Una Latina En USA

Capítulo 25

Hoy Ray pasará a recogerme. Ahora puedo llegar a tiempo, siempre y cuando me acueste temprano.

El timbre suena y corro a abrir.

—¿Lista para ir a nunca jamas? —Pregunta apenas abro.

Sonrío y cierro la puerta tras de mí.

—Vamos, luciérnaga.

Subo al auto y me encuentro con corazones rojos en el suelo. Veo a Ray sin entender.

—Perdona los corazones —Dice, tomando algunos y pasándolos atrás —. Víctor salió con su novia ayer y le pareció buena idea llenar todo de corazones.

—No sabía que Víctor tenía novia —Digo.

—Yo me enteré esta mañana cuando le pregunté por los corazones en el auto.

Asiento con la cabeza y el auto arranca. Hablamos de cosas sin importancia y me doy cuenta de algo, él no me ve como más que una amiga. Yo sólo estoy armando una tormenta en un vaso de agua. No quiero ilusionarme con un amor que no existe y luego sufrir por él.

Pienso en sus actitudes. Una vez se sonrojó cuando Víctor preguntó si yo era su novia. En ese tiempo no había el nivel de confianza que hay ahora, además, hoy no se sonrojo con los corazones. Sigue siendo un caballero, pero lo es con todos.

El día transcurre con bastante normalidad. Ahora me encuentro en la cafetería con Daren, Emily y Ray.

—Ya casi son las vacaciones de mitad de año —Digo.

—¿No querrás decir de final de año? —Me corrige Emily.

—Mitad del año escolar, final del año gregoriano. Ustedes entienden —Digo y me sobo los brazos—. Aún no empieza el invierno y ya parece me siento en una nevera.

—No está tan frío —Dice Daren.

—Ustedes ya están acostumbrados a los cambios tan raros de temperatura. Yo vivía cerca al ecuador ¿Recuerdas? No había cambios tan grandes.

—¿Bogotá era frío? —Pregunta Ray.

—Su clima era bipolar —Digo—, cumpla del calentamiento global. Pero se calentó mucho en los últimos años.

Ray se quita la chaqueta y la pone en mis hombros.

—No podemos dejar que Wendy Darling se resfríe —Dice, sonríe y me guiña un ojo.

Siento que un leve calor recorre mi cuerpo, y sé que no es solo por la chaqueta de Ray.

Algo me golpea en la cabeza y me volteo a ver quien fue, aunque ni logro encontrar al culpable. Levanto la bola de papel que me golpeó y la abro. Tenía dibujada a una chica con uniforme de porrista que se estrellaba contra el suelo y se golpeaba la cabeza. Ruedo los ojos apenas veo el dibujo.

—Ya no saben ni con qué molestar —Digo y lanzo la bola a la basura, encestando.

—Podrías entrar a baloncesto —Propone Daren.

Niego con la cabeza.

—No sé si quiera entrar a otra extracurricular. Ya saben mi "problema" podría complicar todo.

—No puedes detenerte por eso, Wen —Dice Emily—. Además, solo te ha pasado una vez ¿No crees que podrías volver al equipo y decirles lo que pasa?

La idea no me convence, no quiero ser carga para nadie. Aunque debo admitir que extraño el equipo. Después de las vacaciones de invierno es la competencia y, sinceramente, me gustaría estar en ella.

—¿Wen? —Dice alguien a mis espaldas, me volteo y me encuentro con Michelle, la animadora que se lastimó y la razón por la que pude entrar al equipo— ¿Podemos hablar?

—Claro.

Me levanto de mi puesto y la sigo hasta afuera de la cafetería. Siento las miradas de todos en mi espalda, pero no les hago caso. Sólo vamos a hablar, no es como si Michelle me fuera a matar o algo.

—¿Por qué dejaste el equipo? —Preguntó apenas quedamos solas.

—Supongo que era de esperarse que preguntarías eso —Digo sonriendo, pero ella no se ríe —. No fue por los problemas con Maggie. Te lo aseguro que no fue por eso.

Suspira y se frota la frente.

—¿Podrías volver? Estamos en grandes problemas sin ti.

—Creeme —Digo—, me encantaría volver. Pero no puedo.

Michelle mira al suelo decepcionada y triste.

—Oye —Digo, intentando sonar alegre—, no pongas esa cara. Tienen la coreografía y yo no hacía casi nada. Apuesto a que Nicolle podría reemplazarme y hacerlo incluso mejor que yo. No era tan importante en el equipo.

Michelle se ríe sin gracia.

—¿No lo notas, verdad? —La miro sin comprender— Wen, tal vez no seas la mejor gimnasta del mundo, pero eras el espíritu del equipo. Maggie es la capitana, indudablemente es la que más y mejor técnica tiene; pero no posee el espíritu que tienes tú. El equipo estaba a punto de deshacerse y tu nos uniste. Aunque no lo hayas notado, eres una parte fundamental del grupo.

Me quedo sin palabras y veo al suelo. Nunca me consideré tan importante.

Michelle vuelve a suspirar y la miro.

—Deberías, como mínimo, decirnos porqué te fuiste —Dice y se va por el pasillo.

Dejo caer la cabeza contra la pared y veo el techo ¿Debería decirles? No creo que el equipo esté destruido, no estaban tan mal ¿Cierto? Maggie podrá mantener al equipo unido. Después de todo, es la capitana ¿No?

Luego de un momento, vuelvo a entrar en la cafetería. No pasan ni dos segundos y Adam me pide que hablemos. Así que vuelvo a salir de la cafetería. A este paso, no podré almorzar.

—No fue por Maggie —Digo, adelantándome a lo evidente.

Adam ríe.

—De eso te habló Michelle ¿Verdad? —Asiento y él vuelve a reír — Entonces seré breve. El equipo se está desmoronando, el espíritu y la actitud de todos se fue por la borda. Hay quienes te odian por dejarnos y quienes odian a Maggie porque dicen que fue su culpa —Abro la boca para responder, pero él me interrumpe—. Sé que no fue por Maggie, sé que te gustaba estar en el equipo. Pero no se por qué lo dejaste. Sólo te pediré una cosa: si no puedes volver, al menos explicamos por qué te fuiste.

N/A:

¡SORPRESA! ¡HOY HAY CAPÍTULO! Lo sé, lo sé, me aman por publicar.

¿Creen que Wen podrá volver al equipo?

¿El equipo se destruirá?

¿Ray la mandó a la friend-zone?

Dejenme las respuestas en los comentarios. No olviden votar, comentar y compartir. Nos leemos en el próximo capítulo.

Bye😘👋