Esperábamos que nos contara eso tan importante, tal vez no era mucho lo que nos interesaba, pero a mi tío si.
Lo miraba como si en algún momento lo fuera a matar, de cualquier manera, pero hasta donde note, lo haría con mucho dolor de por medio.
-¿Qué es eso tan importante? -Cuestionó mi tío con la voz tensa.
-Pues bueno, volví a la ciudad por mi familia,claro, debe de importarles, porque aquí la presente señorita -me señaló-es la más importante de ella.
-¿Yo? ¿Por qué?
-Porque tú, querida, eres mi hermana menor
¿¡QUÉ!? ¿¡RE QUÉ!? O sea, no entiendo, bueno si,pero ¿es en serio?
¡HABÍA ESTALLADO LA PUTA BOMBA DEL MAYOR SECRETO EN MI VIDA!
Mire a todos, estaban más blancos que el papel, y no puedo decir lo mismo de mí, estaba sin hablar, sin que pensar, nada.
Él nos miraba a todos serio, esperando que tragáramos la noticia, que todos despertáramos del shock que eso nos había causado, aun creía que eso era una broma, que él no era, es, o lo que sea que fuese mio.
Yo siempre lo he visto como mi mejor amigo, y una vez me enamoré de él y fue cuando salió del país.
-Es... es... u... una bro... brom...broma, ¿Ve... verd... verdad? -tartamudeo mi tía.
-No, no lo es.
-Eres un mentiroso -Lo acusó mi tío.
-¿Por qué mentiría, tío?
-Porque solo quieres ser el heredero de todo lo que me pertenece a MÍ -recalcó la última palabra.
-Oh, que tenemos aquí, solo un hermano interesado en los bienes que dejó mi padre -sonrió con malicia- como nunca pudiste cumplir lo que tú querías y te conformaste con lo que quisiste.
-Deja de hablar, Nicholas.
-¿Te duele que diga la verdad?
-¡ESA NO ES LA VERDAD, DEJA DE DECIR MENTIRAS, IMBÉCIL!
-No lo trates así -salió mi voz sin siquiera pensar en lo que dije.
-¿Lo vas a defender?
-Pues si, es mi mejor amigo...
-Hermano -me interrumpió
-Cállate, es mi mejor amigo y no lo vas a tratar así solo porque se te da la gana, primero mide tus sucias palabras.
-¡CÁLLATE TÚ, NIÑA ESTÚPIDA!
-Deja de gritar, cariño.
-Tú no te metas.
-¡NO LE HABLES ASÍ!
-Dejen todos de gritar, no vamos a solucionar nada así -les dije y todos voltearon tipo la niña del exorcista.
-¿Y qué esperas? -preguntó el papá de Diego.
-Bueno, sigo contando... -Todos esperábamos expectantes
-Espera, ¿Por qué nunca supe de ti?
-Porque... -Y algo sonó muy duro en la calle.
-¿Qué fue eso?
Todos salimos corriendo esperando que fuera un accidente o algo por el estilo, pero cuando estuvimos todos afuera, terminamos muy sorprendidos.
-Pero... ¿Qué?