Capítulo 17.

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De nuevo estaba sólo, no podía ver ninguna sombra en ese bosque, yo sólo corrían sobre la nieve y las ramas rotas que hacian el ambiente perfecto, pues escuchaba muy bien las pisadas de los soldados corriendo hacía mi y yo, no sabía por donde atacarían. 

Quería que todo esto acabara de una buena vez, ya no soportaba lo que venia ami vida, recuperando cosas y perderlas en menos de 5 minutos, me estaba detrozando a mí mismo mi propia mente y mis pensamientos acerca de mi muerte, pues podía ver ese futuro cláramente pasando una y otra vez sobre todos los pensamientos, de verdad quería regresar, corría para salvarme, mi vida ahora literalmente dependía de ello y lo peor, es que no lo estaba logrando, todavía no estaba totalmente recuperado de todo lo que había pasado. 

Escuché los galópes de un caballa hacía mi, desde algun punto ciego mío, que en realidad, todos eran mis puntos ciegos, pero, cada vez se escuchaban más y más cerca, acompañados de gritos, el sonido de las ramas rompiéndose se acercaba a mí como si alguien corriera; enfoqué mi vista en donde escuchaba el ruído cuando yo ya no escuchaba que alguien venía tras de mí, me sorprendí y me confundí al ver una sombra corriendo hacía mi, supe al instante que era de la resistencia cuando la escasa luz atravesaba las ramas de los árboles dejando ver cada detalle de esa sombra. 

Yo estaba parádo petrificado viendo como esa sombra cada vez se iluminaba más en el camino hacía mi, pero comencé a correr cuando la sobra de los rusos aparecía detrás de ella rápidamente y sí, en realidad era ella, el cabello la delató en seguido a pesar de que su boca estaba cubierta por un pañuelo morado y reconocí que era Aksana, ya había escapado de los rusos y se dirigía a una fortaleza, eso era lo que yo pensaba en esa situación, mientras que corría y ella detrás de mí. 

Las fuerzas se me acabában y sentí un jalón de mi hombro derecho que me impulsó a caer al piso debajo deun tronco hueco e inmediátamente sentí una mano sobre mi boca para que ningún sonido escapara, sería una muy buena distracción para que todos los rusos se siguieran corriendo tras de nada. Al darme cuenta de que Aksana estaba junto a mí, me quede impresionado, en realidad era ella, bueno, no sabía si Aksana tenía ojos azules pero fuera de todo eso, la personalidad y el pañuelo morado con un símbolo y ropa de una resistencia. 

Al rise los rusos y estabámos complétamente seguros de ello, ella quitó su mano de mi boca y se paró del suelo, yo me paré tras de ella y me preguntaba cosas en ruso, yo enseguida, le dije que no hablaba ruso y me miró fijamente. 

Ella comenzaba a sacar un cuchillo de su bota a escondídas mías, pero yo sabía lo que ella tenía en mente, al verla a punto de atacarme le grite que era hermano de Alec, sin duda, abrió los ojos recórdando a mi hermana y su plan de matarme se había desmoronado rápidamente, bajándo el cuchillo y alejandolo de mi vista. 

Aksana me pidió disculpas, pero no entendía lo que yo hacía en la resistencia, por lo cual, de alguna manera me obligo que la llevara la resistencia de la que yo veía. 

¿Cómo se suponía que la iba a llevar, si no conocía el terreno y menos me aprendí el recorrido?, pero no podía decirle eso, pesanría que la estaba engañando y era parte del plan para capturarla, así que traté de recordar el camino y llevarla lo más pronto posible a la resitencia. 

Ella era imponente, líder y astuta, no me sorprendía que ella fuera líder o fundadora de todas las resistencia y menos que mi hermano se haya enamorado de ella, a mi hermano siempre le han gustado ese tipo de mujeres, pero el le llevaba a ella fácil unos 10 años a Aksana, ella efectívamente tenía 17 años y mi hermano, tenía 26 y pronto el cumpliría los 27, no sabía si Aksana cumplió esa edad recientemente o estaría por dejar esa cifra, pero sinceramente eso no me importaba ahora, pero era algo muy raro es decir, nada común que una adolescente fuera capaz de manejar a la mitad de Rusia para actuar contra el gobierno y planear todo esto, sinceramente, eso si me sorprendió. 

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