Bluie

Catorce.

Esta vez no se encuentra la sonrisa en mi rostro cuando entro al restaurante. Me limito a saludar con un pequeño movimiento de cabeza a las personas que encuentro en el camino hacia mi oficina. 

—Buenos días—la diviso sentada detrás de mi escritorio cuando entro.

—¿Qué haces aquí?—suelto bruscamente—. ¿Vienes a recordarme lo idiota que soy?

—Es suficiente con que lo sepas—contesta, y una sonrisa falsa se hace presente en sus labios.

—No contestaste mi pregunta. 

Su mirada me escanea de arriba a abajo, y de vuelta, hasta que se detiene en mis ojos y suelta un suspiro antes de ponerse de pie. 

—Solo quería decirte en persona que ya tenemos el equipo de Luck's—camina hacia mí y se detiene a mi lado sin llegar a tocarme por completo—. El paquete completo. 

Volteo a mirarla con el ceño fruncido. 

—No es cierto, el día ni siquiera ha empezado—digo intentando de sonar calmado. 

Ese era mi gran golpe, el equipo de Luck's es el más eficiente de todos. Los mejores camareros de la ciudad, incluyendo la limpieza. Es imposible que lo consiguiera.

—No eras el único con una carta bajo la manga—susurra antes de salir. 

Camino hacia mi escritorio mientras paso mis manos por mi rostro con frustración. Al tomar asiento me quedo mirando hacia la puerta fijamente. Segundos después una pequeña luz se enciende en mi cabeza. Tomo la lista y empiezo a leer detalladamente cada nombre y ocupación. 

Sonrío cuando encuentro lo que estaba buscando y empiezo a hacer un par de llamadas. 

—Esto no se quedará así... 

*** 

—Nos encantaría contar con ustedes—digo antes de sonreír de lado, aunque intento no reír cuando veo escapar un suspiro de sus labios—. Sus decoraciones nos han dejado sin aliento desde el momento en que las vimos. 

—Es usted encantador—la señora Miller sonríe y puedo ver el color rojizo aparecer sobre sus mejillas. 

—Su trabajo es impecable, y sería un honor—termino por decir. 

Se muerde el labio y parece pensarlo. Al rato se pone de pie y hago lo mismo, sonrío cuando alza su mano y la estrecho. 

—Cuando tengas todo listo, puedes enviarme el contrato—dice sin soltar mi mano.

Sonrío y mantengo la compostura, aunque debo admitir que una señora de alta edad, por no decir anciana, coquetee contigo es incómodo. 

—Lo tendrá sobre su escritorio mañana a primera hora—contesto soltando su mano y salgo de su local. 

El sonido de mi móvil me detiene cuando estoy a punto de encender el auto. 

—¿Sí?

—Disculpe, ¿estoy hablando con Derek... Maxwell?—pregunta una voz chillona.

—El mismo—contesto frunciendo el ceño. 

—Oh, hola, señor Maxwell. Le habla Carol, la asistente del señor Greg. Queríamos saber si nuestra reunión seguía en pie. 

—Claro, a las 3 en el Houston, ¿no es así? 

—Sí, sí. Pues, nos vemos luego. 

—Cuente con ello—respondo cuando cuelga. 

Suelto un suspiro. Debo volver al restaurante y hacerle saber a Elena y a Ghina que había conseguido la decoradora de eventos y parte de la cocina de Exquisite. 

Al aparcar veo que azul sale de un auto con una sonrisa y, antes de entrar, me atrapa mirándola. Salgo del auto cuando ella se dispone a subir las escaleras e intento no acercarme más de lo debido. Ambos vamos hacia la oficina de nuestras jefas y entrecierra sus ojos cuando me mira fijamente sin detenerse. 

—Adelante—dice Ghina desde el otro lado de la puerta, y sonríe al vernos entrar. 

 —¿Noticias nuevas?—cuestiona Elena. 

Miro a Alee esperando a que hable primero, pero no lo hace. 

—La mayor parte de la cocina de Exquisite es nuetra—empiezo a decir después de carraspear—. Y también conseguí a Miller's Deco. Está dispuesta a cambiar la decoración del restaurante cada vez que haya un evento, además de darnos un reembolso si no quedamos contentos con su trabajo, aunque asegura que ese no sera el caso.

La sonrisa de Elena se hace presente antes de soltar un grito, sin embargo, Ghina se muestra menos afectiva aunque sé que le alivia saber que ya nos falta poco para tener todo. 

—El equipo de Luck's empieza el lunes—suelta Alee, y Ghina alza sus cejas.

—Esto es increible—habla Elena con asombro—solo nos falta el pianista y el dj. 

—Tal vez el pianista no—comento y todas las miradas caen sobre mi—Ésta tarde me reuniré con Greg Allen en el Houston para arreglar unas cosas antes de firmar el contrato. 

Esta vez el grito sale de la garganta de Ghina, y me sorprende. La chica a mi lado suelta un suspiro con cierto disgusto. 

Luego de un rato coordinando un par de cosas, salgo de la oficina para terminar el contrato de la señora Miller y poder enviarlo con anticipación.

Escucho unos tacones detrás de mí, respiro hondo antes de voltear y encontrarla con los brazos cruzados. 

—¿Pasa algo?—pregunto antes de pasar mi lengua por mi labio inferior. 

—Así que matando tres pájaros de un solo tiro, ¿huh?—alza su ceja izquierda y se me queda mirando fijamente. 

—Solo hago mi trabajo—contesto antes de voltearme.

Su mano toca la mía para intentar detenerme, su tacto me hace estremecer y, al girar el rostro, puedo notar que ella también lo ha sentido. Retira su mano rápidamente y traga en seco antes de mirarme a los ojos.

—Es-está bien—parece algo artudida cuando se gira y empieza a alejarse.

Miro mi mano con el ceño fruncido y niego con la cabeza antes de seguir con el contrato. 

N/A:

¿Verdad que la relación de estos dos está bipolar? Un día se hablan, otro no, en la mitad de uno se odian y en la otra mitad están diferentes...

Espero que les guste. 

Nos vemos en la próxima.

Te quiere, Endless.