Capitulo 10:

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— Por favor, solo acompáñame a casa. — dije por sexta vez.

Luke rodó los ojos y bufó.

— No pararas hasta lograr que diga que si ¿Verdad?. — dijo mirándome.

— Exacto, que comes que adivinas. — dije riendo y él me acercó mucho más a su pecho para luego darme un tierno beso en la cabeza.

Nos encontrábamos caminando solos por las calles que daban directo a mi casa. Luke tenia su brazo sobre mis hombros y yo rodeaba con mi brazo derecho su espalda.

— Lo he pasado increíble. — dije mirándolo y él también a mi.

— Sabia que te divertirias. — sonrió sin separar sus labios y sus ojos se achicaron mucho más.

— Ya quiero llegar a casa y contarle a mi mamá todo lo que vi. — dije emocionada y sentí como Luke se tenso a mi lado.

Ambos nos quedamos en silencio, disfrutando de aquella caminata tan tranquila. El cielo estaba completamente estrellado y se veía hermoso. Me sentía bien al estar así con Luke, me alegraba ver como disfrutaba al igual que yo de mi presencia y yo de la suya. Pero recorde lo que escuche en el pasillo, aquella conversación de Calum con Luke.

— Luke...— él me miró esperando que hablara. — ¿Te gusta alguien?. — dije sin pensar y me sentí estúpida al momento. — Digo... yo... mmm... escuché lo que le dijiste a Calum y...Dios, soy patética...olvida lo que dije. — el rió y yo me sonroje.

— Tranquila, y no, no me gusta nadie. — dijo lentamente y sentí como el frío volvía sobre mis hombros, Luke había quitado su brazo.

— Oh...bueno...— dije sonriendo forzosamente y sentí como mi estómago se estrujaba y mi corazón de comprimia un poco.

— ¿Y tu?. — me miró con aquellos ojos tan cálidos como siempre, como sí no notara que lo que había dicho hace segundos atrás me haya dolido un poco.

— Creo que no. — dejé caer mi cabello como una especie de cortina para tapar mi rostro. Luke solo asintió y guardo sus manos en los bolsillos, como siempre lo hacía.

Mi noche había estado de maravilla y yo por hacer aquella estúpida pregunta, me la eché a perder sola. Me sentía un poco tonta al pensar que...bueno...yo podría llegar a gustarle a Luke, pero vamos, él no se fijaría en alguien como yo. Solo me ve como una simple amiga, o algo asi. Hay miles de chicas mil veces más hermosas, y claro, luego estoy yo, en una esquina con poca luz y mal olor. Sí, algo así me imaginaba. Además, como ya había dicho, él era condenadamente perfecto para semejante cosa (yo).

Al llegar a mi casa, ambos nos quedamos parados sin decir nada. Miré de reojo a Luke y decidí romper aquel incomodo silencio.

— ¿Q-quieres pasar?. — señalé mi casa un poco incomoda.

— No creo, tengo que irme...

— ¿Seguro?. — pregunté y el asintió. — Bien, nos vemos...mañana o eso creo. — lo decía por que ya no sabia que esperar de Luke, un dia iba y al otro no, luego desaparecía por días, y después aparecía como si nada.

Él me miró por uno segundos, que para mí, fueron como minutos. Tenia la necesidad de acercarme a él y besar...aquellos labios que se veían tan suaves. No me habia dado cuenta de esto y de lo que experimentaba cuando estaba junto a él. ¡Y tenia que parar de pensar en esas cosas!.

Luke trago saliva sonoramente y me miró algo triste. Se acercó un poco a mi y beso mi mejilla dejando sus labios bastante rato ahí, sin despegarlos ni un solo centímetro. Tenia los ojos cerrados, como sí le doliera hacer todo esto y yo por otro lado disfrutaba de ese contacto tan mínimo que teníamos. Y sabia que esto no estaba bien, por que hacía crecer algo inexplicable en mi interior.

LukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora