Juventud Eterna ||Naruto||

Capítulo XII ✦

➸ Regresando a ese lugar al que llame hogar.

— Oye despierta. — Sentí como me tocaban el rostro. Abrí los ojos lentamente, acostumbrándome a la luz. — Por fin despiertas. — Me levanté y seguido me lleve la mano a la cabeza, me dolía. — ¿Estás bien?, llevas un buen rato inconsciente.

—Hola, y gracias supongo. Pero ¿Quién eres— Pregunté confundida, mientras miraba a mi alrededor, un bosque que se me hace conocido.

—No puedo decir mi apellido, ya sabes por la guerra y esas cosas, pero si te puedo decir mi nombre, es Hashirama, un gusto.

Abri mi boca y la volvi a cerrar pensando. La imagen fugas de Hajime paso por mi mente y unas ganas inmensas de llorar se apoderaron de mi.

—Mi nombre es Hisae.

—¿Qué hacías por aquí? Estas muy cerca del clan Senju. — Se sentó al lado mío.

Lo mire de reojo detallandolo, tenia un cabello corto, usaba una camisa blanca con unos pantalones del mismo color, llevaba un pañuelo amarrado al cuello y sujetaba el pantalón con un lazo de color rojo.

—No sé, estaba en camino a mi antiguo hogar, pero parece que me desmaye. Que recuerdos, aquí conocí a un chico del clan Senju, Tobirama Senju.

—Es mi hermano. — Contestó alegre.

—Entonces eres Senju Hashirama. Soy la mejor descubriendo identidades. —Sonrei victoriosa.

—No eres mala, ¿O sí? — Preguntó. "Soy una criatura del mal" Recordé — Yo... Soy una criatura del mal. — Me levanté, y volví a caer, atrayendo la preocupación de Hashirama.

—Ven déjame ayudarte.

— No tranquilo, tal vez sólo este mareada. — Respondí apoyándome un poco en el. — ¿Cuántos años tienes?

— 14.

Se acerco un poco a mi y me aplico un jutsu medico, pero que chico mas raro, lo acabo de conocer y ya me esta ayudando.

—Soy 5 años mayor que tú pero aún así tienes un buen conocimiento del jutsu médico.- Lo halague.- Pero tu peinado es un poco...- Reí y el se entristeció.- Fabuloso, me encanta.- Se lo alborote.

—Tú también tienes un lindo cabello.

— Ya me tengo que ir, me siento mejor. Pero ¿Qué tal si nos vemos mañana en el medio día Aquí? — Asintió. — Trae a tu hermano si quieres.

Agite mi mano en forma de despedida, mientras caminaba a mi antigua casa.H. Me vendría bien distraerme un poco, la depresión, me ha afectado mucho. Camine a paso lento, recordando, todo, observando todo y viéndote en todas parte, claro sólo es producto de mi triste imaginación, que le gusta atormentarme.

Me quedé parada en la entrada visualizando todo, llorando amargamente. Me limpie las lágrimas, y sonreí, a Hajime no le hubiese gustado verme así. Agarré mi collar de Katana, y entre, recorrí con mis manos todos los lugares, recordando, risas, lágrimas, peleas y en especial a él. Sacudí mi cabeza, sería mejor que me diera un baño estoy hecha un asco.

Salí de la ducha ya lista, Me sentía más relajada. Me pregunto cómo es que aún había agua.

Aunque los recuerdo me atormentaban también me alegraban de una u otra forma, ¿Soy una masoquista? A quién le importa. Me fui a preparar Ramen, justo como él me enseñó, justo como me gusta.

Llevo un mes de camino y ya estoy aquí, pero para que, a pasado tanto tiempo que ya no recuerdo lo que quiero, ¿Por qué regrese? ¿Porque a nuestra antigua casa? Sólo quiero mantener vivos sus recuerdos, siento que en mi corazón no están seguros nuestros recuerdos. Agarré un libro y escribí todo, y cuando digo todo es todo, pero primero es el comienzo cuando nos conocimos.