La parte buena es que si me dieran la oportunidad de elegir , entre conocerte otra vez y el que nunca te hubiera conocido, escogería conocerte de nuevo. Una y otra vez y cada vez esperaría que te quedaras. La parte mala es que un 80% de mi ser sab...
Emily sentía la brisa del viento en su cara, lo cual era extraño porque a finales de marzo solo puedes pensar en calor. Sintió mucho más frío cuando un líquido cayó encima de sus ojos. Abrió los ojos confundida.
-¿Por qué no estás en clase? - preguntó el muchacho.
- Agradezco que eso haya sido agua y no pipí porque hubieras muerto. - Lo haría si pudiera- Alex soltó una risita suave- Cuéntame ¿Qué haces afuera a esta hora de la mañana? - Lily no vino, estuve muy sola todo el día así que decidí empezar mi fin de semana ya y escapar del sistema. - No creo que dormirte en los jardines de la escuela en horarios de clase sea una buena forma de escapar del sistema- Alex se sentó en el pasto- Dios, esto está húmedo- dijo refiriéndose al pasto. - Esa resulta ser la respuesta que necesitabas, la otra razón por la que no me he ido aún es que he estado echada por tres horas y siento que la mancha de agua verdoso va a quedar por todas partes, mi madre va a matarme cuando vea que he arruinado mis vaqueros blancos. - Es probable- el chico sonrío- ¿Cómo has estado?- preguntó tratando de sonar sincero.
-Bien, no he escuchado de ti en semanas.
- Sí, eso ha sido culpa mía, lamento haberme enfadado contigo en la fiesta de Matt.
- Hice cosas muy estúpidas.
-Lo sé y justamente por eso me siento mal, por no haberte apoyado.
-Era MI problema, pero me gustaría agradecerte a ti por haber golpeado a ese idiota.
- De nada.
- ¿Por qué te enfadaste tanto?
- ¿Cómo?
- Explotaste en enojo y tiraste un celular de 800 dolares.
- Bueno, es que siempre te he visto tan consciente y seria que me sorprendió ver que tomarás decisiones tan estúpidas.
- Tenía el corazón roto.
-Entendí eso después, supongo que lo siento, siento que Edward te haya roto el corazón.
- Yo siento haber sido tan estúpida esa noche, me puse en una muy mala situación y de no haber sido por ti no sé que hubiera hecho.
- Te perdono.
- Gracias, ahora ¿puedes decirme que haces tu afuera?
- Hoy entregamos las solicitudes de universidad, estuve muy enfocado en eso, por todo este tiempo.
- Ohhh, Nunca me has dicho que quieres estudiar.
- ¿De verdad? Se lo digo a todo el mundo, quiero ser doctor desde que tengo uso de memoria.
- ¿Piensas quedarte en Chicago?
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