Amor en píxeles (GOT7. Mark Tuan.Tú)

Capítulo veinticinco

  — Podría besarte ahora mismo, puede que eso ayude a aclarar mi cabeza. Siempre... siempre he querido besarte, _____. —soltó, quitándose por fin, un peso que ni siquiera él sabía que llevaba—  

______ soltó el aire que retuvo en sus pulmones al caminar hacia Jackson. Vaciló unos segundos. Se preguntó si se trataba de un sueño, pero automáticamente se dijo que era demasiado real, ¿entonces podría ser de una broma?

— ¿Acaso perdiste la razón? —la voz de Jackson los interrumpió. Pero no hizo que se alejaran y dejaran de mirarse a los ojos, no existía nada a su alrededor —

Jackson sujetó el brazo de _____, pero ella se soltó suavemente, y llevó ambas manos a su pecho. Sus latidos eran demasiado fuertes y se repetían a una velocidad inhumana. Comenzaba a faltarle el aire, se le apareció en la cabeza la idea de un ataque de pánico o algo por el estilo. Quizás ese era el momento, allí era donde caía finalmente a la realidad.

Mark se acercó aún más, y decidió ser quien quería ser hace mucho tiempo. Rodeó la cintura de la pequeña _____ con ambas manos y la llevó hacia él. 

— ¿Qué haces? —balbuceó ____ con su rostro prendido fuego. Mark lanzó una sonrisa nerviosa- ¿hablabas en serio? ¿lo harás?

— ¿Quieres que lo haga? —preguntó sugerente, ella se mordió el labio-

— Jackson... —musitó ella, al recordar a su amigo y próxima cita. Desvió su mirada, Jackson se había ido— ¡maldición! —se quejó. Mark apretó su cintura. No estaba seguro de porqué lo hacía, quizás quería plantarse y demostrarle que él había sido el primero en verla, él había hecho todo por encontrarla, no él, no su amigo.- Mark, lo siento, pero esto no tiene sentido... —____ habló rápido  y tartamuda- Tú.. tu mismo dijiste que no sabías que sentías por mí 

— ¿Entonces no quieres descubrir que pasa entre nosotros después de tanto tiempo? —Mark comenzaba a sentirse molesto. Incluso había notado que lo peor que le podía decir ella, su pajarito, era que estaba interesada en Jackson—

— ¡Mark! ¡deja ya de decir idioteces! Tu... tu eres Mark Tuan. ¡Antes era diferente! Desde el  momento en el que empecé a sospechar sobre tu identidad supe que se acababa todo lo que había deseado, todas mis ilusiones.. todo, acabó cuando me dijiste la verdad —exclamó ____ casi en un grito.—

— Si crees eso entonces no eres tan inteligente como creí cuando estabas tras de una pantalla, niña —contra-atacó Mark, con el mismo tono de voz. _____ no pudo evitar la expresión de sorpresa en su rostro. Estaba indignada. Mark había llegado solo a darle vuelta la vida—

— Bien, puedes crees  lo que quieras, no voy a cambiar de opinión

_____ le dio la espalda a su amigo y comenzó a caminar rápido. Él giró los ojos, bufó y tragó su rabia para seguirla. 

— No puedo creer que pienses así después de todo lo que pasamos juntos... —comentó Mark caminando ya a su lado. _____ le dedicó una mirada desganada y se adelantó.

— Pasamos... hablamos, querrás decir —dijo más tarde, como si se hubiese quedado con aquel comentario rondando... lastimándola-

Mark se limitó a seguirla, acompañarla hasta su casa, como habían acordado. _____ subió hasta la habitación de sus padres, recogió las cosas que su madre le había pedido y se dirigió a su cuarto para buscar algo de ropa de muda.

— Creo que es todo, gracias por ayudarme. No tenía idea de la cantidad de espacio que ocuparían esas cosas. —dijo ____ mientras ambos bajaban las escaleras. Mark cargaba dos enormes bolsos sobre su espalda— ¿quieres tomar algo antes de irnos? —preguntó y notó que no soportaba los silencios entre ellos dos. No después de lo que había sucedido. No dejaba de repetirse una y otra vez la imagen de Mark a una distancia comprometedora diciéndole que podría besarla.- 

Mark dejó caer los bolsos en el suelo y entró a la cocina, donde aceptó el vaso que su amiga le extendía con bebida.

— ¿Entonces así haces las cosas fuera del internet? —preguntó luego del primer sorbo—

— Eres insoportable cuando quieres, ¿te lo he dicho? —bufó ella. Mark sonrió y rozó sus labios con el vidrio de su vaso—

— No puedo creer que no hagas esto solo porque Jackson es tu favorito —mencionó el rubio buscando únicamente provocarla, y lo logró. _____ le dedicó una mirada asesina— ¿Qué? ¡es verdad!

— No hago esto porque tu ni siquiera sabes que piensas de mí, ni que sientes, no sabes nada —se quejó la pequeña, llenando su vaso con agua. Mark se encogió en hombros—

— Ese era el punto, descubrirlo. Ahora, no creo que Jackson quiera volver a hablarte —el rubio le guiñó el ojo. Ella se preguntó como podía ser completamente diferente a el mismo por ratos-

— Haré lo que sea necesario para que lo haga, entonces —___ se apresuró por responder. Quería dejarle en claro que él no podía jugar de esa manera con ella. Mark sintió que se ahogaba con sus propias palabras. ¿Cómo podía pedirle que se alejara de él sin darle falsas esperanzas? ¿qué demonios le sucedía?—

— ¿No pensaste en que el es Jackson Wang? —sonrió él, frívolo.- ¿no pensaste en que tal vez ustedes simplemente no encajarían?-

Esta vez, él había comaldo su paciencia. ____ era la chica que jamás pensaba en las consecuencias y que siempre era tildada de desastre. No le resultó difícil arrojarle el contenido de su vaso en la cabeza del rubio y echarse a reir.

 — ¡¿Te crees divertida?! —gritó Mark y corrió a abrir la canilla para luego con sus propias manos, también empaparla a ella—

_____ gritó al sentir el agua helada sobre su ropa recién cambiada, hizo una expresión de espanto que solo incitó más a su atacante a continuar jugando con el agua hasta que ambos terminaron empapados y cayéndose al suelo. 

Mark miró a su amiga abrazándose a si misma y fastidiada al punto de poder ver su odio en los ojos. Le generó ternura. Quiso abrazarla, quería sonreír y decirle lo tonta que se veía enojada por haber pasado un momento divertido y placentero. Quizás, solo quizás... comenzaba a descubrir sus verdaderas intenciones. 

— Ven, vamos a buscar algo para que puedas secarte —Mark se puso de pie y le ofreció la mano extendiéndosela. ______ demoró en tomarla, pero finalmente lo hizo y caminaron despacio hasta el living para no resbalar—

— Eres un idiota, jamás volveré a invitarte a mi casa, aish —se quejó ella mientras se quitaba sus zapatillas y las dejaba a un lado—

— Tu empezaste, niña —comentó Mark, sin una pizca de queja. ____ lo miró mientras se quitaba su camisa y la remera empapada se pegaba a su torso. El no le había hablado mal, incluso podía sentir una sutil y agradable delicadeza en su forma de hablar— Siento haber dicho eso. —Mark revolvió su cabello y se sentó en el sillón, ella lo siguió— No puedo impedir que sientas algo por Jackson hasta que descubra que sucede conmigo... 

— ¿Por qué piensas que siento algo por él? ¿acaso te lo he dicho? ¿te parece lógico que haya estado tanto tiempo esperando el momento en el que te conociera para nada? ¡Maldición! ¡siempre ha sido Coolguy quien se llevaba toda mi atención! ¡ahora Coolguy tiene un rostro, y odio que sea el tuyo! —exclamó _____ sumamente desgraciada. Pateó su calzado y ocultó su rostro con ambas manos. Mark agradeció aquel acto. No pudo evitar sonreír. Era todo lo que necesitaba escuchar.—

— ¿_______? —Mark llamó su atención, pero ella no tenía ánimos ni coraje para mirarlo— ¿pajarito? —volvió a llamar su atención, y esta vez ella clavó su mirada en él. Pajarito. Lo había dicho, como ella lo había soñado— Te besaré, necesito... hacerlo. 

Mark se acercó bruscamente, tan rápido para que ninguno de los dos pudiera arrepentirse. Besó su labio inferior suavemente, esperó ser correspondido, pero _____ estaba paralizada, así que tomó su rostro, se separó unos centímetros y volvió a besarla, pero esta vez, con intensidad. Sus labios ahora coincidían, se adaptaron a un ritmo deleitoso, embriagador.