Capitulo 8

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Merida

Aun me encontraba en el taller junto con Bocón e Hipo. Después de una pequeña discusión que tuvo Bocón con su dragón, el vikingo sin pie ni mano se nos acerco un tanto cansado.

-Bueno, ya es hora de salir muchachos ¿Merida tienes la llave?- asentí y le tendí la llave que logre conseguir. -Bien, rápido que quiero ir a la cama pronto. vámonos gruñido.- dijo soltando un gran bostezo.

Hipo y yo lo seguimos por detrás pero antes de salir Hipo se detuvo y volteó a verme. -Oye Merida, ¿y en donde te vas a quedar a dormir?.- me pregunto. A lo cual no supe que contestar, no había pensado en eso. "muy lista Merida" dije con sarcasmo en mi mente.

-Emm, en realidad no sé. Pensaba ir a una posada.- dije a lo cual ellos me vieron incrédulos.

-¿Una posada? jaja lo siento Merida, pero no hay ninguna posada en Berk.- informo Bocón a lo cual yo puse los ojos en blanco.

-Tranquila Merida, tenemos una casa desocupada cerca de aquí.- me aseguro Hipo brindándome una mirada para que me relajada y después fulminando a Bocón con la mirada.

-¿Enserio?- pregunte aliviada. Hipo asintió y me guio hasta una casa de madera con fachada vikinga y adornos de dragón, la casa se veía nueva como si no tuviese mucho tiempo.

-Esta casa es nueva, hubo un error en el numero de reconstrucción de hogares, aunque muchos la quisieron reclamar yo decidí dejarla por si alguien volvía a quedarse sin hogar.- conto Hipo mientras me tendía una llave que sacaba de un compartimiento de su armadura. ¿por que llevara armadura? me pregunte.

-Gracias.- le dije tomando la llave que me tendía. Abrí la cerradura de la enorme puerta, tome mis pertenencias y entre a la casa.-Nos vemos maña a primera hora Merida.- me aviso Bocón con una sonrisa.

-Si necesitas ayuda en algo no dudes en avisarme.- Dijo Hipo viéndome a los ojos y de nuevo sentí ese pequeño nervio en mi estomago. ¿será que tengo hambre? aunque comí algo de pan que me dio Bocón hace una hora.

-Esta bien.- asentí y cerre la puerta no sin antes despedirme de los dos. Solte un suspiro pesado y vi el interior de la casa, aunque estaba un poco oscura ya que era de noche y no había mucha luz a excepción de la luz de la luna. Me acerque a la chimenea y con ayuda de un pedazo de carbón la encendí.

La habitación se ilumino más y pude ver mejor el interior del lugar; había unos cuantos muebles con pelaje, una pequeña cocina con un caldero, una mesas con sillas. pude notar también que había un segundo piso pues esta tenia escaleras que subían. Subí las escaleras y llegue a un dormitorio amplio con una cama grande para dos personas.

Me quite mi capa negra, al igual que me quite mi vestido verde y botas de cuero quedando solo en corset y bragas, las cuales cambie por mi pijama. Me eche en la cama la cual era realmente comoda y me deje llevar por el sueño pues estaba total mente cansada.

[...]

Mis ojos se abrieron poco a poco, dejando me ver los rayos de luz que entraban por la ventana, me levante de golpe al recordar en el lugar en el que estaba, una sonrisa se dibujo en mi rostro y sin pensarlo más me levante de la cama y me comencé a vestir para mi segundo día en Berk, me puse mi vestido azul oscuro, mis botas de cuero y cepillé mi cabello hasta estar satisfecha con mis rizos. Baje al primer piso tome mi arco y carcaj para luego salir de la casa.

Asegure bien la perilla y me encamine hacia el bosque, no conocía los alrededores de la isla pero sin embargo tome camino hacia las partes traseras de la isla donde pude ver varios arboles, busque hasta toparme con algún árbol con fruto hasta que al fin vi un manzano cerca. Tome una flecha de mi carcaj, apunte con cuidado y solte mi flecha dejando que esta tirada unas cuatro manzanas, tome las manzanas tiradas y regrese al publo para lavarlas y degustarlas antes de ir a trabajar al taller.

Está Dentro De Ti (Mericcup)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora