yo te quiero Anto pero...

Nos echamos a reír, un rato más tarde Krane apareció en la pantalla.

-¡Krane! ¡hola!-exclamó Koke moviendo efusivamente las manos

-Hola chicos, ¿Qué tal les va? Me estoy adaptando bastante bien.

-Me echas de menos-dijo Saúl riendo

-Mucho -dijo Krane

Tras hablar con ellos un rato apagamos el ordenador. Miré el reloj, eran las doce.

-Nosotros nos vamos-dijo Koke levantándose

Los demás le imitaron y, tras despedirse, se fueron.

Mía estaba medio dormida en los brazos de Noa. Recogí la mesa pese a las protestas de Noa

-¿Podemos quedarnos a dormir?-pregunté-Ya es muy tarde y me da miedo coger el coche a esta hora con Mía.

-Sí. De hecho, no me gustaría dormir sola aquí. No estoy acostumbrada aún.

Sonreí.

-Mia puede dormir en la habitación pequeña, en la cama. Dormirá mejor ahí que en el carrito.

Asentí, sabía por donde iban los tiros. Yo dormiría con ella.

Dejé a Mía con delicadeza en la cama y puse los cojines alrededor tras dejar el walkie a su lado.

Arrimé su puerta y salí, Noa había llevado unas sábanas al sofá y las estaba colocando.

-Tú dormirás aqui-dijo mientras acababa de colocar la sábana

-¿En el sofá?-pregunté sorprendido

-Ya tocaste demasiado esta tarde como para dormir conmigo, ¿no crees?

La vi sonreír, me acerqué y la abracé por la cintura. Ella rodeó mi cuello con sus brazos.

-¿Segura de que no quieres que duerma contigo?

Sonrió pícara y se acercó a mis labios. Cuando la iba a besar se escurrió de entre mis brazos y se acercó a la puerta de su habitación.

-Hasta mañana, Antoine Griezmann.

Por Verte Sonreír #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora