I Hate You But I Love You

13

—¿De verdad vamos con los padres de Daniel?

Asentí. —Sus padres nos invitaron.

Aaron me abrazó. —Te ves hermosa.

—Mira mis mejillas, eso es lo que provocas, sumando que vienes de traje y te ves... ¡Wow! —Le dije sin mirarlo.

Rio. —Te escuchas muy tierna, diciéndome todo esto.

Lo abracé.

Cuando llegamos, las luces estaban apagadas.

—¿Sí es aquí?

Asentí. —Esperame aquí, sino salgo en 5 minutos, entras.

—No creo que pueda entrar...

Lo miré. —¿Y si estoy en peligro?

Sonrió. —Bien, entraré.

Abrí la puerta y alumbré con mi celular, ya todos estaban ahí, escondidos, en cuanto Aaron entrará, todos gritaríamos la frase esperada.

—¿Scar? —Aaron dijo mientras abría la puerta. —¿Estás bien?

Cuando vimos que iba a prender su celular, Daniel prendió las luces y gritamos.
¡Feliz cumpleaños!

Agradezco que un par de amigos, lo grabaron, estuvo a punto de tener un ataqué al corazón.

Corrí a abrazarlo. —¡Feliz cumpleaños!

Me abrazó. —No te había dicho que hoy es mi cumpleaños.

Lo miré. —Y eso estuvo mal, pero lo supimos.

—Gracias a todos, chicos. —Miró a todos.

Los amigos de Aaron aceptaron venir, también Daniel invitó a algunos amigos, y sus padres nos dejaron la casa para todos nosotros con un servicio de chefs y ayudantes.

Al poco rato, salimos al patio trasero, en donde todo estaba realmente adornado.

—Nunca había estado en una fiesta de cumpleaños.

Fruncí el ceño. —¿Puedo preguntar el por qué?

Asintió. —Mis padres nunca han estado conmigo, así que me mandaban a hacer un pastel y los empleados de la casa, estaban conmigo.

Lo abracé. —Entonces es hora de disfrutar esta gran fiesta.

Ahora podía entender con claridad el porque él nunca va a las fiestas del colegio. Siempre ha sido popular, por lo que casi todos lo invitan a fiestas todos los viernes, sin embargo, nunca asintió a ninguna.

Carla se acercó. —Les hemos dejado algo en la habitación de Daniel, cuando lo vean, ya pueden regresar. —Miró a todos. —Que comience la fiesta.

Todos gritaron y la musica comenzó, yo tomé la mano de Aaron y lo llevé hasta la habitación de Daniel.

Prendí las luces y lo primero que captó mi mirada, fueron las cajas sobre la cama, y encima había una carta.

—Dice... —Aaron tomó la carta.

Se que el cumpleaños de Aaron Smith, pero queríamos darles algo para una pareja como ustedes, espero que les guste mucho.
Atentamente: Carla & Daniel.

Abrimos en seguida las cajas, había unas sudaderas, color blancas que tenían como estampado una frase "Always Together" y si juntas ambas sudaderas, se forma dicha frase y un corazón.

—Son realmente hermosas. —Le dije.

Asintió. —Podríamos usarlas a diario y todos sabrían que eres mi novia y nadie te puede mirar.