Inesperado I

Capítulo 05

"Si dejas salir tus miedos tendrás más espacios para vivir tus sueños"

Marilyn Monroe

Estar en sus brazos es respirar calma y tranquilidad, es como si pudiese dar paz en un mundo plagado de conflictos. Solo él puede provocar quietud e inquietud al mismo tiempo, sobre todo cuando hace que desee por más tiempo sus caricias.

—¿Por qué? —le pregunto.

— ¿Por qué?, ¿qué? —repite la pregunta confundido.

—Si, por qué siempre te preocupas tanto por mí. Necesito saberlo.

No responde enseguida lo que aumenta mi incertidumbre, no sé lo que espero en su respuesta, pero, a veces he imaginado que lo hace porque me ama tanto como lo hago yo... aunque jamás se lo diga. Todo se estropearía entre nosotros y no quiero arriesgarme a eso.

—Me preocupo porque eres una mujer extraordinaria, hemos pasado tanto tiempo juntos que comprendo a plenitud que vales más que cualquier otra mujer. Eres capaz de lograr que el día más difícil se convierta en el más agradable con solo una sonrisa tuya. Porque todos los días me levanto entusiasmado al trabajo solo porque sé que estarás aquí.

Suspiro ante sus hermosas palabras.

—Vas a lograr que te crea —susurro. Sus palabras arrasan con todas mis emociones logrando que mis sentimientos por él se disparen.

Toma mi mano, la acaricia suavemente al mismo tiempo que me mira con ternura. Este hombre rompe toda barrera que me esfuerzo por construir para que no traspase a mi interior y que se quede por siempre allí.

—No sé por qué no me crees. Siempre he demostrado que eres con la única persona que soy sincero. Haces que descubra cosas que no pensé que poseía.

—Me haces sentir especial —sonrío y me permito disfrutar de su cercanía y del roce de su mano.

—Eres especial, Millena —da un ligero toque con su dedo en mi nariz —. ¿Ahora me dirás la razón que ha hecho que aún tengas la nariz roja?

—Mi cara a de estar horrible —admito, sobre todo al tenerlo tan cerca escudriñando mi rostro.

—Todo lo contrario, hasta después de llorar te ves hermosa.

—Nelson yo...

—Tranquila —me interrumpe —, solo quiero que me digas por qué llorabas.

—Por una tontería, olvídalo. Vamos a seguir trabajando. —Intento levantarme, pero me retiene.

—¿Por qué intentar cubrir a Nicolle? —pregunta un tanto enojado.

—¿De qué hablas? —me muero de vergüenza que él sepa lo de Nicolle.

—Millena, es mi agencia. Me entero de todo lo que ocurre, especialmente si tiene que ver contigo.

—No la cubro Nelson —admito —, lo que pasa es que no me gusta verme envuelta en problemas.

—Ella solita se los busca, le advertí que dejara de molestarte y no lo ha hecho. Voy a despedirla.

—¡No! —le digo sorprendida y preocupada. Nicolle a pesar de todo es la estrella de la Agencia —. No puedes hacer eso.

—Claro que puedo hacerlo.

—Ella atrae mucho a los patrocinadores y, sobre todo no puedes despedirla ahora que se viene el Fashion Week, sería una catástrofe

—Me importa una..., me importa un reverendo comino que se vaya en pleno evento. Ella no es imprescindible y debe estar al tanto de eso.

Me preocupa la determinación que veo en su rostro, estoy segura que lo hará si no lo detengo.