La historia de como dos hermanos se querían, aún siendo totalmente distintos.
Pero lamentablemente, nada es tan bonito como parece, las guerras entre razas siempre han existido.
Sin embargo, nosotros tres, somos de diferentes razas y convivimos en p...
Ya es de día, al fin. Sigo cansado, pero no me gusta estar en la cama. Me levanté y me dirigí hacia el baño, donde me ducho y me peino... -Vaya pelos... Quizá un corte de pelo me vaya bien.
Me acabe de vestir, después baje a mi cocina, cuando me termine el café me puse mi abrigo y empecé a dirigirme al pueblo, solo que dando un paseo. Pase por una charca bastante bonita, me suena familiar, pero no se el motivo. Cuando llego a la frontera, la traspaso y me meto por un par de calles hasta encontrar una peluquería de caballeros.
-Buenos días. -dijo un humano de bastante edad. -Muy buenas. -conteste cordialmente. -¿Qué desea? -Vengo a cortarme el pelo. -Ya veo, ¿las puntas? -No, lo quiero corto. El hombre me miró con asombro. -De acuerdo, siéntese al fondo. Seguí todos sus pasos, me lavaron el pelo, me lo cortaron y me lo secaron. -Ya está. -dijo el hombre con un tono muy orgullos y de superación. -Si, muchas gracias. -la verdad, me veía un poco raro, pero me gustaba. El hombre se dirigió hasta la caja y yo le seguí quedándome en el lado opuesto del mostrador. -Serán 15 dólares por favor. -Claro. En ese momento dirigí mi mirada hacia el señor, y dije: -El chico rubio ya te ha pagado. Después el hombre volvió a la normalidad. -Muchas gracias, vuelva cuando lo necesite. -Lo haré. Salí de la tienda y volví a poner rumbo hacia el bosque.
Estaba paseando por las distintas calles del pueblo cuando mi móvil empezó a sonar. Era Derek, conteste inmediatamente. -Hola Derek. -¿Sabes dónde está la casa de los lobos? -No, por que. -Tienes que venir. -¿Qué a ocurrido? -Un demonio, al parecer acompañado de una persona de ojos morados. En ese momento pensé en Nora. -Preguntare a George, no creo tardar más de dos minutos. -Vale, hasta ahora. -Adiós. Finalice la llamada y entonces mire hacia todos los lados, no había humanos así que rápidamente abrí un portal y me metí.
Me encontraba en la sala común de los brujos. -Matilde, ¿George está en su despacho? -Si, claro, ¿qué pasa? -Luego te cuento. La dejé atrás mientras me dirigía hacia su despacho. Una vez delante de su puerta la abro y le veo leyendo un libro. -Se llama antes de entrar Lys. -Es urgente. Entonces George levantó la mirada y me miró confundido. -¿Qué te has hecho en el pelo? -Eso no importa. -Entonces dime, ¿qué ocurre que es tan urgente? -Dónde está Nora. -¿Eso es lo urgente? -Respóndeme. -No lo se, se fue el día que vino Kiara y no la he vuelto a ver. -Es ella... -¿Qué pasa con ella? -Nora está controlando a un demonio. Los ojos de George se abrieron como platos. -¿Cómo puedes estar tan seguro? -Kiara ha vuelto a ser atacada, pero esta vez ha visto unos ojos morados. -No cabe duda...yo también lo sospechaba. -Están esperándome en la casa de los lobos. -¿Tienes permiso para entrar ahí? -Si, me lo cedió Derek -Está en el casco antiguo del pueblo, es un edificio derrumbado casi por completo, está rodeado de bastantes fábricas abandonadas, pero por los ruidos la distinguirás. -Gracias.
Me disponía a salir. -Lys. Entonces paré y me volví a girar. -Ten cuidado, los demonios son peores de lo que dicen los libros. -Gran consejo.
Salí rápidamente y abrí un portal, el cual me llevó hasta el casco antiguo, donde había varios almacenes y viejas fábricas, tal y como me dijo George. Me acerque a la más ruidosa de ella hasta que caí al suelo con un peso encima. Era un lobo que me estaba atacando. Yo esquivaba sus mordiscos y entonces vi como dos lobos más me quitaban al otro de encima.
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Los tres empezaron a pelear, hasta que llegó uno de pelaje negro y ojos verdes; entonces pararon y se transformaron. El siguiente resultó ser Derek. -¿Qué hacéis?¿Por que lo ayudáis? -dijo el chico de pelo rubio y ojos azules. -Cierra la boca Jason. -dijo un chico con el pelo moreno y con mechas. -Sí, no nos hagas repetirlo. -dijo otro chico muy parecido al anterior, solo que sin mechas. -¿En serio? Un demonio acaba de atacar y ahora vemos un brujo, no son suficientes pruebas. -dijo a voces. -Si no te callas, te matare. -dijo Derek -yo invité a este brujo.
Entonces Jason se fue indignado. -¿Estas bien hermano? -dijo el chico con mechas mirándome. -Si, gracias... -No te preocupes Lys, ellos son amigos. – me dijo Derek. -Yo soy Jhon. -dijo el chico con mechas. -Y yo Alec.- añadió el moreno. -Me llamo Lysandro, gracias de nuevo. -No las des. -dijo Alec -Derek, nos vamos con el alpha. – aviso John. -De acuerdo... Entonces ambos se fueron. -Lamento lo de Jason. -Tranquilo, ¿Qué hay de Kia? -Está dentro, con las chicas.
En ese momento ambos giramos nuestras miradas hacia la entrada, donde tres lobos se salían. -¿Qué? -Derek parecía tan confuso como yo. -¡Teresa! -en ese momento uno de los lobos se giró hacia nosotros, y a mitad de camino se transformó en una chica alta y morena. -¿Qué pasa Derek? -¿Y mi hermana? -Quería estar sola. -Vale, ahora la veré. La chica se fue y Derek me miró a los ojos. -Te cuidado. -¿Por qué? – pregunte. -Son muchas cosas las que te apuntan a ti... Sus palabras me hundieron el alma. -¿En serio me crees capaz de herir a tu hermana? -Siempre que algo la ha ocurrido tu estabas, en la iglesia, aquí...tardaste muy poco en encontrar este lugar. -Pregunté a George y él me lo dijo, y lo de la iglesia si yo no llego a estar estaría muerta. -¿Y ahora como está? ¿Siendo atacada a cada hora que pasa? -Eso no es mi culpa Derek. -Pues yo creo que si, desde que entraste en su vida, todo ha cambiado. -Para mi también ha cambiado todo. -¿Así?¿Cómo qué? -Para empezar tu hermana es mi aprendiz, y fue por voluntad propia, ¿crees que me gusta estar rodeado de lobos? Pues no, no me gusta nada. -¿Y por qué no te has ido? No podía decirle que en verdad no la abandone por que me encantaba. -Por todo el potencial que ella tiene. -Claro potencial. Ambos estábamos muy enfadados, pero Derek se controló muy bien. -Derek por favor, aprecio a tu hermana no puedo hacerla daño. -Entonces dime, ¿quién es el del demonio? Tengo prohibido hablar sobre los problemas de los brujos, lo mejor sería decir que no lo sabía. -No lo se... -Ves. -Pero si lo descubrimos te aseguro que lo pagará muy caro. -Yo creo que ya lo se. -Mira, si sigues pensando que soy yo estas muy confundido. -Dame una razón para creerte.
No me lo pensé, o me mataba por traidor o por querer a su hermana. -Por que creo que estoy enamorado de Kiara... Hubo un silencio mutuo. -¿Tu estás....enamorado?-su voz estaba muy confundida. Bajé un momento la mirada y después vi a Kiara salir del edificio.
