Capitulo 21:

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El lugar estaba totalmente iluminado por unas farolas enterradas en el suelo, habían luces enroscadas en los troncos de los árboles haciendo que estos se vieran hermosos; una manta estaba tendida en el suelo y Luke estaba parado sobre ella con los brazos extendidos, haciendo que admirara su maravilloso trabajo. La vista era increíble, estábamos al borde de un lago que hay cerca del pueblo, el cual solo de iluminaba por el reflejo de la luna en el agua, y el viento movía esta dando un toque de tranquilidad al lugar.

— Oh por dios. — susurré y tapé mi boca con mis manos, sin poder digerir todo esto. — Luke...

— ¿Te gusta?.— sonrió sin despegar us labios y sus ojos se achicaron.

— Me encanta. — caminé más que rápido hacia él y me lancé a sus brazos. — Todo es hermoso Luke, aún no puedo creer que hayas echo todo esto para mi. — él acarició mi mejilla y dio un beso en mis labios.

— Todo por ti, nena. — me abrazó.

— ¿Por que tienes que ser tan romántico? Eres tan perfecto Luke...

— No lo soy cariño, pero puedo hacer el intento por ti. — maldito romántico, ya basta, mi cara explotará. — Y lo mejor de todo, es que usted Señorita Anna Lerman es totalmente privilegiada de pasar una romántica noche con la futura estrella de rock, Luke Hemmings, y un mini concierto especial solo para ti. — señaló una guitarra apoyada en el tronco de un árbol. — Y que dices ¿Aceptas pasar una velada romantica bajo las estrellas, solo conmigo?. — me abrazó por la cintura y su voz sonó tan sexy al decir eso. Sonrei y besé sus labios.

— ¿Eso responde a su pregunta Señor Hemmings?. — susurré y el asintió.

Luke se sentó en la manta y tomó mi mano para que hiciera lo mismo. Me senté a su lado y él se giró para tomar una canasta y ponerla en medio de nosotros.

— Aquí hay mucha comida y traje vino. No se si te gusta, pero si no es así, traje jugo de uva, así simulamos beber vino. — habló eufórico sacando algunas cosas de la canasta. — Y hay unos sándwiches echos por mí. — alcé una ceja y tomé uno de estos, los cuales estaban envueltos en papel aluminio.

— ¿En serio? No sabia que trabajabas en Chicken Delivery. — reí mostrándole un pequeño logo del local de comida rápida muy famoso en el pueblo. Las mejillas de Luke se tiñeron de rojo y yo la acaricie. — Luke, no tienes que hacer esto para impresionarme, no importa que no sepas cocinar, o algo asi, te quiero tal como eres. — bese tiernamente sus labios.

— Lo siento, es que quiero que todo sea perfecto y no quiero que te desilusiones de mi. — bajó el rostro.

— Eso jamás, bebé. — murmuré y abrí los ojos al notar lo que había dicho. Lo había llamado bebé, como suelen llamarse los novios.

— ¿Bebé?. — Luke apoyo su codo en la manta y flexiono su pierna derecha.

— Y-yo...— antes de que terminará de hablar, Luke se acerco a mi y comenzó a besarme desesperadamente, sus labios me volvían loca, eran como una droga que me hacia volar lejos y tocar las nubes. Si, cursi, pero dios…era increíble lo que él provocaba en mi con tan solo una caricia. Lentamente fuimos recostandonos hacia atrás y Luke se posicionó sobre mí. Jamás habíamos llegado hasta este punto, tenia que confesar que sentía un poco de miedo llegar a algo más allá de un beso. Luke bajó su mano por el contorno de mi cuerpo hasta llegar al borde de mi playera, sus dedos entraron despacio bajo esta y acaricio mi piel, sus dedos estaban fríos y mi piel se puso como gallina en un instante. Luke bajó sus besos por mí mejilla, hasta llegar a mi cuello y besar tiernamente esté. Un suspiro de fascinación se escapo de mis labios y sentí como Luke jugaba con mi piel. La mano de Luke salio lentamente de donde estaba y yo abrí los ojos para verlo.

LukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora