—Os hemos convocado aquí a todos— Empezó a decir Minho. Toda la ciudad había acudido a una especie de auditorio que había quedado en pie y era a techo descubierto. Los mandatarios, Minho y Hacha, tenían una importante noticia que dar. Todos pensaban y habían rezado para que la noticia estuviese relacionada con el asesinato de Vosh, pero no más lejos de la realidad eso no tenía nada que ver con Vosh. La cuarta fila estaba ocupada por las elisianas con lo cual Marta tenía buenas vistas de Minho, María podía observar con disimulo a Evan quien se encontraba en una esquina del escenario en segundo plano, Lidia observaba atentamente con los ojos entornados a Javi que estaba sentado en primera fila y de vez en cuando giraba la cabeza para volver a girarla rápidamente ante la mirada de furia de Lidia quien estaba deseosa de ajustar cuentas con él, y finalmente, Cristina se había sentado entre Ben y Navaja quienes no dejaban de acercarse a ella apretándola como si se tratase de una salchicha en un perrito caliente, harta de la situación les había mandado a la mierda repetidamente, pero los jóvenes seguían a su bola.—porque tenemos algo importante que comunicar. Ha llegado un nuevo miembro a la cuidad.
Exclamaciones se propagaran por entre el público, aunque las elisianas, todavía acostumbrándose a la ciudad, se miraron extrañadas.
—Debo deciros que estamos muy contentos de poder recibir a una chica ejemplar y que seguro que se integrará muy bien en la comunidad. Dad la bienvenida a Casiopea.
El auditorio estalló en aplausos. Normalmente, todo recién llegado a la ciudad tenía que contestar a las preguntas de los mandatarios y el senado para poder ser aceptado por la comunidad, algo que ya había hecho Marta como portavoz de los elisianos.
Mientras que la chica rubia se presentaba ante todos y daba unos cuantos datos sobre ella, las elisianas empezaron a cotorrear.
—Que fea.— Dijo Lidia.
—Tiene una cara de pato que no puede con ella.— Dijo Cristina.
—Seguro que esta es bollera.— Dijo Marta.
—Me da a mí que esta es una de esas que pretenden llegar vírgenes a los 28 años— Dijo María.
—Si vamos, esa tiene ya el chichi más abierto que un agujero negro.— Contestó Marta.
—¿Qué dices tía?— Intervino Lidia.— Esta marrana tiene cara de que le gusta que se lo hagan por detrás, ¡Oh sí, sí, sí, más, más!— Empezó a imitar Lidia como si estuviese recreando el momento en su mente mientras todas reían.
—Pues a mí me cae bien— Dijo Ben.
—A mí también.— Concluyó Navaja.
Las elisianas los miraron como si les hubiese salido 2 cabezas nuevas a cada uno.
—¿Pero vosotros para qué habláis ignorantes de mierda? ¡Que no sabéis nada!— Respondió Lidia.
—Finalmente,— continuó su pequeño e improvisado discurso la nueva chica rubia de bote— preferiría que me llamarais Cassie.
—Cassie... Cassie... ¿Cassie? ¿Qué mierda de nombre es ese?— Dijo Lidia.
—¿Cómo se pronuncia?— Preguntó Cristina.— ¿Kasi? ¿Keisi? ¿Kesi?
—Pues yo la voy a llamar Pato.— Concluyó María.
Todas miraron a María a la espera de que diese un razonamiento ante dicho mote. María miró a todas y dijo:
—Porque tiene cara de pato. Además le está poniendo ojos a Evan... No, ¿eh? ¡No!— Dijo asestándole un golpe sin querer con furia a Navaja que se encontraba a su lado.
—En honor a Casiopea... perdón, Cassie.— Rectificó Minho.— Celebraremos una fiesta por su llegada, y también en honor a las elisianas que no hemos podido recibirlas como merecen.— Y esto último lo dijo mirando a la pelirroja quien se sonrojó sutilmente mientras todos aplaudían.— La fiesta tendrá lugar esta noche, podéis retiraros.
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Elisian: Ciudad Esperanza
Science FictionDespués de la huida a manos de Janson, el grupo se encuentra con las ruinas de lo que fue la antigua ciudad de Toledo, convertida ahora en una nueva esperanza para todos los supervivientes. Pero no tardará mucho tiempo para que la paz que la ciudad...