Desperté tan de repente que no sabía la hora que era, pero lo que si sabía era que el sol no había salido; mire a mi lado, él estaba ahí, durmiendo, con una pequeña sonrisa en sus dulces labios.
Me levanté con cuidado para no despertarlo, estaba amaneciendo, me acerque a la ventana, el amanecer se veia muy explendido, el color en las nubes era hermoso. Voltee a mirarlo, tenía su mano estirada al lado donde yo dormía, me estaba buscando, rápidamente corri a su lado y busque una almohada y la coloque a su lado, aguante la respiración esperando a ver que hacía, al ver que solo la abrazó solté el aire y me relaje.
Salí de la habitación y baje a la cocina, mire en todos los cajones a ver que había de comer; encontré una caja de cereales, "Uhm, esta bien" pensé. Abrí el refrigerador, busque rápido un yogurt, en realidad no me gustan los cereales y la leche juntas; saqué un bol para echar los cereales y encima eche el yogurt, todo estaba bien, pero de repente me acorde de Jeicop, ¿Qué le serviría?
-Puedes servirme uno de esos, si quieres -Escuche a lo lejos, voltee y ahí estaba, con su cabello despeinado, me sonreía divertido.
-Ven y lo sirves -Conteste en juego, y lleve un poco de cereal a mi boca.
-Eso se ve tan sexy -Dice en un gruñido.
-¿El qué? -Pregunto con la boca llena.
-¡Ay no! ¡No hagas eso! -Empieza a reírse; tiene una risa contagiosa, así que de igual manera empiezo a reír y trato de no escupir. Respiro hondo y trago.
-¡Casi escupo el desayuno, Jeicop! -Digo en medio de las risas.
Dios, que hermoso es.
Se acerca despacio, saca un bol, coge los cereales y los sirve, pero los sirve con leche, hago cara de asco y el ríe de nuevo, yo solo sonrió y sigo comiendo.
-¿Quieres hacer algo hoy? -Me pregunta un rato después.
-Pues... -Un sonido en la planta de arriba nos interrumpe. Yo lo miro con curiosidad.
-¿Tu amigo se quedo a dormir? -Pregunta él molesto.
-No sé, no lo creo -Me pongo derecha y camino sigilosamente.
-¿A dónde vas? -Pregunta obvio
-¿A dónde crees que voy? -Rodee los ojos- Ven, acompañame.
-No, ni loco subiré -Lo miré aguantando la risa.
-Gallina -Susurré.
Seguí caminando mirano hacia arriba, no quería que lo que sea que fuese se escpara de mí, sentí los pasos de Jeicop detrás.
Subimos despacio las escaleras, escuchando de nuevo ese sonido; al parecer venia de mi habitación, volví a mirar a Jeicop, él solo se encogió de hombros; sin pensarlo abrimos la puerta.
-Oh.por.dios -Decimos al tiempo, sin poder creer lo que estábamos viendo.
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Disculpenme por la demora, fue demasiado tiempo, lo sé, pero ya estoy de regreso.
El capitulo es corto, pero luego habrá mucho más.
Aquí estamos de nuevo, gracias por todo esto.
Besos *-*