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Andy Pov's

-en conclusión, hiciste algo muy estúpido para salvar a tu chico, lo que no entiendo es como él te dejó en ese estado-

-antes de estrellarme le había dicho que saltara, entonces supongo que cuando me estrelle ya él estaba lejos- lo dice tan tranquila que no puedo creerlo.

--y... ¿te sientes bien? ---

--la verdad sí, mi cara se ve mal, pero me siento tranquila, estoy lista para poner en marcha nuestro plan bebé—

--me alegra escuchar eso, ya estaba aburrido—

Mia pov's

Mi cabello era gris, el color morado había salido completamente, y ya me llegaba a los hombros, tenía un magullón en la mejilla que me hacía ver como una chica mala, me gustaba, pero no tenía mucho tiempo, así que con teñir mi cabello de castaño , sería suficiente, Andy me mira aburrido, sabe que tengo la cabeza llena de ideas, pero en lo que mi cabello seca aun puedo relajarme.

-que tenemos para esta noche—

--visitaremos nuestros amigos, los detectives Max y Jonathan, luego en el bar Sugar encontraremos al abogado---

---lo conozco, no será difícil hablar con él, ¿Qué hay de los pandilleros? —

--ya sabes una visita al barrio, tengo algo para intercambiar con ellos que los hará hablar—

--¿crees que Frank se esconde con ellos? —

--no lo creo, lo he visto—

--¿y qué vas a darles a cambio? —

--las imágenes de Frank firmando el contrato con la compañía constructora que va a desbaratar el barrio—

--¡!!!auch!!!!, se lo comerán vivo, ¿y qué hay de Silvano? ---

--tiene mucho tiempo escondiéndose, aun nada—

--entiendo... iré arreglarme en una hora nos vamos---

--son las 11 pm—

--mejor—

--mejor me compras un trago—

--mejor te arreglas Andy—

--te extrañaba Mia—

--idiota, suéltame—

Con una sonrisa vuelvo a mi cuarto y termino de secar mi ahora castaño cabello, me miro al espejo y no me siento yo, pero mientras más sobria me vea mejor...

12:15 am

--¿estás seguro que los detectives nos esperan? —

--¿Dudas de mí, Isabela?—

--enserio, ¿Isabela? —

--es un nombre profesional, Isabela Johnson—

--es un nombre viejo— suspiro, soy Isabela, una joven abogada que lleva un año trabajando para Frank, el traje entallado y revelador, me hace ver sensual y eso trato de aparentar, pero por dentro estoy ansiosa por poner a Silvano a salvo.

Salgo del auto, con paso seguro y con Andy detrás, quien es supuestamente un policía, me adentro en un callejón, maloliente, cuando creo que no voy aguantar la peste, miro Andy quien se tapa la nariz con su traje, cuando me mira señala una puerta que no había visto, y con el asco del mundo, la empujo, un aire cálido, mezclado con tabaco y sudor me recibe y sin darme cuenta retrocedo, pero el cuerpo de Andy me empuja hacia atrás, mientras me susurra al oído: "¿por qué tan asustada?" y la verdad no debería estarlo, es solo el hecho de que este movimiento es decisivo para sacar a Silvano del juego y necesito que todo salga bien.

Aclaro mi garganta mientras camino por un pasillo algo iluminado, al seguir avanzando veo un escritorio y unos muebles, un pequeño refrigerador y un comedor, parece un pequeño departamento, se ven 2 puertas más, baño y habitación me digo, un hombre de algunos 50 años mira por la ventana despreocupado y cuando se voltea a verme con una sonrisa otro sujeto sale del baño, en franela y calzón, se sienta como si no fuéramos extraños, solo me quedo de pie, y veo que Andy se ha acomodado en una esquina.

--señorita Johnson no la esperaba, hasta mañanadice el que miraba por la ventana

--están apurados Jonathandice el que debe ser Max

--así es, señores, gracias por recibirnosdigo adueñándome de la conversación

-- sentémonos en el comedor -- dice Jonathan, quien es menos amigable

--estas son las pruebas, imágenes, videos y todo lo necesario, su padre lo está inculpando de robarle, autos y dinero, me contrato a mí para que vigilara, tengo prueba de eso, y de que intentó matarme—

Max toma el sobre en sus manos y mira las fotos como si fuera a memorisarlas, Jonathan no deja de mirarme y con sus manos juntas cierra los ojos y hecha la cabeza hacia atrás.

--entonces señorita Johnson, vienes a nosotros con pruebas de más de 50 millones de dólares a las 12:45 am, con un guarda espaldas y sabiendo que conocemos a la víctima del caso, ¿puedo preguntar por qué?—

-eres un hombre inteligente Jonathan—sonrío, --sé que trabajaban con Silvano al principio, pero también sé que Frank les ofreció dinero a cambio de información y también tengo pruebas de eso, así que vengo a proponerles este trato a cambio de no involucrarlos con nada de esta crisis familiar—toso un poco y Andy les pasa el sobre con las imágenes de ambos conversando con Silvano y luego sentados en un restaurant con Frank. Max tose y me mira sonriente, ha entendido mi punto, Jonathan contempla la imagen como buscándole un defecto, pasan algunos diez minutos y me relajo con la sutil brisa que entra por la ventana, a esta altura me acostumbré al olor a tabaco.

--cuando prefieres que arrestemos a tu cliente—dice Jonathan tranquilamente

No puedo evitar sonreír, siento una paz abrazarme, estas a salvo Silvano

--hoy a primera hora por favor—Andy les pasa otro sobre, este con la dirección de donde se esconde Silvano.

--ha sido un placer trabajar con usted señorita Johnson—dice Max estrechando mi mano.

--el placer es todo mío—

--espero que cumpla con su parte tanto como nosotros cuidaremos bien a su cliente—amenaza Jonathan.

--me aseguraré de que lo hagan, su impunidad está sujeta a la seguridad de mi cliente señores—

Me pongo de pie, al momento que la mueca de Jonathan se ensancha, Andy abre la puerta y salgo casi brincando de felicidad. Al llegar al auto empiezo a cambiar mi atuendo por uno más vulgar, siguiente parada: unos tragos con el abogado barrigón y corrupto de Frank.


AnyiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora