The Styles Twins: Against Destiny (EN EDICIÓN)

La Charla

Maratón 2/2

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De vuelta a Londres. One Direction tendría tres semanas de descanso luego de  terminar la gira por Europa, y próximamente por Estados Unidos, la más extensa.

Los chicos se habían separado al llegar al Aeropuerto de Heathrow. Los gemelos fueron directamente escoltados a Holmes Chapel, en Cheshire. Adormilados pero felices de volver a casa, llegaron a las seis de la mañana y su madre los recibió en sus brazos, llenos de amor y muchos besos.

-          Oh mis pequeños, los extrañé demasiado.

-          Hola mamá- le saludó Edward, abrazándola con fuerza, su cabeza siendo apoyada en su hombro-. Yo te extrañé más.

-          Mi turno, mi turno- le dijo Harry empujándolo divertido-. Hola mami- le dijo Harry como un niño pequeño.

-          Harry, hay suficiente espacio para los dos en mis brazos- les dijo juguetona-. ¿Tienen hambre?

-          Solo quiero dormir- manifestó Harry bostezando.

-          Sus camas están arregladas solo para ustedes- dijo ella con dulzura.

Ambos gemelos subieron al mismo tiempo las escaleras, bostezando al unísono. Parecían Zombie y que la única forma de convertirse en humanos era por medio de un sueño reparador.

No se despertaron sino luego de seis horas de sueño continuas. Harry se había despertado primero, bajando las escaleras en shorts de pijama.

-          Buenas tardes- le canturreó Anne desde el comedor.

-          Hola- dio un largo bostezo, desperezándose-. De nuevo- completó y se rascó la cabeza-. ¿Qué hora es?

-          Es medio día- le avisó ella mientras arreglaba la mesa.

-          ¿Dormí tanto?- se preguntó para sí.

-          No me extraña de ti, cielo- le sonrió su madre.

-          ¿Y Gemma? ¿Y Robin?

-          Gemma debería llegar…- decía su madre mientras revisaba su reloj de muñeca, cuando se oyó una puerta abrirse-. Ahora.

Harry vio por encima a su hermana, que dejaba un par de bolsas en el sofá para luego acomodar unos cuantos mechones tras su oreja. Harry sonrió de par en par para acercarse a ella. Ella dejó de revisar las bolsas coloridas para alzar sus ojos azules y verlo.

-          Hola Gem…

-          ¡Harry!- exclamó ella tirándosele a los brazos. Harry apenas pudo sostenerla debido a lo repentino que fue su movimiento.

-          Gemma…- completó Harry y la abrazó con ternura.

-          Mamá me dijo que llegaste temprano pero que te fuiste a dormir.

-          Eso harías tú luego de un largo viaje a casa.

-          Lo sé- asintió ella-. ¿Y Eddie?

-          Debería estar roncando como lirón- comentó Harry cuando dio la vuelta y se sorprendió de verlo sentado en la mesa del comedor tranquilamente comiendo una banana-. ¿Y tú de donde saliste?

-          Te sorprendería lo silencioso que puedo llegar a ser- le dijo Edward con un poco de banana en la boca.

-          ¡Eddie!- exclamó Gemma y corrió a abrazarlo.