"Apresúrate, apresúrate, ese es mi bebe"
Esas palabras han rondado por mi cabeza toda mi vida, recordando ese bello momento donde yo todavía tenía unos cuantos meses y era el niño más puro, dulce e inocente que existiera.
Recordando el momento donde todos éramos felices y literalmente, la familia perfecta. Mi madre, una bella modelo Danesa y mi padre, un exitoso abogado.
Cuando cumplí un año, mi padre se fue a la bancarrota, quedando incluso sin un lugar donde vivir y alimentos que comer.
En realidad fue bastante difícil pasar de "tenerlo todo" a "no tener nada"
Con algunos ahorros pudieron comprar una pequeña casa en los suburbios.
Las cosas seguían totalmente normales, pero con el paso del tiempo, mi padre comenzó a frustrarse al no encontrar ningún trabajo, cayendo en las manos del alcohol.
Todavía recuerdo la primera vez que los vi pelear físicamente, parecía ya no ser suficiente solamente con las palabras.
Me encontraba jugando con unos coches de juguete, un regalo que me dieron mis padres después de mucho esfuerzo.
Mi padre llegó a la casa, abriendo y cerrando la puerta bruscamente.
Mi madre trato de no darle importancia, y ese fue un grave error.
"Demonios mujer! Donde está mi comida!?"
Arrastraba las letras y apenas y podía hablar debido al alcohol y probablemente algunas drogas.
"No hay comida"
Mi madre solo dijo la verdad, se volteó y siguió lavando los platos en el fregadero.
"Estás hablando en serio?"
Dijo acercándose peligrosamente a ella.
"Crees que te miento! Por tu maldita culpa estamos así! Acaso no lo ves!?"
Aquel comentario solo provoco hacer enfurecer a mi padre, quien tratando de mantener el equilibrio, alzó su mano y la estrelló en su mejilla.
Ninguno de los dos parecía percatarse que yo estaba allí, ni del daño que me provocaban al hacer eso.
Siguieron forcejeando por unos segundos más mientras se decían insultos; mi padre, ya estando harto, empujó a mi madre con todas sus fuerzas, haciéndola caer al suelo.
Yo solamente era un niño, no sabía nada de lo que pasaba y simplemente lloraba al ver aquella escena.
Mi padre tomó sus llaves y volvió a salir de la casa.
Mi madre se levanto entre sollozos y limpiándose delicadamente las lágrimas se acercó a mí.
"No llores todo estará bien"
Me tomo entre sus brazos tratando de calmarme y además fingía una sonrisa para mí.
A pesar de estar en esa situación, ella trataba de ser fuerte, pretender que nada pasaba, cuando en realidad, se estaba muriendo lentamente por dentro.
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Solamente quería decirles que Julian narrará su pasado por unos cuantos capítulos, hasta llegar a la actualidad, donde tendría 38 años.
Gracias por comentar y votar :')
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Human Sadness (Julian Casablancas)
FanfictionMás allá de todas las ideas del bien y el mal, hay un campo, Te encontraré ahí.