14.

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Punto de vista de Harry.

Me quedo parado en el rellano de mi edificio por minutos cuando Wendy se va. Sé que no puedo obligarla a quedarse, pero el simple hecho de que aleje a Maddie de mi me destroza.

—¿Harry? ¿Qué haces ahí?—Escucho la voz de Emma y me giro.

Está apoyada en el marco de la puerta mirandome confundida y algo preocupada.

—Nada, vamos dentro.—Me esfuerzo por sonreírle y paso a su lado dándole un beso en la frente.

—Lo he oído todo Haz.—Me dice cuando cierra la puerta y ambos estamos dentro del apartamento.—¿Le has pegado?

La miro y me siento en el sofá.

—Fué un accidente.—Digo agarrandome el pelo con ambas manos.

Noto que el sofá se hunde a mi izquierda y una mano en mi hombro.

—¿Me explicas que pasó?—Me pregunta mi novia, y yo solo consigo asentir.

—Estaba pegando a un chaval y... Joder, Emma fue un puto accidente, le di un golpe al levantarme yo...—Iba a seguir pero me cortó.

—Harry tranquilo ¿Si?—coloca su pequeña mano sobre mi espalda reconfortandome, lo cual agradezco.—¿Que la has cagado? Sí, totalmente. Ella confiaba en ti y la has defraudado, la confianza de las mujeres es difícil de conseguir.

—Emma por dios no quiere dejarme ver a Maddie ¡Cuando se la lleve no volveré a verla!—digo frustrado tapando mi rostro.—No puedo perderla... cualquier juez del mundo me la quitaría.

—Tienes que hablar con ella, contarle toda la verdad, no quiero que sufras.—habla sin dejar de mover su mano por mi espalda.—Yo puedo quedarme con Maddie, ve y buscala, recuerdale que eres un buen padre ¿Por qué no la llevas a tu antiguo apartamento?

—Dios Emma, no se que haría sin ti.— me acerco a ella y junto nuestros labios en un beso lento, un beso dándole las gracias por todo lo que ha hecho por mi.—Te quiero.

—Yo también te quiero.—sonríe.— Y ahora ve, llamala.

Asiento dispuesto a llamarla, pero cuando estoy en la cocina para coger el teléfono y poder llamar oigo a Emma gritar desde el salón "y no la cagues otra vez"

Cojo el teléfono y hago una profunda respiración antes de pulsar la tecla de llamar.

—¿Si? ¿Harry?

Em sí, soy yo.—contesto sin saber muy bien que decirle, es más difícil de lo que pensaba.

¿Esta ya Maddie lista? ¿Llamas por eso?

Sí, es por eso.—miento.—¿Te parece si nos vemos en diez minutos en la cafetería frente a mi apartamento?

Sí, claro. Ahí estaré.

Después de colgar estaba realmente nervioso, ¿Como iba a conseguir que hablara conmigo? Avisé a Emma antes de salir y me asegure de que Maddie estaba bien, me costo decirle adiós ya que no estaba seguro de si esa vez sería la última. Todo dependía de como actuara hoy.

Ya me encontraba sentado en el coche frente a la cafetería, habían pasado justo los diez minutos como habíamos acordado, Wendy debería estar llegando y casi como si me estuviera escuchando aparece en el cruce junto a la cafetería. Intento hacer señas desde el coche para que me vea, pero es inútil así que me veo forzado a salir del coche para llamar su atención.

Me ve en cuanto salgo del coche y se acerca a mi con semblante serio.

—¿Y Maddie?—Me pregunta seria mirandome fríamente y yo juego con mis dedos.

—En mi casa, ¿te llevo?—Digo señalando a mi coche y ella asiente subiendose en el copiloto.

Subo también y empiezo a conducir en silencio, pero no a mi casa con Emma, si no al antigüo apartamento en el que vivimos juntos.

—Por aquí no se va a tu casa Harry.—Dice dándose cuenta.

—Lo sé, no vamos a mi casa.—Respondo simple sin separar la mirada de la carretera.

—¿Qué?—Dice algo sobresaltada— Harry para el coche.

—No.—Digo girando en una esquina.

—¡Harry quiero salir, para el maldito coche!—Aparco frente al edificio y la veo mirando a su al rededor.—¿Por qué me has traído aquí?—Me pregunta más relajada.

—Te contaré todo cuando estemos arriba, algo más relajados.—salgo del coche y camino rápido abriendo su puerta para que pueda salir.

Seguimos subiendo escaleras, ya que el ascensor del edificio no funciona, ninguno de los dos ha vuelto a pronunciar una palabra. Casi hemos llegado y puedo notar la tensión en su cuerpo o puede que este confundido y el único que este en tensión aquí sea yo.

Meto la llave en la cerradura y al entrar dentro miles de recuerdos llegan a mi mente, puede que ahora que este dentro la idea de quedarme aquí con ella a solas sea demasiado arriesgada, hay demasiados recuerdos y puedo cometer una locura. Pero aún así no pienso dar marcha atrás.

—¿Tu también lo estas recordando todo verdad?—me doy la vuelta y puedo ver a Wendy tocando cada mueble mientras cierra sus ojos intentando recordar.—¿Por qué Harry?¿Por qué me has traído aquí?

—Wen.. necesito que me perdones, necesito estar cerca de ti, necesito pasar tiempo con mi hija, os necesito.—me acerco a la puerta donde esta ella y aprovecho para coger la llaves y cerrar la puerta desde dentro por lo que me mira confundida.—Necesito que lo hagas, y hasta que sea así ninguno de nosotros saldra de aquí.

—¡¿Qué!? Harry enserio dejame salir.—corre hacía la puerta intentando abrirla pero sin éxito, vuelve a estar alterada por lo que me acerco a ella para buscar una forma de que se relaje.

—Wen es mejor que te relajes, cuanto antes solucionemos las cosas antes nos iremos.

—¡No pienso perdonarte por todo lo que me has hecho, y mucho menos dejar que pases más tiempo con mi hija!

—Pues cariño, preparate, pasaremos aquí una temporada.

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Holaaa! Chicos lo sentimos muchísimo por no poder publicar esta semana😥 hemos estado ocupadas y aún encima Lu esta preparando un examen, pero intentaremos un día de estos hacer una maratón con varios capítulos como recompensa. Muchas gracias por leer Shakiness chicos espero que os este gustando. 😉💗

Att: Lore y Luci

Shakiness [H.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora